
Aunque parezca difícil de creer existe una fuente vegetal que puede aportar una cantidad similar a la que aporta el calcio de la leche, e incluso, en ciertas condiciones, puede llegar a aportar una cantidad mayor.
Nos referimos a la morera negra, conocida científicamente como Morus nigra, la cual es un árbol frutal perteneciente a la familia Moraceae, originario de Asia occidental y el suroeste de Europa, que es valorado tanto por sus frutos comestibles como por sus beneficios medicinales a pesar de lo cual es poco conocido aún en muchos lugares del mundo.
También conocidos como moras negras, sus frutos tienen una apariencia ovalada y un color que varía de rojo oscuro a negro cuando están maduros. Son jugosos, de sabor dulce y ligeramente ácido, y se utilizan en la elaboración de jugos, mermeladas, postres. Sin embargo, de lo más valioso que llega a tener son sus tallos y hojas los cuales concentran gran parte de sus nutrientes y con los que es posible elaborar un té que brinda numerosos beneficios.
Entre estos destaca uno que es poco conocido pues es reciente el descubrimiento de que puede ser una excelente opción para la salud de los huesos y la prevención de la osteoporosis, tal como lo señaló un estudio realizado por el Ministerio de Salud Japones, donde señalan que sus beneficios pueden ser similares al de los lácteos pues pueden llegar a aportar hasta 22 veces más calcio que la leche.

Por qué la mora negra puede ayudar a prevenir la osteoporosis
El té de mora negra puede ayudar a fortalecer los huesos gracias a su contenido de nutrientes clave que benefician la salud ósea. Sus hojas y frutos contienen, además de calcio, otros importantes minerales como magnesio, fósforo y potasio, que son esenciales para mantener la densidad y estructura ósea.
Además, la mora negra es rica en antioxidantes, como polifenoles y flavonoides, que protegen las células óseas del daño causado por el estrés oxidativo, un factor que puede contribuir a la pérdida de masa ósea con la edad.
Por su parte, la vitamina K, presente en las moras negras, también juega un papel importante, ya que contribuye a la formación de proteínas necesarias para la mineralización ósea y promueve la retención de calcio en los huesos.
Por último, los compuestos antiinflamatorios presentes en el té de hojas de mora pueden ayudar a reducir la inflamación crónica, que puede afectar negativamente la salud ósea.

Cómo preparar y consumir un té de mora negra
Para preparar y consumir un té de mora negra, puedes utilizar sus hojas secas o frescas, ya que ambas contienen propiedades beneficiosas. A continuación, el proceso:
Ingredientes:
- 1 cucharada de hojas secas de mora negra (Morus nigra) o 2-3 hojas frescas.
- 1 taza de agua (250 ml).
Preparación:
- Hierve el agua en una olla o hervidor.
- Añade las hojas de mora negra al agua caliente. Si usas hojas frescas, lávalas antes de usarlas.
- Deja reposar durante 5-10 minutos, cubriendo el recipiente para mantener los aceites esenciales.
- Cuela la infusión para retirar las hojas.
Consumo:
- Tómalo tibio para aprovechar mejor sus propiedades medicinales.
- Puedes beberlo 1-2 veces al día, preferiblemente después de las comidas.
- Si deseas realzar el sabor, puedes agregar unas gotas de jugo de limón, miel o una pizca de canela, según tu preferencia.
Este té se asocia con beneficios como favorecer la salud ósea, mejorar la circulación y ayudar a la digestión, aunque su consumo debe realizarse con moderación y, en caso de embarazo o condiciones médicas específicas, consultando con un especialista.