Isabella Ghassemi-Smith: “Solo el 2,3% de todo el financiamiento relacionado con cualquier tipo de startup en el mundo va para mujeres”

ENTREVISTA. La baja representación femenina en el ecosistema emprendedor limita el aprovechamiento del potencial económico en la región. Ello, pese a que el retorno sobre la inversión en startups fundadas por mujeres es mayor

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Isabella Ghassemi-Smith. Sectores como fintech,
Isabella Ghassemi-Smith. Sectores como fintech, comercio electrónico y salud presentan oportunidades para acelerar la inclusión financiera de las mujeres.

La brecha de género continúa siendo un desafío para el desarrollo del emprendimiento en Perú y América Latina. Las mujeres que deciden iniciar negocios propios enfrentan obstáculos que van desde la desigualdad en el acceso al financiamiento hasta la falta de espacios en redes de contacto. Estas limitaciones no solo afectan sus oportunidades de crecimiento, sino que también repercuten en la economía y el tejido social de sus comunidades. Pese a las cifras que evidencian el limitado apoyo a proyectos liderados por mujeres, ellas han demostrado capacidad para generar impacto positivo, innovar en sectores clave y desafiar los esquemas tradicionales del ecosistema emprendedor. Isabella Ghassemi-Smith, directora de Aurora Tech Award de inDrive, traza una ruta.

¿Qué barreras existen para las mujeres emprendedoras en el Perú y la región?

Los problemas de las mujeres en Latinoamérica, en realidad, son un reflejo de lo que ocurre en todo el mundo. Y, básicamente, lo podemos resumir como la desconexión entre el capital humano y la comunidad. Porque hay una diferencia estadística significativa en el financiamiento que reciben los hombres y las mujeres, al punto que ni siquiera hay comparación. Y tenemos cifras reales para mostrar al respecto.

A eso también se le suma que les falta la red de contactos que se le conoce como el ‘club de los hombres’, en donde te pueden ser presentadas otras personas, conocer expertos, acceder al financiamiento. Les falta esa comunidad alrededor de ellas. Son los tres pilares que, básicamente, dan forma a esta dificultad.

¿Qué tanta es la participación de mujeres en el ecosistema de emprendimientos?

En la narrativa global, tenemos datos recientes de 2024, en donde solo el 2,3% de todo el financiamiento relacionado con cualquier tipo de startup fue para mujeres o para fundaciones conformadas solo por mujeres. Si consideramos los equipos mixtos en donde podría ser, digamos, una mujer y tres hombres fundadores, esto va a incrementarse. Ahí, estamos hablando de 6,7 millones. Y solo el 6,4% de los acuerdos cerrados por uno de estos emprendimientos van para mujeres. Esto es una diferencia en el flujo de contratos, pero menos capital que se les entrega.

Es más rentable emprender al lado de una mujer

Las limitaciones no solo se expresan en el Perú, por lo visto.

Así es. El promedio para mujeres en estos acuerdos es de 5,2 millones de dólares, pero para los hombres es de 11,7 millones, lo cual es una diferencia abismal. Y esto también lo vemos replicado en Latinoamérica. Las estadísticas muestran, en la región, que el soporte al financiamiento de mujeres es menor al 5%, a pesar de que estamos viendo un crecimiento enorme de emprendedoras. Esto es interesante porque también se replica lo mismo alrededor del mundo, tanto en países emergentes como del primer mundo, y las cifras son las mismas.

¿Y qué problemas trae esta brecha para toda la comunidad, fuera del mismo emprendimiento?

Bueno, responderte me implica ir un poquito más hacia atrás, así que vamos desde el comienzo para contarte qué es lo que ocurre. Una de las tendencias que yo siempre veo y que se refleja, quizás, no tanto en cifras, pero sí en general, es que las mujeres tienen más probabilidades de éxito cuando desarrollan una startup para mejorar el mundo. Sea en healthtech o en alguna parecida.

Son modelos que no solo buscan hacer dinero. Quizá tienen problemas que son más de nicho y se enfrentan a problemas específicos de una comunidad. Estos negocios que desarrollan son más resistentes y sobreviven más después de cierto punto, incluso. Y también tienen una consecuencia en la forma en que contratan a las personas, en la cantidad de trabajadores que atraen y en el efecto que tienen en la comunidad que están atendiendo.

¿Eso les asegura mayores ingresos, si tomamos en cuenta todas las dificultades que trae?

Desde luego. Hay un aumento en los ingresos de la mujer, una mejora la comunidad, un crecimiento del entorno. Comienzan a utilizar este dinero para invertir en negocios locales o en tiendas, porque, normalmente, las mujeres tenemos mayor poder o mayor control sobre lo que es el uso del dinero dentro del hogar y pueden decidir a dónde va este dinero. Es interesante también estos lazos que te describe cómo van a usar el capital que reciben, pero también cómo van a contratar a las personas.

Eso parece bastante prometedor. Entonces, ¿por qué no se replica en la realidad?

El problema es que muchas veces no se puede medir este efecto. Pero sí es importante que, mientras haya más mujeres emprendedoras, esto tendrá un impacto también en cuántas más nuevas emprendedoras lo intentarán, lo cual lleva a un mayor despliegue en el ecosistema. Cuando nos enfocamos específicamente en Latinoamérica y vemos el aumento de mujeres que están teniendo oportunidades y les abrimos el acceso de usar este conocimiento, vamos a ver que resuelve problemas locales, pero además que reintegran este dinero en beneficio de la misma comunidad, algo que luego genera más emprendedoras.

Como un círculo virtuoso.

Exacto, se hace un círculo virtuoso y por eso creo que es importante visibilizarlas, porque hasta ahora han sido una oportunidad perdida. Y algo que también me parece interesante mencionar es que, a pesar de que existen pocas mujeres fundadoras, estas tienen un mayor rendimiento en lo que corresponde al uso del financiamiento. Estamos hablando de oportunidades económicas sólidas.

El análisis de la directora
El análisis de la directora de Aurora Tech Award de inDrive destaca una diferencia estadística relevante en la distribución de capital, lo que evidencia la urgencia de abordar la desigualdad de género en la región.

Brechas del emprendimiento femenino en Perú y la región: ¿cómo estamos?

¿En qué áreas, normalmente, se desarrollan los emprendimientos liderados por mujeres? ¿Hacia dónde están más orientadas?

Tenemos datos recientes, tanto internos como externos, y me parece bastante interesante porque, inicialmente, yo pensé que la orientación iba a estar enfocada en consumo, pero cuando vimos los sectores, en realidad las mujeres están más concentradas en fintech y la vertical principal sería el e-commerce. Esto es basado en la investigación en Latinoamérica, pero también refleja lo que ocurre a nivel mundial y a nivel global, y no solo para mujeres, sino lo que ocurre en general. De ahí, tenemos healthtech. Esos serían los tres sectores.

Con esas cifras, ya deberíamos tener, como comunidad, un camino mejor trazado.

Lo que quiero es contarte una historia y más o menos que tratemos de visualizar qué es lo que ocurre realmente en estas situaciones. A nosostros nos gusta pensar de una forma muy simple. Tenemos, en el mundo, mesas de discusión en finanzas, capital de riesgo, entre otros sectores. ¿Qué es lo que ocurre? Que, normalmenten no hay suficientes asientos en esas mesas que estén disponibles y menos que estén ocupados por mujeres.

Pero no es lo único. Cuando llegamos a la situación en que realmente una mujer logra ocupar uno de estos asientos, ¿qué es lo que ocurre? Que no son cómodos, porque no han sido construidos para nosotras. Sí estamos muy agradecidas por estas mesas, porque han sido muy útiles y hemos logrado cosas increíbles en ellas. Pero, al final, lo que ocurre es que las mujeres fundadoras tenemos una forma distinta de construir y de crear. Y eso a veces nos toma más tiempo, pero lo que sí logramos es resiliencia.

¿Por qué hablas de resiliencia?

Porque, imagínate, el retorno por inversión de las mujeres es el doble que de los hombres. Esta es la realidad. Solo que, a veces, toma más tiempo. El problema es que, cuando hablamos de capital semilla y de estas mesas, se buscan resultados rápidos, valorización inmediata de estos estimados, y tratamos de cumplir con esos tiempos y espacios. Y no siempre funciona así.

El entorno es distinto para las mujeres, porque en esos espacios el tipo de preguntas que se les hacen son distintas a las que se les hacen a los hombres. Por ejemplo, hablan sobre la confianza, la seguridad que tienen, etcétera, pero a los hombres no se le hacen esas preguntas. Y eso está bien, como digo, es lo que nos ha llevado hasta acá. Lo que nosotros decimos es que en lugar de sentarnos en estos asientos, los pocos asientos disponibles que son tan difíciles de llegar, en lugar de quejarnos, ¿por qué no construimos una nueva mesa?

¿Y cuál sería la diferencia entre esas mesas y las que hoy tenemos?

Pues que sería una mesa que sea constructiva, que sume, que complemente lo que ya existe, en lugar de tratar de cambiar aquello que no quiere cambiar. Llegado ese punto, comenzamos a pensar: ¿qué es lo que necesitamos para construir estas nuevas mesas? Y ahí es que nosotros llegamos a los tres pilares que mencioné: capital, conexión y comunidad, con apalancamiento que funcione para la mujer emprendedora, con tiempos y plazos que tengan sentido, lo cual va a ser distinto a cómo funciona el capital de riesgo, normalmente. Tener acceso, por ejemplo, a una red de personas que pueden dar soporte, con expertos y gente a tu alrededor, como fundadores o grupos de soporte, que también apoyen tu crecimiento.

No se trata solo de emprender y sentarse en esa mesa, entonces. El reto va más allá.

Al final, la mujer va a tener la oportunidad de sentarse donde decida, tanto en esas mesas de capital de riesgo, como en las que se crean en organizaciones, como Aurora. Se trata de construir estas mesas, estos nuevos espacios.

Lo que buscamos es que se entienda, correctamente, cuál es este panorama. Una narrativa real que cuente bien la historia de lo que ocurre. Existen muchas cifras económicas al respecto, y por supuesto que las podemos compartir para quien las necesite. Nosotras estamos muy felices, porque lo que está ocurriendo es muy positivo para el entorno que buscamos.

inDrive, ha lanzado oficialmente el Aurora Tech Award 2026 en Perú. Se trata de una invitación directa a las emprendedoras tecnológicas del país para que se postulen a este premio global, que apoya a las startups lideradas por mujeres que combinan innovación e impacto y ofrece un premio de US$85.000 a las ganadoras. Las solicitudes estarán abiertas del 12 de agosto al 12 de noviembre en su portal.