Las 9 rutas en tren más espectaculares del mundo: viajes entre montañas, costas y ciudades históricas

A lo largo del mundo, existen recorridos ferroviarios que van más allá de la simple conexión entre dos destinos. Algunos atraviesan paisajes imponentes, desde altas montañas y valles profundos hasta costas escarpadas y densos bosques. Otros evocan la elegancia de épocas pasadas con vagones de lujo y servicios exclusivos que recuerdan la era dorada del ferrocarril.

También hay trayectos que forman parte de la historia de sus países, vinculados a momentos clave o al desarrollo de regiones enteras. Ya sea por la belleza de sus vistas, la sofisticación de sus trenes o la importancia cultural de sus rutas, estos viajes ofrecen una manera única de explorar el mundo con una perspectiva distinta. Esta selección realizada por Time Out destaca algunas de las rutas en tren más fascinantes del planeta.

El Glacier Express recorre Suiza de este a oeste en un trayecto de ocho horas que conecta Zermatt con St. Moritz. Durante el recorrido, pasa por elevaciones, puentes y túneles, por lo que ofrece vistas panorámicas de los Alpes suizos.

Sus coches de gran comodidad permiten disfrutar del entorno de manera relajada, lo que lo convierte en una de las experiencias ferroviarias más destacadas del mundo.

Desde su inauguración en 1883, el Orient Express ha sido un ícono del lujo en los viajes en tren. Su ruta más famosa une París con Estambul, y visita ciudades como Viena, Budapest y Bucarest.

A bordo, los pasajeros presencian panoramas variados, desde llanuras europeas hasta montañas balcánicas, a bordo de vagones diseñados con un estilo clásico. Su servicio y la elegancia de su ambiente lo convirtieron en un símbolo de la época dorada del ferrocarril.

Este tren conecta Hanoi con Ciudad Ho Chi Minh en un camino de más de 1.700 kilómetros, por lo que une el país de norte a sur. A lo largo del trayecto, cruza colinas cubiertas de vegetación, la costa del mar de China Meridional y numerosas aldeas.

Su nombre recuerda la reunificación de Vietnam en 1975, y hoy es una opción popular tanto para locales como para turistas que buscan conocer la diversidad geográfica y cultural del país de manera profunda.

El tren que une Derry/Londonderry con Coleraine recorre la costa noroeste de Irlanda del Norte, por valles, campos verdes y acantilados. Desde sus ventanas, se pueden observar el río Foyle y, en días despejados, la inmensidad del océano Atlántico.

Es una de las formas más pintorescas de descubrir la región, ya que permite conocer su riqueza natural y su historia en una atmósfera tranquila y acogedora.

El trayecto en tren entre Ella y Kandy es considerado uno de los más espectaculares de Sri Lanka. Durante seis horas, atraviesa colinas cubiertas de plantaciones de té, montañas y cascadas, con vistas ininterrumpidas al paisaje tropical.

Sus vagones cuentan con aberturas, lo que les permite a los pasajeros sentir la brisa y admirar la biodiversidad del entorno. No solo conecta dos ciudades, sino que también ofrece una inmersión en la vida rural de la isla.

Rovos Rail es una de las experiencias ferroviarias más exclusivas de Sudáfrica, con rutas que conectan Pretoria con Ciudad del Cabo y el Parque Nacional Kruger. Sus trenes de estilo clásico ofrecen un servicio de alto nivel mientras admiran sabanas, cerros y reservas naturales.

A bordo, los pasajeros disfrutan de amplios coches con decoración de época, gastronomía de primer nivel y un ambiente que evoca los viajes de lujo del siglo XIX.

El Rocky Mountaineer es un tren turístico que pasa por las Montañas Rocosas canadienses, con bosques, lagos y cumbres nevadas.

Su diseño con amplias ventanas panorámicas permite apreciar la inmensidad del entorno, mientras los pasajeros disfrutan de una vivencia caracterizada por la opulencia. Con rutas que conectan Vancouver, Banff y Jasper, es una de las formas más confortables de explorar la naturaleza salvaje de Canadá.

El TranzAlpine recorre la Isla Sur de Nueva Zelanda en un trayecto de 4,5 horas entre Christchurch y Greymouth. A lo largo del viaje, los pasajeros pueden admirar los paisajes de los Alpes del Sur, con picos cubiertos de nieve, ríos de aguas cristalinas y extensas llanuras. Sus vagones de grandes ventanales brindan una vista privilegiada de uno de los sitios más espectaculares del país.

El Ffestiniog Railway es uno de los ferrocarriles de vía estrecha más antiguos del mundo y atraviesa la región montañosa de Snowdonia, en Gales.

Originalmente construido para el transporte de pizarra, hoy es una atracción turística que permite admirar valles y colinas a bordo de locomotoras de vapor restauradas. Con 21 kilómetros entre Porthmadog y Blaenau Ffestiniog, combina historia y vistas impresionantes en una experiencia única.