¿Qué vitamina quita el dolor de las articulaciones y huesos? 

Estos alimentos contienen beneficios que disminuirán las dolencias

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Consumir esta proteína puede ayudar
Consumir esta proteína puede ayudar al dolor de huesos (Imagen Ilustrativa Infobae)

La vitamina D desempeña un papel esencial en la salud de los huesos y las articulaciones, gracias a su función en la absorción de calcio y el metabolismo óseo. Su déficit puede favorecer la aparición de dolor articular y muscular, así como enfermedades como la osteoporosis, osteomalacia y raquitismo.

Esta vitamina favorece la mineralización ósea y ayuda a mantener una estructura fuerte en los huesos. También influye en la regulación del sistema inmunológico y en la modulación de los procesos inflamatorios, por lo que su presencia adecuada en el organismo contribuye al alivio de molestias articulares y óseas. La insuficiencia de vitamina D se asocia con mayor riesgo de dolor crónico, inflamación y debilidad muscular.

Entre las causas habituales de deficiencia se encuentran la baja exposición solar, problemas de absorción intestinal, determinados trastornos médicos y una dieta pobre en alimentos ricos en vitamina D. Las personas mayores, quienes viven en latitudes alejadas del ecuador o quienes pasan la mayor parte del tiempo en interiores, presentan mayor riesgo de presentar niveles insuficientes.

(Imagen Ilustrativa Infobae)
(Imagen Ilustrativa Infobae)

El dolor articular relacionado con la deficiencia de vitamina D suele manifestarse como una molestia difusa o una sensación de malestar en articulaciones y músculos. En casos avanzados, la deficiencia puede derivar en fragilidad ósea, mayor predisposición a fracturas y degeneración de cartílago. La reposición de vitamina D mediante suplementación o una alimentación adecuada puede contribuir a mejorar la función articular y reducir el dolor en personas con niveles bajos de esta vitamina. Por este motivo, mantener niveles adecuados resulta fundamental para la prevención y el tratamiento de afecciones óseas.

Además de su papel en el bienestar óseo, la vitamina D interviene en la producción de proteínas necesarias para la función muscular. Su déficit suele estar relacionado con debilidad y dolor muscular, lo que puede acentuar el malestar en pacientes con problemas articulares y esqueléticos. El diagnóstico de deficiencia se realiza mediante análisis de sangre, y su tratamiento varía según la causa y gravedad.

La exposición solar es una vía importante para la síntesis de vitamina D, ya que la piel la produce a partir del colesterol cuando recibe radiación UVB. Sin embargo, la dieta también resulta determinante para asegurar cantidades adecuadas, especialmente en quienes reciben poca luz solar.

Alimentos ricos en vitamina D

La alimentación es clave para
La alimentación es clave para ser saludable y evitar dolencias (Imagen Ilustrativa Infobae)
  • Pescados grasos (salmón, atún, sardina, caballa)
  • Hígado de res
  • Yema de huevo
  • Aceite de hígado de bacalao
  • Lácteos enteros y fortificados (leche, yogur, quesos)
  • Hongos expuestos a luz ultravioleta
  • Alimentos fortificados (cereales, jugo de naranja, margarinas)

La incorporación de estos alimentos en la dieta, junto con una exposición solar razonable, contribuye a mantener niveles óptimos de vitamina D en el organismo. Se recomienda consultar a un especialista antes de iniciar cualquier suplementación.