De los Golden Globes a los SAG Awards: qué estilos marcaron el camino de los principales nominados a los Oscar 2025

El próximo 2 de marzo, el Dolby Theatre de Hollywood será el escenario de la 97ª edición de los Premios Oscar. Además de reconocer lo mejor del cine, la ceremonia representa uno de los momentos más esperados en la industria de la moda.

Como en cada año, la alfombra roja será el foco de atención, ya que las celebridades desfilarán con sus mejores atuendos.

A lo largo de la temporada de premios, que está establecida (aunque de manera tácita) entre enero y marzo, los Golden Globes, los Critics Choice Awards, los BAFTA y los SAG Awards, entre otros, sirvieron como un anticipo de los estilos que dominarán la gala.

Desde la elegancia clásica hasta propuestas más arriesgadas, los principales nominados a Mejor Actor y Actriz, junto a sus respectivas categorías de reparto ya dejaron su sello en cada evento previo.

Demi Moore

Mejor Actriz por La sustancia

Demi Moore mantuvo una propuesta versátil y vanguardista a lo largo de la temporada de premios, con looks que van desde el glamour clásico hasta diseños más audaces con texturas y cortes innovadores.

En los Golden Globes, apostó por la elegancia atemporal con un vestido dorado de silueta estructurada y escote asimétrico. La caída fluida y el efecto metalizado realzaron su presencia en la alfombra roja con un aire sofisticado.

Para los Critics Choice Awards, llevó un vestido de Schiaparelli en azul oscuro con un particular corsé de escote corazón decorado con detalles brillantes y una falda con cortes estratégicos, por lo que logró un equilibrio entre dramatismo y sensualidad.

En los BAFTA, optó por una pieza de inspiración artística con un diseño geométrico bordado en tonos metálicos y vibrantes. La silueta de cuello halter y la combinación de texturas añadieron un impacto dinámico y moderno.

En tanto, para los SAG Awards exploró una estética de rebeldía sofisticada con un look monocromático en negro compuesto por una parte superior de cuero y una falda de volados con un notorio contraste de generós.

Mejor Actor por Un completo desconocido

Timothée Chalamet consolidó su estilo audaz y poco convencional, con giros contemporáneos en sus atuendos que desafían los códigos clásicos de estos eventos. Su elección de colores, texturas y cortes sostuvo una estética juvenil y vanguardista, sin perder sofisticación.

En los Golden Globes, llevó un traje negro de sastrería con una camisa tono marfil y un pañuelo azul brillante al cuello, un detalle que evocó el estilo bohemio con un toque elegante.

A los BAFTA asistió con otro traje negro, pero de estructura relajada y solapas asimétricas. Lo combinó con una camiseta y cadenas en lugar de la tradicional camisa y corbata, para crear un look moderno y desenfadado.

En los SAG Awards, apostó por una de sus elecciones más llamativas con un conjunto de cuero de acabado brillante, acompañado de una camisa verde neón completamente abotonada y con un corbatín vaquero. Este contraste reafirmó su inclinación por la experimentación y el riesgo estilístico.

Mejor Actriz por Wicked

Cynthia Erivo construyó una narrativa audaz y sofisticada con sus atuendos, con elecciones que combinan dramatismo, texturas y una estructura arquitectónica en cada una de sus apariciones.

En los Golden Globes desfiló por la primera red carpet del año con un vestido negro con detalles plateados que capturó la esencia del maximalismo elegante. Con una silueta de falda amplia y un cuerpo entallado de escote profundo, el diseño se destacó por sus volados a la altura de la cintura, un elemento que aportó dinamismo y un efecto tridimensional a la prenda.

Para los BAFTA, en cambio, se inclinó por la pureza del blanco con un vestido Louis Vuitton de encaje que jugó con el contraste entre lo etéreo y lo escultural. La pieza se ajustaba al cuerpo con una falda de línea sirena y una parte superior con transparencias y detalles florales. En esta ocasión, logró un equilibrio entre lo romántico y lo moderno.

En los SAG Awards, llevó su estilo a una dimensión más vanguardista con un vestido metalizado con texturas, mangas acampanadas y cuello alto acompañados de múltiples flecos. La fluidez del tejido, sumada a la estructura envolvente, proyectó una imagen de sofisticación futurista sin perder la teatralidad característica de su estética.

Mejor Actor por Sing Sing

Colman Domingo llevó la sastrería masculina a un nuevo nivel al unir elegancia clásica con la audacia representada en texturas, colores y accesorios. Su estilo se caracterizó por una fusión entre lo refinado y lo dramático, con detalles que evocan una estética vintage sin perder el espíritu actual.

En los Golden Globes, apostó por un esmoquin negro con toques barrocos, entre los que destacó una camisa con volados y un lazo al cuello, un guiño al romanticismo de la moda del siglo XIX.

Para los Critics Choice Awards, eligió un conjunto monocromático en tonos marrones con una silueta relajada y una chaqueta al hombro, por lo que brindó una imagen de sofisticación desenfadada.

En los BAFTA, elevó el dramatismo con un abrigo de cuero negro y una camisa estampada en colores vibrantes, a juego con el forro del sobretodo. Sumó guantes y accesorios que reforzaron la estética de estrella de cine clásica con un aire contemporáneo.

Finalmente, dijo presente en los SAG Awards con un saco blanco, una bufanda y un moño negro, equilibrando opulencia con una presencia impecable.

Mejor Actriz por Anora

Mikey Madison construyó una estética elegante y atemporal al apostar por siluetas estructuradas y una sofisticación sin excesos.

En los Golden Globes, impactó con un vestido columna dorado de efecto escamado, evocando el lujo del Hollywood clásico con un diseño ajustado y escote recto que dejó el protagonismo a la textura metálica.

Para los Critics Choice Awards, eligió un vestido en negro y blanco con corsetería marcada y falda fluida. Los guantes largos negros añadieron un aire vintage, al recordar la elegancia de los años 50.

En los BAFTA, siguió con líneas depuradas en color crema con un escote palabra de honor, acompañado de una capa drapeada que aportó movimiento y un toque etéreo.

En los SAG Awards, deslumbró con un vestido de satén gris perla, el cual lucía un gran lazo lateral como detalle estructural. El acabado satinado y los labios rojos equilibraron el clasicismo con un guiño moderno.

Mejor Actor por The Brutalist

Adrien Brody se mantuvo en lo clásico, con trajes de sastrería impecable y detalles que aportan modernidad con sutileza. Sus elecciones oscilaron entre el negro atemporal y matices azulados.

En los Golden Globes, apostó por un traje negro de tres piezas con chaleco, acompañado de una corbata fina y un prendedor en la solapa que agregó un toque de distinción.

Para los Critics Choice Awards, eligió un esmoquin azul medianoche con solapas en contraste y moño, jugando con una tonalidad elegante.

Tanto en los BAFTA como en los SAG Awards, volvió a la sobriedad del negro con un esmoquin de corte clásico y moño, una opción sofisticada que destacó por su ajuste impecable.

Mejor Actriz por Aún estoy aquí

Fernanda Torres mostró una clara inclinación por el negro como protagonista de sus elecciones. Su enfoque estilístico se caracteriza por la elegancia minimalista, con siluetas limpias y detalles sutiles que le brindan modernidad a sus looks.

En los Golden Globes, optó por un vestido negro de líneas fluidas con cuello alto y mangas largas en gasa translúcida. La superposición de tejidos aportó profundidad al diseño, mientras que los pendientes en forma de lágrima añadieron un toque de luminosidad sin romper la armonía del conjunto.

Para los BAFTA, llevó un vestido de escote profundo y estructura ligera, ajustado en la cintura con un cinturón delgado que añadió definición a la silueta. La textura plisada y la caída fluida resaltaron la simplicidad elegante de la propuesta.

Mejor Actor por El aprendiz

Sebastian Stan mostró dos facetas estilísticas contrastantes, alternando entre lo vanguardista y lo clásico con una ejecución impecable en ambas propuestas.

En los Golden Globes, apostó por un conjunto de inspiración contemporánea con un abrigo negro de silueta larga, detalles en contraste en las solapas y una combinación inusual de suéter y camisa en lugar del tradicional esmoquin. El look reflejó una actitud relajada pero sofisticada, con un aire moderno que se destacó en la alfombra roja.

Para los BAFTA, regresó a la elegancia clásica con un esmoquin negro, camisa blanca y moño, consolidando su versatilidad en la sastrería. Acompañado por Annabelle Wallis, quien llevó un vestido metalizado de escote asimétrico, la pareja proyectó una imagen de glamour atemporal con una oposición casi imperceptible entre modernidad y tradición.

Mejor Actriz por Emilia Pérez

Karla Sofía Gascón eligió un vestido de inspiración clásica para los Golden Globes, con una silueta sofisticada y una paleta vibrante. El diseño, en tonos naranja y ámbar, jugó con el drapeado asimétrico sobre un hombro, evocando referencias a la moda de insipiración helénica, pero con un giro contemporáneo gracias al contraste de tonalidades y la fluidez del tejido.

Gascón está nominada al Oscar a Mejor Actriz por su papel en Emilia Pérez, sin embargo la primera alfombra del año fue su única aparición en la temporada de premios hasta ahora, su asistencia a los próximos premios genera expectativa sobre su próxima elección de vestuario.

Mejor Actor por Cónclave

Ralph Fiennes se mostró con una línea clásica y sobria de sastrería tradicional, sin excesos ni detalles llamativos. Su enfoque giró en torno a la elegancia, con cortes impecables y una paleta de colores neutra.

En los Critics Choice Awards, llevó un traje negro de dos piezas, combinado con una camisa blanca y una corbata azul con detalles sutiles.

Para los BAFTA, optó por un esmoquin negro con solapas satinadas y moño, reafirmando su preferencia por el estilo minimalista.

Ariana Grande

Mejor Actriz de Reparto por Wicked

Ariana Grande llevó la teatralidad a la alfombra roja con una serie de looks que combinan volumen, texturas inusuales y un enfoque romántico con toques de vanguardia. A lo largo de la temporada de premios, sus elecciones fluctuaron entre lo refinado y la experimentación morfológica. De esta manera, construyó una identidad visual sofisticada y arriesgada.

En los Golden Globes, apostó por un vestido dorado Givenchy de corte columna con un corpiño bordado y guantes blancos, en una clara referencia a la moda de los años 60.

Para los Critics Choice Awards eligió un impactante diseño de Dior en tono nude con una falda de estructura rígida y flecos largos que aportaron movimiento. La parte superior, ajustada y con aplicaciones en los hombros, añadió un efecto texturizado con transparencias que elevó el conjunto.

En los BAFTA, llevó un vestido con una falda voluminosa en rosa empolvado y una parte superior negra de escote profundo, jugando con el dramatismo y el contraste de colores.

Finalmente, en los SAG Awards se decidió por un diseño más etéreo con un vestido rosa de hombros caídos y delicadas aplicaciones florales.

Mejor Actor de Reparto por A Real Pain

Kieran Culkin mostró una estética relajada pero sofisticada, con looks monocromáticos y detalles que reflejan su estilo desenfadado y moderno.

En los Golden Globes, eligió una propuesta poco convencional dentro de la sastrería masculina: un conjunto completamente negro compuesto por una camisa de manga larga, chaleco de rayas y pantalón recto. El look, sin corbata ni moño, resaltó por su aire informal pero elegante, complementado con múltiples pulseras que aportaron un toque personal.

Para los SAG Awards, optó por un esmoquin negro de corte clásico con solapas satinadas y camisa a juego, una elección más tradicional pero sin perder su sello de comodidad y frescura. Equilibró sobriedad con un aire relajado, y mantuvo la coherencia con su estilo minimalista.

Mejor Actriz de Reparto por Cónclave

La emblemática actriz Isabella Rossellini se presentó en cada gala con un estilo sofisticado, con siluetas amplias, colores profundos y un enfoque que combina gracia con elementos de gran presencia visual.

En los Golden Globes, llevó un vestido de encaje rojo acompañado de una capa a juego. La elección de accesorios mínimos permitió que la intensidad del color y la textura de la prenda fueran los protagonistas.

Para los BAFTA, optó por un atuendo de satén con estampado floral en tonos vibrantes y mangas terminadas en animal print, al igual que el forro del vestido, sobre unas medias negras.

En los SAG Awards apostó por la sobriedad del negro con un vestido de mangas tres cuartos y detalles bordados, complementado con un collar de perlas. A lo largo de la temporada, su estilo reflejó un equilibrio entre la opulencia y la discreción, con piezas de gran carácter.

Mejor Actor de Reparto por The Brutalist

Guy Pearce se inclinó por una sastrería clásica con toques modernos, explorando variaciones en colores y texturas sin perder la elegancia tradicional del esmoquin.

En los Golden Globes, llevó un esmoquin en gris con solapas negras satinadas, al igual que el moño, una elección sofisticada que se apartó del negro convencional sin perder formalidad.

Para los BAFTA, optó por un esmoquin de terciopelo azul con solapas satinadas y camisa a tono. El contraste de colores aportó profundidad y textura a su imagen.

Mejor Actriz de Reparto por Emilia Pérez

Zoe Saldaña sostuvo un hilo de siluetas refinadas, detalles estructurales y una paleta de colores clásica. Sus elecciones se encontraron entre el dramatismo del negro y la fuerza del rojo.

En los Golden Globes, deslumbró con un vestido negro de lentejuelas con escote corazón, acompañado de una capa de satén en tono marrón chocolate.

Dijo presente en los Critics Choice Awards y lució un vestido rojo de líneas depuradas con un cuello drapeado, una elección minimalista pero impactante que resaltó su presencia.

En los BAFTA, apostó por un vestido negro de encaje con elementos distintivos de tul o gasa que simularon plumas en el escote, fusionando textura y volumen en una pieza de aire romántico.

Finalmente, en los SAG Awards llevó un atuendo negro de silueta columna con un armado brillante y excéntrico en un solo hombro.

Mejor Actor de Reparto por Un completo desconocido

Edward Norton se decidió por trajes de cortes impecables y detalles sutiles que reflejan su estilo. Su presencia estuvo marcada por la discreción y la sofisticación, en sintonía con la imagen refinada de su esposa, Shauna Robertson.

En los BAFTA, llevó un esmoquin negro con solapas satinadas y una corbata fina, acompañado de lentes de sol que le aportaron modernidad. A su lado, Robertson optó por un vestido negro de terciopelo con cuello halter y abertura frontal, una elección elegante que complementó la estética clásica de la pareja.

Para los SAG Awards, Norton eligió un traje de dos piezas en azul oscuro con un sutil estampado de cuadros, combinado con una camisa blanca de cuello abierto para un efecto más relajado. Robertson, en esta ocasión, lució un vestido strapless en tono champagne con un acabado brillante.

Fotos: Reuters y Associated Press