
Es una situación relativamente habitual: preparas una cena con en casa, te pasas la tarde elaborando el mejor menú posible y cuando la mesa ya está preparada te das cuenta de que no has comprobado la bebida. Por ello, para enmendar la situación, vas corriendo a la tienda más cercana y la compras. Sin embargo, no te ha dado tiempo a enfriarla y es ahí cuando recurres al congelador.
Esto puede parecer una solución rápida, pero si no se hace correctamente, puede provocar desde cambios en el sabor hasta la rotura del envase. Tanto las bebidas con alcohol como las sin alcohol tienen comportamientos distintos al congelarse, por lo que conocer la forma adecuada de conservarlas es fundamental para evitar accidentes y garantizar que se mantengan en buen estado.

Qué pasa si metes una bebida en el congelador
Cuando una bebida se introduce en el congelador, la baja temperatura hace que su contenido se enfríe rápidamente. Sin embargo, no todas las bebidas reaccionan igual. Los líquidos que contienen agua, como los refrescos, zumos o cervezas, se expanden al congelarse. Esta expansión puede hacer que el envase —especialmente si es de vidrio— se rompa, provocando derrames o incluso pequeños estallidos.
En el caso de las bebidas alcohólicas, la reacción varía según el grado de alcohol. Las que tienen una graduación alta, como el vodka o el ron, pueden mantenerse líquidas a temperaturas bajo cero debido al punto de congelación del etanol. No obstante, otras bebidas con menor graduación, como el vino o la cerveza, sí pueden congelarse y sufrir alteraciones en su sabor y textura.
Cuánto tiempo puede estar una bebida en el congelador
Uno de los errores más frecuentes es dejar la bebida olvidada en el congelador durante demasiado tiempo. Por lo general, las bebidas sin alcohol no deben permanecer más de una hora, ya que después comienzan a congelarse. En el caso de bebidas alcohólicas con bajo contenido de alcohol, el tiempo recomendado es de unos 30 minutos.
Los expertos recomiendan establecer un temporizador o una alarma para evitar que la botella permanezca más tiempo del necesario. Este simple gesto puede prevenir que el contenido se expanda y provoque daños en el envase o en el propio congelador.
Cómo guardar la bebida correctamente en el congelador
Para enfriar una bebida en el congelador sin riesgos, es recomendable seguir algunos pasos básicos:
- No llenes completamente el envase: Si se trata de una bebida envasada en casa, como una botella reutilizable, deja un espacio libre para que el líquido pueda expandirse sin romper el recipiente.
- Evita las botellas de vidrio cerradas herméticamente: Estas pueden estallar si el líquido se congela. Si decides usar vidrio, asegúrate de que no esté completamente cerrado o, al menos, no lo mantengas por mucho tiempo.
- Envuelve la botella con un paño: Enfriarla de esta manera ayuda a distribuir la temperatura y puede evitar que el envase se dañe.
- No congeles bebidas carbonatadas: Los refrescos con gas pueden explotar al congelarse debido a la presión interna que se genera.