La carga fiscal “desproporcionada” del IRPF: en España el 40% con menores rentas no contribuye

Alrededor del 13% de los trabajadores en España cobra el SMI, y el salario más habitual apenas lo supera

Guardar
Tributación y subidas en el
Tributación y subidas en el IRPF (Montaje Infobae)

El debate sobre la tributación en España ha puesto en evidencia un problema estructural: gran parte de la población percibe ingresos tan bajos que no alcanza el umbral mínimo para contribuir al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y, si lo hace, tributa un porcentaje muy bajo.

Esta realidad está directamente relacionada con la estructura salarial del país, donde el Salario Mínimo Interprofesional (SMI) se ha convertido en el sueldo de referencia para un elevado número de trabajadores.

Un mercado laboral marcado por el SMI

Según el economista Rafael Doménech, en un artículo publicado en BBVA, aproximadamente un 13% de los trabajadores en nuestro país gana el SMI, una cifra mayor que en países como Francia, Italia o Portugal. Además, el salario más frecuente en España es muy similar al SMI, lo que genera dificultades para la recaudación fiscal y limita el crecimiento económico.

La dependencia de los bajos salarios no solo afecta a los trabajadores, sino también a la sostenibilidad del sistema tributario. Con una parte tan grande de la población exenta de pagar el IRPF, la carga fiscal recae de manera desproporcionada sobre quienes tienen rentas más altas. De hecho, según Doménech, el 10% con mayores ingresos aporta el 55% de la recaudación total, mientras que la mitad de los declarantes en su conjunto solo contribuyen un 3%.

El diseño del IRPF también genera problemas para aquellos que logran superar ligeramente el umbral de tributación. En algunos casos, según Doménech, quienes reciben aumentos salariales apenas ven reflejada la mejora en su poder adquisitivo, ya que hasta un 45% del incremento puede terminar destinado al pago del impuesto. Esta situación, similar a la carga fiscal que enfrentan los contribuyentes con rentas más altas, desincentiva la mejora salarial y dificulta la movilidad social.

Salario mínimo interprofesional (SMI) al
Salario mínimo interprofesional (SMI) al mes en España de 2008 a 2024. (Statista)

El impacto en la recaudación fiscal

Además de la estructura salarial, la distribución de la carga fiscal refuerza la desigualdad en el sistema tributario. Tal y como ha comentado el ingeniero y analista Jon González desde su perfil de X (@jongonzlz), el 40% de los contribuyentes con menores rentas no paga el IRPF, lo que pone de manifiesto no solo la progresividad del sistema, sino también el hecho de que una gran parte de la población tiene ingresos demasiado bajos para tributar.

A su vez, el 5% con mayores ingresos asume el 40% de la recaudación total. “Si pusiéramos a un recaudador de impuestos a recorrer de menor a mayor renta los hogares de España para recaudar el impuesto, a mitad del camino solamente tendría el 3% de su saco lleno”, ha explicado.

Captura de pantalla de una
Captura de pantalla de una publicación de Jon González. (X / @Jongonzlz)

Para corregir estas distorsiones, Doménech propone reformas en el sistema fiscal que permitan una transición más gradual entre tramos de renta, evitando que pequeños aumentos salariales impliquen un salto abrupto en la tributación. Además, se plantea la necesidad de elevar los salarios de manera significativa para que la mayoría de los trabajadores pueda situarse por encima del SMI.

La reforma del IRPF, según él, no solo podría corregir las ineficiencias actuales, sino también contribuir a una distribución más equitativa del esfuerzo fiscal. En un contexto en el que el país busca mejorar la calidad del empleo y fomentar el crecimiento económico, contar con un sistema tributario que no penalice el progreso económico de los trabajadores con rentas bajas sería la clave para garantizar una fiscalidad más justa y sostenible.

Sumar advierte al PSOE que debe "mover ficha": no tiene apoyos para tributar el SMI.