“Comer bien es una prioridad absoluta en el Norte de España”, asegura The New York Times, una verdad incuestionable que se refleja a la perfección en su entramado de restaurantes. Desde sus barras de pintxos hasta sus estrellas Michelin, desde los locales que inundan las calles de Vitoria hasta los pequeños establecimientos escondidos en sus zonas rurales. En esta última categoría se encuentra Arrea!, un proyecto alavés que está dando mucho de qué hablar.
El restaurante ubicado en el pequeño pueblo de Santa Cruz de Campezo, una propuesta que suma una estrella Michelin y dos Soles Repsol, es el protagonista de un reportaje en The New York Times, en un artículo en el que el medio recogía los cinco mejores restaurantes para comer en Euskadi. El reportaje, que firma la periodista Caitlin Raux, se hace eco de las recomendaciones de Álvaro Garrido, el chef del restaurante bilbaíno Mina, con una estrella Michelin. Y, entre sus cinco favoritos, el local de Edorta Lamo figura en primer lugar.
En el corazón de la comarca de la Montaña Alavesa, el restaurante Arrea! ha logrado destacar en el panorama gastronómico internacional gracias a su enfoque en la sostenibilidad y la tradición culinaria local. Este establecimiento, liderado por el chef Edorta Lamo, aprovecha la riqueza de los productos autóctonos para hacer una moderna interpretación de la cocina de subsistencia de la región.
El chef Lamo, oriundo de Álava, fundó Arrea! en 2018 tras una trayectoria de 15 años en el restaurante A Fuego Negro, conocido por su enfoque innovador en los pintxos. Con este nuevo proyecto, Lamo decidió regresar a sus raíces y rendir homenaje a la cultura y la gastronomía de la Montaña Alavesa, con un concepto basado en la cocina de subsistencia y en la relación histórica de los habitantes de la región con su entorno natural.
En sus platos, Lamo utiliza ingredientes procedentes de la caza, así como hierbas silvestres, trufa, miel y frutos autóctonos casi desaparecidos, elementos que representan la esencia de la tierra alavesa. Según el propio chef, esta propuesta busca rescatar una cultura que ha sido “descuidada, infravalorada y olvidada por la mayoría incluso de sus habitantes”.
El compromiso de Arrea! con la sostenibilidad ha sido clave para su reconocimiento. En el mismo día en que recibió su primera estrella Michelin, el restaurante también fue galardonado con una estrella Verde, un distintivo que premia las prácticas responsables con el medio ambiente. Según explicó Lamo a la guía Michelin, su enfoque en la caza no solo responde a una tradición local, sino también a una necesidad histórica: “Nuestros antepasados no tenían hectáreas para el cultivo o el ganado, así que tenían que ir al monte a ganarse el sustento. ¡Ellos ya lo cuidaban y tenían responsabilidad ecológica!”.
Tres espacios, tres experiencias gastronómicas
El restaurante se divide en tres ambientes diferenciados, cada uno con una propuesta culinaria única. El comedor principal es el espacio más gastronómico, donde se ofrece el Menú Arrea!, un recorrido por los productos más emblemáticos de la región. Este menú comienza con un almuerzo de bienvenida, conocido como ongietorri, que incluye patés, quesos, curados y conservas locales. Los comensales pueden elegir un mínimo de tres pases, con un costo inicial de 125 euros por persona, y añadir platos adicionales por 25 euros cada uno. Entre las opciones destacan creaciones como Txuletika de corzo al Sarmiento, Trutxita a la Navarra y Sandwitx de Trutxa, todas ellas inspiradas en la tradición culinaria alavesa.
Por otro lado, La Kuadra ofrece una experiencia más informal, con mesas altas y un ambiente relajado que recuerda a las kuadras de las casas del pueblo. Aquí se sirve el Menú Mendialdea, un menú cerrado de cinco platos y putxero, basado en la temporalidad y en los productos disponibles en el mercado local. Este menú tiene un precio de 50 euros por persona, sin incluir bebidas.
Finalmente, el bar de Arrea! es un espacio más casual, con una amplia barra de madera quemada que protege la cocina vista. En este ambiente, los visitantes pueden disfrutar de una selección de vinos, cervezas, sidras y pintxos, ideales para quienes buscan una experiencia más ligera o están de paso por la zona.