Lima enfrenta un nuevo episodio de lloviznas persistentes que afectan la vida cotidiana de miles de personas. Según el Servicio Nacional de Meteorología e Hidrología del Perú (Senamhi), la causa principal del fenómeno es el llamado Vórtice Ciclónico Costero, un patrón atmosférico que influye tanto en la humedad ambiental como en la frecuencia de precipitaciones en los distritos cercanos al litoral.
Desde el sábado 27 de junio, los distritos del sur de Lima, como Chorrillos, Villa El Salvador, Villa María del Triunfo, Lurín y San Juan de Miraflores, experimentan lluvias ligeras pero constantes. Esta situación ha persistido por cuarto día consecutivo, provocando la acumulación de agua en vías principales y desencadenando situaciones de emergencia en zonas vulnerables.

¿Qué es el Vórtice Ciclónico Costero y cómo se forma?
El Vórtice Ciclónico Costero corresponde a un sistema atmosférico que se desarrolla en niveles bajos, generalmente entre los 1,500 y 2,000 metros de altura. Presenta circulación horaria de vientos, generando lo que expertos describen como un “remolino” visible a través de imágenes satelitales por el movimiento y la acumulación de nubes bajas.
Este vórtice surge por el choque de vientos cálidos provenientes del norte y vientos fríos del sur. Cuando estas corrientes de aire se encuentran, se forman remolinos de intensidad variable. El resultado es la generación de nubosidad baja, especialmente del tipo estratos, responsables de los cielos cubiertos y las presencias reiteradas de lloviznas en la zona costera.

Según el Senamhi, el fenómeno puede ocurrir en cualquier época del año, aunque su presencia se acentúa durante otoño, invierno y parte de la primavera. La frecuencia es variable, ya que depende de la intensidad y la circulación de los vientos, y puede presentarse varias veces por año, incluso más de una vez en un solo día.
Impacto en los distritos del sur y pronósticos para el invierno
La persistencia de este patrón climático ha provocado la acumulación de agua en distintos puntos de la ciudad. El caso más preocupante se observa en Villa El Salvador, donde al menos diez zonas registran aniegos severos por falta de drenaje. Calles y avenidas principales están completamente cubiertas de agua, lo que dificulta el tránsito vehicular y peatonal, y pone en evidencia las deficiencias en la infraestructura urbana para gestionar este tipo de emergencias.

El especialista de Senamhi, José Mesía, explica que la posición y el momento en que se forma el vórtice inciden en la ocurrencia de cielos nublados, mayor humedad y lloviznas sobre la costa. Bajo determinadas condiciones, este mismo fenómeno puede provocar cielos despejados e incluso períodos breves de brillo solar, según la interacción con otros sistemas atmosféricos como el Anticiclón del Pacífico Sur.
El Senamhi estima que durante el invierno 2025, Lima Metropolitana enfrentará temperaturas entre 13,8 °C y 19 °C en promedio, con tendencias que podrían ser normales o ligeramente frías. En áreas costeras, las mínimas podrían ubicarse cercano a los 13,7 °C y en zonas más alejadas del mar, como Villa María del Triunfo o La Molina, los valores pueden descender hasta los 10 °C en algunos días puntuales.
La alta humedad relativa del ambiente, que superaría el 90 % e incluso alcanzaría el 99 % en jornadas específicas, intensifica la sensación de frío y convierte a la llovizna en un acompañante constante para los limeños al menos por los próximos días.