Son ya incontables los creadores de contenido estadounidenses que, en cuanto pisan España, quieren mudarse al territorio y empezar una nueva vida en el país. Las condiciones laborales, gastronómicas y climáticas son algunos de los aspectos que atraen a extranjeros como Morgan (@MorganInSpain) a asentarse.
Hace muchos años que este fenómeno sucede, pero tras el ‘boom’ de Emily in Paris, la serie de Netflix donde una americana se va a trabajar para una firma de publicidad en París, muchas estadounidenses se han creado perfiles con la misma temática con la esperanza de volverse tan populares como lo es Lily Collins en su serie.
En uno de sus últimos videos, la usuaria, que cuenta con más de 200.000 seguidores en Instagram, relata a través de un video, cuáles son las tres cosas que España hace mejor que “cualquier otro país”.
“En mayo de 2021 empacamos nuestras vidas (y a nuestro querido Milo) y nos mudamos al otro lado del Atlántico, a Madrid, España”, explica la joven en su página web, en la que tiene un blog con guías de viajes por México o Miami, donde todavía no ofrece ninguna recomendación sobre España.
Calidad de vida y disfrute
Los aspectos que la influencer destaca son la “increíble calidad de vida” y que “lidera uno de los estilos de vida más sanos”. Además, la joven apunta que en España se “disfruta la vida al máximo”, mientras ofrece videos de ella con sus amigos saltando a una cala con aguas azul turquesa.
La calidad de vida española es algo que suelen destacar muchos creadores de contenido que se mudan al país, entre otras cosas, por el acceso a la Seguridad Social, algo que brilla por su ausencia en países como Estados Unidos, donde una visita al médico supera las tres cifras en dólares.
Ante la oleada de migrantes que Donald Trump quiere deportar de Estados Unidos al revocar el derecho a la nacionalidad por nacimiento, varios usuarios se han dedicado a explicar cuáles son las diferencias de acceso para personas que quieran solicitar la nacionalidad en España en comparación a la estadounidense.
En ocasiones, los españoles no apreciamos suficiente las ventajas de tener productos de primera mano y con denominación de origen española. Pero sobre todo, a veces no valoramos suficiente el tener la dieta mediterránea.
Los norteamericanos “tienen una cultura de comer comida basura y procesados”, dijo hace un tiempo un usuario de Tiktok español que se había ido a vivir a los Estados Unidos.
“Tú te puedes encontrar en mitad de la nada un puestecillo donde Cristo perdió su zapatilla, que ahí va a haber un tío vendiéndote pizzas, hamburguesas y perritos calientes”. Algo que, al parecer, le ha hecho sentirse orgulloso de su cultura de origen: “No sabéis la suerte que tenemos con la dieta mediterránea en España”.
La dieta mediterránea se caracteriza por un alto consumo de frutas y verduras, cereales integrales, legumbres, frutos secos, pescado y aceites monoinsaturados o poliinsaturados, pero con una ingesta limitada de alimentos muy procesados. Estas dietas son ricas en vitaminas B, antioxidantes, ácidos grasos poliinsaturados omega-3 y fibra, y bajas en grasas saturadas, azúcar y sodio.
