Cuál es la vitamina más rica en antioxidantes que mejora la circulación de la sangre y protege el cerebro contra el Alzheimer

Los aceites vegetales, las legumbres y las verduras de hojas verde son fuentes naturales de este nutriente esencial para el organismo

Guardar
El aceite de oliva es
El aceite de oliva es rico en vitamina E (AdobeStock)

Existe un nutriente esencial para nuestro cuerpo cuyas propiedades antioxidantes ayudan a proteger las células contra el daño causado por los radicales libres. Estos últimos son los responsables del daño oxidativo relacionado con el envejecimiento y varias enfermedades crónicas, como las cardiovasculares o las neurodegenerativas. Con todas estas funciones, la vitamina E desempeña un papel fundamental en el bienestar, pues también juega un papel crucial en la salud de la piel, el sistema inmunológico y la función celular.

Uno de los beneficios más destacados de la vitamina E es su capacidad antioxidante, señala MedlinePlus. Los radicales libres son moléculas inestables que pueden dañar las células y contribuir al envejecimiento prematuro y diversas enfermedades crónicas. Así, esta vitamina neutraliza estos radicales libres y protege las membranas celulares, lo que ayuda a mantener la salud general del organismo. Este efecto antioxidante también se asocia con la prevención de enfermedades como el cáncer y la diabetes, aunque se requiere más investigación para determinar su alcance exacto.

La vitamina E puede ayudar a proteger el corazón y los vasos sanguíneos, pues contribuye a reducir el riesgo de enfermedades cardíacas al prevenir la oxidación del colesterol LDL (el conocido como “colesterol malo”). Cuando el LDL se oxida, puede acumularse en las arterias y formar placas, aumentando el riesgo de aterosclerosis, infartos y accidentes cerebrovasculares. Además, la vitamina E favorece una mejor circulación sanguínea al mejorar la dilatación de los vasos sanguíneos y reducir la formación de coágulos, lo que contribuye a una mejor salud cardiovascular.

El sistema inmunológico depende de una adecuada ingesta de antioxidantes para funcionar de manera óptima. La vitamina E fortalece las defensas del organismo, ayudando a combatir infecciones y reduciendo la inflamación. Este beneficio es especialmente importante en personas mayores, ya que el sistema inmunológico tiende a debilitarse con la edad.

Algunas investigaciones han sugerido que la vitamina E puede desempeñar un papel en la protección del cerebro contra enfermedades neurodegenerativas como son el Alzheimer y el Parkinson. Su efecto antioxidante ayuda a reducir el daño celular y la inflamación en el cerebro, lo que podría retrasar el deterioro cognitivo y mejorar la memoria.

La piel también se ve beneficiada por la vitamina E, motivo por el que este nutriente se ha convertido en un ingrediente común en productos cosméticos gracias a su capacidad para hidratar, reducir la inflamación y proteger contra el daño solar. También puede acelerar la cicatrización de heridas y ayudar a reducir la apariencia de cicatrices y manchas.

Alimentos ricos en vitamina E

La mejor manera de obtener suficiente vitamina E es a través de una dieta equilibrada y rica en alimentos naturales que la contengan, explica MedlinePlus. Los frutos secos y semillas son excelentes fuentes de vitamina E, entre los que destacan las almendras, las avellanas, las nueces y las semillas de girasol y de calabaza. Estos alimentos no solo son ricos en vitamina E, sino que también aportan grasas saludables, fibra y proteínas.

Los aceites de origen vegetal contienen altas concentraciones de vitamina E, siendo algunos de los más recomendados el de de germen de trigo (uno de los más ricos en vitamina E), el de girasol, el de oliva, el de almendra y el de cártamo.

Las verduras de hoja verde son una fuente saludable de vitamina E, además de aportar fibra, hierro y otros antioxidantes. Las verduras más destacadas son las espinacas, las acelgas, el brócoli y la col rizada. Aunque en menor cantidad que otros alimentos, algunas frutas también contienen vitamina E, como el aguacate, el mango o el kiwi.

El Dr López Rosetti nos cuenta la importancia de consumir frutas y verduras.

Algunos pescados y mariscos son fuentes moderadas de vitamina E y ofrecen otros beneficios para la salud, como ácidos grasos omega-3. Entre ellos se incluyen el salmón, la trucha y los camarones.

Los cereales integrales y las legumbres también contienen pequeñas cantidades de vitamina E, como el trigo integral, la avena, las lentejas y los garbanzos.

Guardar