Así serán las retenciones en la declaración de la Renta si cobras el SMI: diferencias en el IRPF si tienes pareja o estás soltero y si tienes hijos

El nuevo salario implica una revalorización acumulada del 61% desde 2018 y afecta a millones de trabajadores

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Un hombre haciendo cálculos con
Un hombre haciendo cálculos con su nómina. (Freepik)

El Consejo de Ministros aprobó el pasado martes 11 de febrero la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) para el año 2025, tras alcanzar un acuerdo con los sindicatos UGT y CC. OO. De este modo, el SMI ha quedado fijado en 1.184 euros mensuales en 14 pagas, lo que supone un incremento del 4,4 % respecto a los 1.134 euros vigentes en 2024. En términos anuales, la cifra asciende a 16.576 euros, 700 euros más que el año anterior.

El nuevo salario implica una revalorización acumulada del 61% desde 2018 y afecta a millones de trabajadores. Sin embargo, este aumento salarial viene acompañado de novedades fiscales, ya que, por primera vez, algunos perceptores del SMI estarán obligados a tributar en la declaración de la Renta.

El Gobierno ha decidido no elevar el umbral de ingresos exentos de IRPF, que se mantiene en los 15.876 euros anuales de 2024. Esto significa que, tal y como indica el Instituto BBVA de Pensiones, determinados trabajadores que antes no tributaban ahora sí lo harán, dependiendo de su situación personal y familiar.

Diferencias en la tributación según la situación personal

Aunque la mayoría de los perceptores del SMI continuará sin tributar, aproximadamente el 20% de ellos estarán sujetos a retenciones. El impacto del IRPF dependerá de varios factores, como el estado civil y la existencia de hijos a cargo.

  • Trabajadores con pareja e hijos menores de tres años: estos contribuyentes seguirán exentos de IRPF y no sufrirán retenciones en su nómina.
  • Trabajadores solteros sin hijos: serán los más afectados por el nuevo esquema fiscal. Se estima que se les retendrá un total de 300 euros anuales, lo que supone más del 40% del incremento salarian de 700 euros respecto a 2024.
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Impacto económico de las nuevas retenciones

El hecho de que algunos perceptores del SMI deban tributar en 2025 suponen un cambio importante, ya que, hasta ahora, los incrementos en el salario mínimo solían ir acompañados de una revisión de los umbrales fiscales para evitar que nuevos contribuyentes pasaran a pagar el IRPF. Sin embargo, en esta ocasión, el Gobierno ha optado por mantener el umbral sin modificaciones.

Para un trabajador soltero sin hijos que perciba el SMI, la aplicación de una retención de 300 euros al año implica una retención mensual de aproximadamente 25 euros en su salario neto. A pesar del aumento del SMI, esta retención reduce parcialmente el beneficio de la subida salarial.

La situación es diferente para quienes tienen cargas familiares. Gracias a las deducciones y beneficios fiscales por hijos a cargo, estos contribuyentes seguirán sin tributar, lo que hace que su poder adquisitivo no se vea afectado por el nuevo umbral.

Es cierto que la subida del SMI supone una mejora para los trabajadores con salarios más bajos, pero también introduce obligaciones fiscales para un grupo determinado de contribuyentes. La decisión del Gobierno de no elevar el umbral implica que aproximadamente 2 de cada 10 perceptores del SMI estarán sujetos a retenciones.

Con este panorama, algunos sectores opinan que los trabajadores con menores ingresos no deberían asumir una carga impositiva adicional y proponen ajustar el umbral exento de tributación para evitarlo.