El precio, el surtido, su marca banca, la cercanía con nuestro hogar... Son muchos los criterios que tenemos en cuenta a la hora de elegir a qué supermercado acudimos para hacer nuestra compra. En un contexto en el que los mercados de abastos pierden cada vez más clientela, las grandes cadenas luchan por atraer nuevos clientes a través de promociones, ofertas y cambios en el surtido. En este sentido, la ya tradicional encuesta de satisfacción anual de supermercados que elabora la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) muestra una fotografía clara sobre las preferencias de los españoles.
La OCU ha compartido los resultados de un estudio en el que analiza el nivel de satisfacción de los españoles con sus supermercados más frecuentados. Los resultados de la encuesta, que ha tenido en cuenta a 46 cadenas regionales y nacionales, sitúan Hipercor, El Corte Inglés y Aldi como las franquicias nacionales de supermercados e hipermercados más valoradas por los consumidores. No obstante, son los ‘súpers’ regionales los que lideran la clasificación: encabezan la lista las catalanas Esclat y Bon Preu, seguidas por otras conocidas cadenas como Familia, Ametller, Family Cash, Cash Fresh, Plus Fresc, Consum, Bonárea e Hiperusera.
El precio y el surtido, criterios básicos para los españoles
Los resultados de la encuesta, que ha tenido en cuenta más de 18.000 experiencias de compra, reflejan una buena satisfacción general en aspectos como el horario de apertura, la amplitud o la limpieza, pero también revelan notables diferencias en otros apartados de gran relevancia para los consumidores.
Según la encuesta llevada a cabo por la OCU, el precio es el apartado que más influye a la hora de elegir un supermercado, junto con la cercanía. Y no es de extrañar, puesto que, aunque la inflación interanual del 1,8% en los alimentos podría parecer menor, esta acumula ya una subida del 35,5% en los últimos tres años, lo que se traslada en una escasa satisfacción de los encuestados con los precios disponibles en sus cadenas de confianza.
De hecho, solo una de cada tres cadenas obtiene una buena valoración en este sentido. En cuanto a precios, lidera la calificación la valenciana Family Cash, seguida de Cash Fresh (en Andalucía y Extremadura), Supeco (el low cost de Carrefour), Bonárea (en Cataluña, Aragón y Madrid) y Lidl, frente a las mediocres valoraciones de los clientes de Carrefour Express, BM Urban, Supercor y Condis. En cuanto a descuentos y promociones, los más satisfechos son los usuarios de la catalana Esclat, Familia (presente en Galicia y el Noroeste), junto con los de los hipermercados Carrefour.
El estudio ha tenido en cuenta también otros factores que determinan la satisfacción de los clientes al llenar su cesta de la compra. El surtido de productos disponible es otro criterio básico para los consumidores, en el que destacan Esclat, Hipercor y El Corte Inglés, además de Alcampo. No ocurre así con Carrefour Express, El Jamón (presente en Madrid), Dia y Mercadona, aunque este último sobresale en la variedad en productos de marca propia. Por cierto, la marca propia de la cadena es la que se prioriza a la hora de comprar platos preparados, aperitivos, alimentos congelados, lácteos, productos de limpieza, y alimentos para mascotas.
Otro apartado con grandes diferencias entre cadenas es el del tiempo de espera en las cajas. En concreto, los supermercados que más satisfacen a sus clientes por su rapidez son Esclat, Supercor, Plus Fresc y BM Complet, frente a la menor satisfacción de los usuarios de las cadenas Carrefour Express, Eroski City, Lidl, Alimerka y Familia.