
Durante la Semana Santa, España entera se viste de recogimiento... y su cocina también. Entre rezos y procesiones, el aroma a potaje invade los hogares españoles, recetas que dejan de lado la carne por una vez para dar protagonismo a otros ingredientes, siendo los garbanzos y el bacalao los personajes principales. Con esta base se preparan innumerables variedades del archiconocido potaje de vigilia, una delicia de Cuaresma que se prepara con sus particularidades propias en cada zona de España.
El potaje conquense de Cuaresma es uno de estos platos con historia, donde cada cucharada cuenta un relato de austeridad y sabiduría popular. El protagonista, el humilde garbanzo, se enriquece con espinacas, patata y un sofrito de tomate, pero lo que verdaderamente eleva este potaje son los ‘rellenos’, una suerte de tortillitas de bacalao fritas. Crujientes por fuera y suaves por dentro, estos buñuelos se sumergen en el guiso aportando una nueva textura y más sabor, lo que hace de este potaje una elaboración muy especial.
Para esta receta, nos basaremos en las recomendaciones de la Junta de Cofradías de Semana Santa de Cuenca, la cual presenta una explicación sobre este plato tan tradicional.
Receta de potaje conquense de Cuaresma
El secreto está en la doble elaboración: por un lado, un guiso de garbanzos con verduras y, por otro, los rellenos de bacalao que se incorporan al final.
Tiempo de preparación
Tiempo total: 2 horas y 30 minutos (sin contar el remojo previo de los garbanzos)
- Remojo de garbanzos: 12 horas
- Cocción de garbanzos: 1 hora y 30 minutos
- Preparación de sofrito y rellenos: 30 minutos
- Cocción final: 15 minutos
Ingredientes
- 5 puñados de garbanzos (unos 400 g)
- 1 puñado de espinacas frescas o acelgas (100 g aprox.)
- 5 patatas medianas, peladas y cortadas en trozos “esquinados”
- 2 tomates maduros rallados o triturados
- 1 cebolla grande finamente picada
- Sal al gusto
- Aceite de oliva virgen extra
Para los rellenos:
- 200 g de bacalao desalado y desmenuzado
- 1 cebolla pequeña picada muy fina
- 3 huevos
- 3 cucharadas de harina
- Aceite para freír
Cómo hacer potaje conquense de Cuaresma, paso a paso
- Preparar los garbanzos: Déjalos en remojo la noche anterior. Escúrrelos y ponlos a cocer en abundante agua con sal durante aproximadamente 1 hora y 30 minutos.
- Agregar las verduras: A mitad de cocción (cuando lleven unos 45 minutos), añade las espinacas o acelgas y las patatas cortadas.
- Hacer el sofrito: En una sartén con un chorrito de aceite, sofríe la cebolla picada hasta que esté transparente. Agrega el tomate y cocina hasta que la salsa esté bien reducida. Añade sal al gusto.
- Incorporar al potaje: Vierte el sofrito en el puchero con los garbanzos y verduras. Deja cocer a fuego medio unos 15-20 minutos.
- Preparar los rellenos: En otra sartén, sofríe la cebolla muy picada con el bacalao desmenuzado. Pásalo a un bol y mézclalo con los huevos batidos y la harina hasta formar una masa blanda.
- Freír los rellenos: Con ayuda de una cuchara, forma porciones de la masa y fríelas en abundante aceite caliente hasta que estén doradas. Escúrrelas sobre papel absorbente.
- Finalizar el plato: Añade los rellenos al potaje y deja que den un hervor de 5-10 minutos con el guiso para que se integren los sabores.
- Servir: Sírvelo muy caliente, acompañado de pan y, si se desea, los rellenos extra como segundo plato.
¿Cuántas raciones se obtienen de esta receta?
Esta receta rinde aproximadamente 6 porciones generosas.
¿Cuál es el valor nutricional de cada porción de esta receta?
Cada porción contiene aproximadamente:
- Calorías: 550
- Grasas: 20 g
- Grasas saturadas: 4 g
- Carbohidratos: 50 g
- Azúcares: 5 g
- Proteínas: 30 g
Cabe señalar que estas son estimaciones, y los valores nutricionales precisos dependen de los ingredientes específicos utilizados en la preparación y las cantidades de cada porción.
¿Cuánto tiempo se puede conservar esta preparación?
Este potaje se puede conservar en la nevera hasta 3 días. También se puede congelar, aunque los rellenos pueden perder algo de textura al descongelar.