
Alex Wang, CEO y cofundador de Scale AI, se convirtió en una voz determinante sobre el impacto de la inteligencia artificial en la seguridad global. Al frente de una de las plataformas de datos más influyentes para el desarrollo de IA, Wang advirtió que la humanidad se encuentra en una encrucijada: “Tenemos que hacerlo bien, de lo contrario, las cosas se pondrán realmente peligrosas”, afirmó en una entrevista con Shawn Ryan Show.
Durante ese diálogo, abordó los desafíos éticos, geopolíticos y de defensa asociados con el crecimiento acelerado de la IA, en particular en la competencia que enfrentan Estados Unidos y China.
Criado en Los Álamos, Nuevo México, en un ambiente de científicos y proyectos militares, Wang fundó Scale AI en 2016 tras dejar el MIT. La compañía alcanzó una valuación superior a USD 13.000 millones y se posicionó como pilar de la infraestructura de datos para los modelos de IA más avanzados.
Entre sus clientes están OpenAI, Microsoft y el Departamento de Defensa de Estados Unidos, así como grandes empresas del sector bancario, farmacéutico y de telecomunicaciones.

Su empresa se especializa en la producción de conjuntos de datos de alta calidad, indispensables para el entrenamiento de IA, y facilita el despliegue de sistemas que transforman procesos empresariales y gubernamentales a través de la automatización.
Fue reconocido por Forbes y TIME como uno de los líderes jóvenes más influyentes en tecnología y sostiene la ética y seguridad como ejes fundamentales: “Abogo por el desarrollo responsable de la IA y por políticas que garanticen avances éticos y seguros”, declaró.
IA y defensa: automatización y el futuro de la guerra
La integración de la IA en la defensa y la seguridad nacional constituye uno de los ejes principales para Wang. Scale AI trabajó con el Departamento de Defensa de Estados Unidos, primero en problemas de datos para sistemas de reconocimiento de imágenes satelitales y, más recientemente, en proyectos como Thunder Forge, destinados a la planificación militar automatizada.
Explicó que los agentes de IA pueden transformar la toma de decisiones militares: desde el análisis de datos hasta la simulación de escenarios y la presentación de recomendaciones a los comandantes.

“La idea es pasar de procesos donde los humanos están en el centro de cada decisión, a sistemas donde los agentes de IA realizan gran parte del trabajo y los humanos supervisan y validan”, precisó Wang.
Este salto permite acelerar la planificación de operaciones de días a horas, multiplicando la velocidad de respuesta. No obstante, advirtió que esa ventaja será temporal: “Si solo Estados Unidos tiene esta capacidad, será una ventaja asimétrica. Pero cuando otros actores la desarrollen, la competencia se trasladará a la velocidad, la calidad de los datos y la cantidad de recursos computacionales”.
Riesgos emergentes: interfaces cerebro-computadora, manipulación y control
El joven de 28 años identificó riesgos futuros ligados al desarrollo de interfaces cerebro-computadora, impulsadas por empresas como Neuralink. “Si tienes un enlace directo al cerebro, podrías leer recuerdos, controlar pensamientos o manipular emociones. Es un riesgo enorme”, advirtió.
La tecnología, aún en fase inicial, ya demostró en animales la capacidad de proyectar estímulos visuales y modificar comportamientos. A largo plazo, anticipa la posibilidad de manipular sentidos y recuerdos, abriendo sujetos a dilemas éticos y de seguridad sin precedentes.

“La capacidad de insertar pensamientos o emociones, o de crear realidades falsas, otorga un poder extremo que nunca antes ha existido”, subrayó Wang en el pódcast. Frente a esto, propuso que las democracias lideren el desarrollo para evitar que regímenes autoritarios utilicen la IA para el control social.
Amenazas futuras: ciberataques, biotecnología y desinformación
Wang alertó sobre la vulnerabilidad de infraestructuras críticas ante ciberataques, en especial en el sector energético. “La red eléctrica de Estados Unidos es extremadamente susceptible a ataques, y muchos sistemas ni siquiera cambiaron las contraseñas por defecto”, indicó.
Un ataque coordinado podría dejar sin energía a ciudades enteras, paralizar centros de datos y bases militares, y causar pérdidas estratégicas y humanas. En el plano biotecnológico, advirtió sobre la posibilidad de crear patógenos que ataquen segmentos específicos del ADN, riesgo que la IA acelerará.

Aunque existen avances en tecnologías de detección y contención, el equilibrio entre capacidades defensivas y ofensivas se mantiene delicado. La manipulación de información mediante deepfakes y simulaciones hiperrealistas representa otro desafío: “La IA hará indistinguibles las pruebas reales de las fabricadas, y los sistemas legales no están preparados para ello”, enfatizó.
Regulación, ética y la urgencia de la cooperación internacional
Wang fue claro sobre la urgencia de mecanismos de gobernanza y regulación internacional capaces de responder a tecnologías poderosas: “Ningún país está preparado para gobernar tecnologías tan poderosas como las que estamos desarrollando”, afirmó en Shawn Ryan Show.
Resaltó la necesidad de mantener la “soberanía humana” en los sistemas críticos, evitando delegar el control completo a la IA y asegurando la vigilancia humana en decisiones militares, políticas y económicas.

Insistió en que la cooperación internacional será indispensable para evitar una carrera armamentista fuera de control y para gestionar los riesgos de la biotecnología y la ciberseguridad.
En el cierre de la entrevista, Wang sostuvo que la carrera tecnológica definirá el equilibrio de poder de los próximos años. “El peor escenario para Estados Unidos es que China logre una ventaja decisiva en IA y utilice ese poder para imponer su modelo al mundo”, advirtió.
Solo una acción urgente y coordinada permitirá a las democracias mantener el liderazgo tecnológico, evitando que la IA se transforme en herramienta de dominación o destrucción. “La cooperación internacional y la regulación son esenciales para asegurar que la IA impulse el progreso, la seguridad y la oportunidad, y no la catástrofe”, concluyó Wang.
Últimas Noticias
La seguridad del ABS y el confort de la dirección electroasistida, la tecnología detrás de los minitrucks
Las últimas incorporaciones mecánicas en estos camiones permiten respuestas más precisas ante frenadas de emergencia y giros bruscos, y así ayudan a minimizar accidentes fatales

Meta gana juicio antimonopolio: no violó ley de competencia al comprar Instagram y WhatsApp
La resolución judicial representa un revés para los intentos regulatorios sobre el sector digital y anticipa nuevos desafíos para la supervisión estatal

Desarrollan una neurona artificial para robots que imita la actividad cerebral humana
El avance científico permite a los sistemas inteligentes adaptarse y responder al entorno con una flexibilidad inédita

Taiwán alerta sobre riesgos de las aplicaciones chinas de inteligencia artificial como DeepSeek
El principal organismo de inteligencia taiwanés advierte sobre amenazas a la privacidad y la propagación de información manipulada tras detectar múltiples infracciones en plataformas populares de IA generativa de origen chino

128 kbps vs. 320 kbps: ¿qué calidad de audio es superior?
Escuchar música pop o electrónica con 128 kbps suele ser suficiente para un usuario casual que prioriza el acceso inmediato



