
Durante años, el huevo fue eje de una controversia por su relación con el colesterol y el posible riesgo cardiovascular. Se pensaba que consumirlo de forma habitual aumentaba el colesterol en sangre y favorecía el desarrollo de enfermedades cardíacas.
Sin embargo, en el Día Mundial del Huevo, la evidencia actual refuta esas creencias. Según la Comisión Internacional del Huevo (IEC), en particular la yema, contiene grasas saludables y colesterol dietético, pero su impacto sobre el colesterol sanguíneo resulta mucho menor del que se temía.
De hecho, trabajos de la Universidad de Castilla en España concluyeron que el consumo regular de huevo puede ayudar a aumentar la “lipoproteína buena” (Apolipoproteína A1), que contribuye a eliminar el colesterol de los vasos sanguíneos y ayuda a proteger las arterias.
¿Cuántos huevos se pueden comer al día?

El consumo de huevo en Argentina alcanzará cifras históricas, con un promedio de 380 unidades per cápita en 2025, según la Cámara Argentina de Productores Avícolas (Capia). Este incremento coloca al país como el segundo mayor consumidor mundial, solo superado por México. Este dato acompaña una tendencia sostenida por nuevos estudios sobre la seguridad del huevo en la dieta diaria.
El doctor Alberto Cormillot, especialista en obesidad, afirmó en una nota a Infobae: “El huevo no aumenta el colesterol peligrosamente, y su consumo diario es beneficioso cuando la dieta es equilibrada, salvo que exista alguna contraindicación médica específica”.
Distintas organizaciones, como la Asociación Americana del Corazón y la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN), coinciden en que consumir un huevo por día es seguro para la mayoría de las personas sanas.
Quienes no cubren con otras fuentes de proteína animal pueden consumir hasta dos por día, según el perfil individual y bajo asesoramiento profesional. Para personas que presentan colesterol elevado o enfermedades cardiovasculares, se recomienda limitar la ingesta a cuatro o cinco huevos cada semana, siempre bajo orientación médica.
Investigadores de la Universidad de Castilla precisan que incluir huevos en el desayuno puede favorecer la saciedad, mantener los niveles de energía y evitar el consumo excesivo de calorías en el resto de la jornada. Además, la ingesta de huevo está asociada a una mejor composición corporal, con disminución del índice de masa corporal y aumento de la masa magra.
Aportes nutricionales del huevo

El huevo es una de las fuentes más completas de proteína de origen natural.
Aporta los nueve aminoácidos esenciales que el cuerpo humano no sintetiza y contiene 13 nutrientes vitales, como vitaminas A, D, E y B12, hierro, calcio, fósforo, zinc, y sustancias como la lecitina, clave para el funcionamiento cerebral, nervioso y cardiovascular. La Universidad de Castilla destacó su eficiencia nutricional y su accesibilidad económica como alimento sostenible y rentable.
En la yema se encuentra la mayor parte de las vitaminas y minerales, junto con antioxidantes como la luteína y la zeaxantina, asociados con la salud ocular y cerebral.
Cada huevo mediano contiene cerca de 6 gramos de proteínas y alrededor de 75 kilocalorías.
Además, el aporte regular de huevo se asocia al fortalecimiento muscular, a la prevención de enfermedades neurodegenerativas y al apoyo de las funciones inmunológicas. La relación costo-nutriente es otro de los puntos clave que resalta la Comisión Internacional del Huevo para su inclusión diaria en la dieta nacional e internacional.
Cuál es la mejor forma de comer huevos

El método de preparación es central para el aprovechamiento de sus beneficios. Especialistas como la licenciada en Nutrición de la SAN Silvina Tasat y el cardiólogo Daniel López Rosetti subrayaron a Infobae la importancia de optar por el huevo cocido, al vapor, revuelto con vegetales, tortilla al horno o a la plancha con poco aceite.
Estos métodos permiten una mayor digestibilidad de las proteínas gracias a la desnaturalización térmica y evitan el agregado de grasas saturadas.
El huevo frito, por el contrario, suma grasas saturadas sin aportar beneficios nutricionales adicionales y no se recomienda, en particular para las personas con antecedentes de enfermedad cardiovascular.
Cocinar los huevos hasta alcanzar una temperatura interna de al menos 65℃ (149℉) previene infecciones como la salmonella y mejora la absorción de nutrientes.
Es importante usar siempre huevos frescos, sin fisuras en la cáscara, y no lavarlos antes de su almacenamiento para preservar su protección natural. La higiene y la cocción completa son esenciales para un consumo seguro.
Recomendaciones de seguridad y consumo

El huevo debe sumarse a la dieta de manera equilibrada, en combinación con otras fuentes de proteínas y micronutrientes. No es necesario incorporarlo a todas las comidas del día; la variedad y el equilibrio sigue siendo un principio básico para una buena nutrición.
La Sociedad Argentina de Nutrición y la Asociación Estadounidense del Corazón recalcan que cualquier individuo con antecedentes de hipercolesterolemia, enfermedades cardíacas, indicaciones dietarias específicas o dudas sobre el consumo, debe consultar con un especialista para individualizar la cantidad adecuada.
El huevo es también una herramienta de valor en planes para el control del peso. El consumo de huevo demostró acelerar el metabolismo hasta en un 30%, favorecer la saciedad y generar una reducción en el consumo de calorías diarias. Si bien la llamada “dieta del huevo” ganó popularidad, se trata de un plan restrictivo que no debe mantenerse a largo plazo ni realizarse sin supervisión profesional.
Mitos y realidades sobre el huevo y el colesterol

Las revisiones de la Comisión Internacional del Huevo, la Universidad de Castilla, la Sociedad Argentina de Nutrición y la Asociación Americana del Corazón refuerzan una posición consensuada: la inclusión habitual de uno o hasta dos huevos diarios en una dieta equilibrada no implica aumento de riesgo cardiovascular en personas sanas.
Por el contrario, los beneficios nutricionales junto con la accesibilidad del producto, consolidan al huevo como alimento fundamental en la salud pública. La consulta médica personalizada sigue siendo el mejor recurso ante condiciones particulares de salud o necesidades específicas.
Últimas Noticias
Cómo modificar hábitos cotidianos para preservar la salud de la vejiga y prevenir complicaciones urinarias
La adopción de mejores prácticas de hidratación, higiene y actividad física representa un desafío ante las costumbres arraigadas, pero resulta esencial para mejorar la calidad de vida

4 estrategias para proteger el corazón del sedentarismo, la mala alimentación y el estrés
Según informó The Conversation, la biocinética y la actividad física regular se consolidan como herramientas fundamentales para preservar la salud cardíaca, mejorar la capacidad funcional y disminuir la incidencia de eventos graves como infartos

Cuáles son los 4 elementos de baño que nunca deben compartirse, según la ciencia
Prestar objetos personales favorece el paso de gérmenes entre personas y facilita la aparición de infecciones en la piel, la boca y otras zonas, advierten los especialistas

Realizar ejercicio varias veces a la semana protege la memoria y reduce el riesgo de enfermedades cognitivas, afirma un estudio
Diversas investigaciones recientes señalan que incorporar estas rutinas promueve la agudeza cerebral, favorece el aprendizaje y disminuye las probabilidades de desarrollar afecciones cerebrales, al tiempo que fortalece el bienestar intelectual y la memoria

Caminar o andar en bicicleta: cuál es más efectiva para perder peso y ganar fuerza
Ambas son alternativas accesibles con respaldo científico para reducir grasa corporal y fortalecer músculos. Especialistas de Harvard señalan que la constancia y la elección personal marcan la diferencia en los resultados
