Un hombre ordeña una cabra (AdobeStock)La leche de cabra fermentada contribuye a la recuperación de la anemia provocada por la falta de hierro. Este es el hallazgo al que ha llegado un grupo multidisciplinar liderado por Ana Soriano Lerma y María Inmaculada López Aliaga, investigadoras del Departamento de Fisiología, del Instituto de Nutrición y Tecnología de los Alimentos y del Centro de Investigación Biomédica de la Universidad de Granada (UGR).
Los científicos han investigado los efectos del consumo de una dieta basada en leche de cabra fermentada en forma de yogur en un modelo animal de anemia por deficiencia de hierro, relacionando las propiedades de mejora de la salud intestinal de la leche de cabra fermentada con la recuperación de esa anemia ferropénica, la más común en el mundo y que sufren especialmente las mujeres.
En España, la anemia ferropénica se presenta en el 20% de las mujeres en edad fértil, el 40% de las gestantes y el 15% de las adolescentes. En las mujeres embarazadas, representa un riesgo tanto para la mujer como para el feto, explican desde la Sociedad Española de Hematología y Hemoterapia (SEHH).
La anemia se produce cuando el cuerpo no tiene los suficientes glóbulos rojos sanos, que son quienes proporcionan el oxígeno a los tejidos corporales. Este tipo de anemia se da cuando el organismo no posee el suficiente hierro, necesario para la producción de glóbulos rojos.
En los últimos años, los alimentos fermentados están adquiriendo gran interés como objeto de investigación debido a que su producción es rentable, existe una alta disponibilidad para los consumidores y presentan unos “potenciales efectos prebióticos y probióticos beneficiosos para la salud general”, han detallado desde la UGR.
En particular, en el caso de la leche de cabra fermentada se puede resaltar su elevada calidad nutricional, baja alergenicidad y alta digestibilidad, por lo que la investigación comenzó bajo la premisa de su interés en el caso de situaciones patológicas caracterizadas por un deterioro de la salud intestinal como es el caso de la anemia ferropénica.
Se ha descrito que los suplementos de hierro recomendados para el tratamiento de la anemia ferropénica desencadenan disbiosis intestinal y ejercen un daño adicional a los enterocitos, las células intestinales especializadas en la absorción. Es por ello que existe una necesidad crucial de explorar nuevos enfoques de protección intestinal al tratar la enfermedad.
Según la investigadora de la UGR María Inmaculada López Aliaga, los principales resultados de esta investigación, publicada en la revista científica Journal of Agricultural and Food Chemistry, muestran que una dieta basada en leche de cabra fermentada da lugar a un microbioma intestinal “más diverso en cuanto al número de especies en la comunidad microbiana y funcionalmente más activo que la dieta estándar”, tanto en el intestino delgado como en el grueso de animales controles, lo que está en línea con una recuperación más eficiente de la anemia ferropénica.
En cuanto a sus propiedades restauradoras del microbioma intestinal, la disbiosis más intensa del colon asociada a la deficiencia de hierro se recuperó de forma más eficiente con la dieta basada en leche de cabra fermentada, confirmando sus propiedades prebióticas. La disbiosis es la alteración del equilibrio normal de las bacterias que habitan en el intestino.
Por último, tanto la dieta basada en leche fermentada de cabra como la dieta estándar demostraron la misma eficacia para recuperar la función de la barrera intestinal, que “previene el traspaso de microorganismos y componentes bacterianos desde el intestino hacia la circulación sistémica”.
Episodio: ¿Cómo es el cansancio por anemia? La investigadora Ana Soriano Lerma, primera autora del trabajo, concluye que “este estudio proporciona evidencia para el uso de la dieta de cabra fermentada como herramienta nutricional para aliviar las consecuencias intestinales negativas provocadas por la anemia por deficiencia de hierro. Por lo tanto, los productos lácteos fermentados, y en particular la leche de cabra fermentada, podrían ser de interés científico durante el manejo clínico de la anemia por deficiencia de hierro”.
Esta investigación ha formado parte de la tesis doctoral de Ana Soriano Lerma, que actualmente se encuentra disfrutando de una ayuda Marie Curie en el centro de investigación Teagasc Food and Research de Irlanda, cuyo objetivo es el desarrollo de nuevos alimentos para “maximizar su impacto en salud y minimizar su impacto medioambiental a través de nuevas técnicas de microbiología y ciencias de datos”.
*Con información de Europa Press