Los ciberdelincuentes han sumado una nueva modalidad de fraude: la falsa citación policial por WhatsApp. El esquema consiste en que una persona recibe un mensaje, supuestamente enviado por un policía, donde se le informa sobre una investigación relacionada con el robo de un celular y se le solicita que asista a la comisaría. Sin embargo, la víctima nunca denunció tal robo. Este detalle revela una trampa: se trata de una estrategia para engañar, recolectar datos personales y, en muchos casos, avanzar hacia delitos informáticos más graves.
Modus operandi: usurpación de identidad policial
Los delincuentes detrás de esta estafa pueden presentar incluso nombres y rangos reales de la Policía Nacional. Según el general José Zavala, jefe de la Dirección de Investigación de Ciberdelincuencia, en varios casos se han utilizado nombres verdaderos de agentes, quienes luego son denunciados por las víctimas que creyeron la historia. La realidad es que la autoridad policial nunca cita a una persona por WhatsApp, y mucho menos pide información confidencial por ese medio.
Esta modalidad aprovecha la confianza que genera la identidad policial, abriendo la puerta a que los engañados cedan datos personales, copias de documentos o incluso códigos que permiten el control de cuentas digitales.

El crecimiento alarmante de los delitos informáticos
El avance de los fraudes digitales en los últimos años es preocupante. Las cifras ofrecidas por la Dirección de Investigación de Ciberdelincuencia lo confirman: en 2022 se reportaron 3.549 denuncias por delitos informáticos; en 2023 fueron 3.215; en 2024, 3.700; y en el presente 2025, la escalada es aún mayor, con 5.653 casos.
Los especialistas advierten que los criminales buscan suplantar la identidad de un policía tanto por la autoridad que representa como por la reacción de temor o apuro que pueden provocar en la víctima. Una vez que el estafador establece contacto, la maniobra puede derivar en la sustracción de cuentas de WhatsApp o fraudes monetarios.
El robo de WhatsApp, la modalidad de moda
El robo de cuentas de WhatsApp es hoy la técnica favorita de los ciberdelincuentes. El general Zavala explica que este mecanismo se ha consolidado como el más empleado actualmente. El procedimiento se repite: a través de distintos engaños, logrando que la víctima comparta el código de verificación de seis dígitos, obtienen el control total de su cuenta.

Una víctima relató a Latina Noticias cómo perdió el acceso a su WhatsApp tras interactuar con un supuesto profesor en TikTok que ofrecía recetas saludables. Después de entablar comunicación, el falso docente envió un enlace e impulsó a la usuaria a unirse a un grupo. Posteriormente, recibió una llamada donde se le solicitó el código de su cuenta, sin sospechar que en minutos perdería acceso no solo a WhatsApp, sino también a otras cuentas digitales. Los estafadores, desde su número, lograron solicitar dinero a sus contactos y, en varios casos, los familiares llegaron a realizar depósitos.
El rol de los chips SIM: la matriz del fraude
La obtención y activación irregular de chips telefónicos es, en muchos casos, el punto de partida para este tipo de delitos. Los delincuentes adquieren docenas de SIM cards de forma ilícita, lo que les permite operar distintas cuentas y burlar mecanismos de seguridad. Las consecuencias legales no son menores: la activación irregular de SIM card puede ser penada con entre cinco y nueve años de prisión.
Recomendaciones ante la estafa
Las estafas de este tipo siguen en aumento y pueden generar graves pérdidas económicas y de identidad digital. Ante una citación policial recibida por WhatsApp, es imprescindible no compartir ningún código de verificación ni documentos personales y validar cualquier requerimiento con la comisaría correspondiente, acudiendo personalmente o comunicándose por vías oficiales.
Si su cuenta de WhatsApp es sustraída, el proceso de recuperación puede demorar al menos una semana. La prevención y precaución son hoy las mejores defensas ante las maniobras de los ciberdelincuentes. Mantenerse alerta y no ceder ante mensajes sospechosos resulta fundamental para evitar ser víctima de estas nuevas formas de fraude digital.



