
Con la apertura comercial en los supermercados, almacenes y farmacias, ha dado pie a que todos tengamos acceso a productos cuya venta estaba restringida.
Hoy en día es común “Sacar el médico que todos llevamos dentro” y adquirir a diestra y siniestra todo aquello que supuestamente “favorece” a nuestro cuerpo, cuando en realidad se hace todo lo contrario, ya que hay algunas cosas o sustancias deben ser controladas para su ingesta, como es el caso del magnesio.
El mineral
El magnesio es un mineral esencial para el cuerpo, involucrado en más de 300 reacciones bioquímicas, además de funciones específicas como la contracción muscular, la salud ósea, el sistema nervioso y la regulación de la presión arterial.
El cuerpo humano no lo produce, por ello debe obtenerse a través de la dieta o suplementos cuando sea necesario y cuyo requerimiento, según el Instituto Nacional de Salud (NIH) de Estados Unidos, la ingesta diaria recomendada varía según la edad, el sexo y el estado de salud.
CANTIDADES
- Hombres de 19 a 30 años - 400 mg/día.
- Mujeres de 19 a 30 años - 310 mg/día.
- La recomendación en el embarazo es de 350-360 mg/día.
De igual forma la institución determinó que la ingesta máxima tolerable de magnesio a través de suplementos es de 350 mg/día en adultos, una dosis extra puede provocar efectos secundarios en el organismo, lo que se denomina hipermagnesemia.
CONTRAINDICACIONES
- Síntomas digestivos. Náuseas, diarrea, cólicos abdominales.
- Síntomas musculares. Debilidad muscular, calambres.
- Síntomas cardiovasculares. Hipotensión, ritmo cardíaco irregular (arritmias).
- En casos graves. Paro cardíaco y depresión respiratoria.
Dónde se encuentra
La lista de alimentos con dicho elemento es vasta:
- Vegetales de hoja verde oscura. Espinacas, acelgas, col rizada, brócoli.
- Nueces y semillas. Almendras, nueces de la india, semillas de girasol, semillas de calabaza.
- Granos integrales. Arroz integral, avena, quinoa, pan integral.
- Legumbres. Lentejas, garbanzos, frijoles, guisantes.
- Frutas. Aguacate, plátano, chabacanos, higos, pasas.
- Productos lácteos. Leche, yogur, queso.
- Otros. Chocolate negro, maíz, dátiles.
En caso de experimentar síntomas habituales o constantes, como calambres musculares, fatiga, debilidad, cambios en el estado de ánimo o dificultad para dormir, pudieran ser indicativos de falta de magnesio.
Los niveles normales en sangre deben estar entre 1.7 y 2.2 mg/dL (decilitro), los cuales pueden saberse mediante análisis sanguíneo. Por ende se recomienda consultar a un especialista para que determine la dosis perfecta y los suplementos requeridos según sea el caso y las necesidades de cada persona.