
En un evento que marcó un hito en la gastronomía y las tradiciones culturales de Perú, más de 10 mil personas disfrutaron de la pachamanca más grande del mundo en la ciudad de Huancayo, ubicada en la región de Junín. Este logro se llevó a cabo como parte de las actividades de la Feria Nacional Ganadera Cuasimodo 2025, que tuvo lugar en el campo ferial de Coto Coto. Según informó la organización, la jornada se desarrolló durante el tercer día de la feria y contó con la participación de autoridades locales, chefs y cientos de voluntarios.
La preparación de este plato tradicional peruano no solo destacó por su magnitud, sino también por el simbolismo cultural que envolvió el evento. La actividad comenzó con un ritual andino conocido como “pagapu”, una ceremonia dirigida por un sacerdote andino en honor a la Pachamama o Madre Tierra. Este acto espiritual buscó pedir permiso y bendiciones para la elaboración de los alimentos, reforzando el vínculo ancestral entre la gastronomía y las tradiciones de las culturas andinas.

Una hazaña culinaria sin precedentes
La pachamanca preparada en Chilca, distrito anfitrión del evento, requirió una logística impresionante. Según explicó Isaac Santiváñez, gerente de administración tributaria de la Municipalidad de Chilca, el equipo utilizó 25 carneros, 800 kilogramos de carne de cerdo, más de 10 mil humitas, 1.5 toneladas de papa y una tonelada de habas. Además, se prepararon 250 litros de jabchi, una salsa a base de ají y queso, y 200 litros de aderezo para complementar los sabores de la pachamanca.
El proceso de cocción, característico de este plato, consistió en enterrar los ingredientes bajo tierra, utilizando piedras calientes para cocerlos al calor directo. Más de 300 personas, entre chefs y colaboradores, trabajaron en la preparación, mientras que 80 estudiantes de la escuela gastronómica Cooking Gourmet se encargaron de servir los platos a los asistentes.

Una tradición que une a la comunidad
La pachamanca, cuyo nombre en quechua significa “olla de tierra”, es un plato emblemático de la gastronomía peruana que tiene sus raíces en las antiguas culturas andinas. Este método de cocción, que data de miles de años, simboliza un acto de agradecimiento a la tierra por sus frutos y ha sido preservado como parte del patrimonio cultural del país.
En esta ocasión, la pachamanca no solo fue un deleite gastronómico, sino también un símbolo de unión comunitaria y orgullo cultural. Según destacó Thalía Baltazar, Miss Chilca Cuasimodo 2025, el evento fue una invitación abierta para que personas de todas las edades disfrutaran de este platillo tradicional de manera gratuita. “Hoy se prepara la pachamanca más grande de todo el mundo; les invitamos este platillo preparado para el deleite de grandes y pequeños”, expresó Baltazar durante la jornada.
Además de la degustación masiva, el evento buscó fortalecer las tradiciones y la identidad cultural de la región, promoviendo el conocimiento y la valoración de prácticas ancestrales como la preparación de la pachamanca. Según los organizadores, este tipo de actividades no solo celebran la riqueza gastronómica de Perú, sino que también fomentan la cohesión social y el orgullo por las raíces culturales.

Un legado que trasciende generaciones
La pachamanca, más allá de ser un plato típico, representa una conexión con la tierra y las tradiciones de las comunidades andinas. Su preparación, que combina ingredientes locales como papas, habas, choclo y carnes, junto con hierbas aromáticas como chincho y huacatay, es un reflejo de la diversidad y riqueza de los productos peruanos.
Originalmente asociada a festividades agrícolas y reuniones comunitarias, la pachamanca ha trascendido generaciones como un símbolo de gratitud y celebración.