
La guerra comercial declarada por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, cuya principal munición es la implantación de nuevos aranceles ha originado el pánico en los mercados, hundiendo las bolsas a niveles que no se conocían desde la pandemia. Un ejemplo es el Ibex 35, que desde el viernes soporta una caída del 10,9%, con lo que se han borrado de un plumazo prácticamente todas las ganancias del año. El viernes, el selectivo español se desplomó un 5,83%, algo más que este lunes en que las caídas han sido del 5,12%. Estas bajadas se han traducido en que las 35 principales cotizadas de España han visto evaporarse su valor en 83.700 millones de euros.
Este desplome en vertical de la bolsa ha llevado a muchos accionistas a plantearse si seguir invertidos o deshacer posiciones y vender sus acciones para invertir ese dinero en activos más seguros, que actúen como refugio mientras la tormenta bursátil provocada por Trump se calma. “Ante este escenario de gran incertidumbre, gestores e inversores han optado por reducir sus posiciones de riesgo a marchas forzadas”, señala Juan José Fernández-Figares, director del Departamento de Análisis de LInk Securities.
No obstante, hay analistas como Kai Torrella, consejero delegado de Gesinter, que piensan que no es momento de vender: “El viernes compramos renta variable y hoy seguimos haciéndolo. No pensamos que sea momento de vender, sino de posicionarse para la recuperación”.
¿Mantener o vender?
Antes de tomar la decisión de mantener o vender, los expertos recomiendan prudencia y no dejarse llevar por el pánico porque un movimiento precipitado puede resultar muy caro. Javier Cabrera, analista de XTB, considera que dependiendo de las necesidades financieras del ahorrador le convendrá más mantener las acciones o venderlas.
Incide en que si esa persona ha invertido en bolsa los ahorros que no necesita en varios años, “lo lógico es mantener”, ya que “aunque en el corto plazo sigamos viendo caídas, este tipo de sucesos suele ser una buena oportunidad para bajar el precio medio con inversión periódica y compras esporádicas”. Considera que el objetivo no es comprar en el punto más bajo, sino “a buenos precios”. A su juicio, “reposicionar la cartera cuando ya ha pasado algo no suele tener un buen efecto y, además, suele eliminar tu potencial revalorización”.
La decisión del pequeño inversor debe depender de su perfil financiero y de su aversión al riesgo, afirma Antonio Castelo, analista de iBroker: “si tiene un horizonte largo y tolera la volatilidad, permanecer invertido o aprovechar para comprar acciones de calidad a precios bajos puede ser una buena estrategia”. No obstante, “si necesita liquidez o se teme más caídas, vender o moverse hacia activos menos volátiles, como acciones defensivas o bonos, puede ser más prudente”, señala. En ambos casos Castelo cree que lo más importante es diversificar la cartera y evitar decisiones impulsivas para gestionar el riesgo.
Valores para seguir invertidos
La bolsa seguirá dando oportunidades, aseguran los analistas, pero siempre que se elija bien. Hay valores que, por su perfil defensivo o baja exposición internacional, podrían capear mejor el trumpazo. Son valores con baja exposición al comercio internacional, especialmente a EEUU, y un perfil defensivo que ofrezcan estabilidad en un entorno de incertidumbre. Castelo destaca entre estos valores Iberdrola, Endesa, Naturgy, Redeia, Merlin Properties e Inditex, ya que “según nuestros criterios de análisis y contrastado con opiniones recientes de gestores y analistas, podrían ser menos vulnerables a las turbulencias derivadas de los aranceles”.
Apunta que en el caso de las utilities como Iberdrola, Endesa, Naturgy, Redeia, cuentan con un núcleo defensivo que asegura que la cartera resista caídas bruscas del Ibex si los aranceles generan pánico. “Estas empresas dependen poco del comercio global y tienen ingresos garantizados.
En el caso de Merlin Properties, cree que diversifica “ofreciendo un refugio alternativo basado en activos reales y rentas locales, inmune a las políticas de Trump”. Mientras que Inditex “añade un valor de crecimiento con fundamentos sólidos, menos expuesto que otros cíclicos, como bancos e industriales, y capaz de adaptarse a entornos difíciles”, argumenta el analista de iBroker.
Otras compañías bien posicionadas para invertir ahora son, en opinión de Javier Cabrera, las de consumo defensivo, ya que “todavía tienen margen para hacerlo bien”. También le gustan las del sector farmacéutico y coincide con Castelo que “las utilities podrían establecerse como acciones refugio, a pesar de que, probablemente, también sufran una leve caída de los ingresos”.

Sectores de los que huir
Lo que tienen claro los expertos es que los inversores tienen que huir de determinados sectores porque seguirán cayendo en bolsa. Entre ellos, Cabrera destaca el automovilístico y el industrial porque “pueden seguir sufriendo aunque se solucione el problema y la recuperación será más lenta. Esto se debe a que estos sectores ya estaban teniendo problemas incluso antes de que habláramos de los aranceles”.
Oro y renta fija
Los que finalmente opten por abandonar la bolsa pueden dirigir el dinero obtenido a activos que les garanticen seguridad mientras los mercados sigan volátiles. Los analistas coinciden en que uno de ellos es el oro.
“El oro puede seguir haciéndolo bien en el corto plazo, aunque probablemente corregirá con fuerza cuando se solucione el problema”, señala Cabrera. La renta fija a corto plazo es otra alternativa, ya que puede tener un buen desempeño, sobre todo la estatal, reconoce el analista, debido a que “los tipos siguen siendo atractivos en vencimientos cortos, con las letras del tesoro alemán por encima del 2% a 3 meses”.
Por su parte, Sergio Ávila, analista de IG, considera que los mejores refugios son ahora los Bonos del Tesoro, renta fija a corto plazo, o coberturas con opciones barrera en cualquier activo.

¿Qué hacer con las cripto?
En cuanto a las criptomonedas hay opiniones encontradas entre los expertos. Antonio Castelo cree que no es un buen momento para invertir en ellas por el gran riesgo que conlleva y su gran volatilidad. Mientras que para Cabrera depende de la cripto: “Nosotros siempre diferenciamos entre bitcoin y el resto de criptomonedas. En ese sentido, bitcoin sigue teniendo una correlación alta con las acciones tecnológicas, por lo que el comportamiento en este tipo de eventos es muy similar. Es decir, cuando empiece la recuperación tendrá un gran desempeño, pero no sirve como sustituto del oro en estos momentos”.
En cuanto al resto de divisas digitales opina que habría que valorarlas como proyectos individuales y “hay un porcentaje de ellas que no se les puede tomar en serio, por lo que pensamos que hay oportunidades serias en la bolsa mucho más atractivas”.
Ávila tampoco cree que sea un buen momento para llenar las carteras con criptomonedas, “me parece que es momento de estar en liquidez y esperar unas semanas, o algún que otro mes, a que todo se estabilice, se forme un suelo de mercado cuando se tenga que formar y tener dinero líquido para comprar gangas en ese momento”.
La gran pregunta es cuándo la bolsa dejará de bajar. Fernández-Figares lo tiene claro: “únicamente una rectificación por parte del gobierno de Estados Unidos, suspendiendo parte de las tarifas anunciadas e iniciando negociaciones con sus principales socios comerciales, podría servir para parar esta dinámica, aunque, de momento, damos una baja probabilidad a este escenario dadas las declaraciones del presidente Trump y de su equipo de asesores”.