
Un terremoto de magnitud 7.7 sacudió hoy, viernes 28 de marzo, Myanmar y parte de Tailandia, generando gran alarma en la región. En Birmania, se reportaron 144 fallecidos y al menos 730 heridos. En Bangkok, numerosas personas quedaron sepultadas y otras permanecen desaparecidas. Este movimiento telúrico resalta la constante amenaza sísmica que persiste en diversas partes del mundo.
En este sentido, Perú, que está ubicado geográficamente en el Cinturón de Fuego del Pacífico, podría atravesar un evento sísmico de gran magnitud en cualquier momento. Los expertos coinciden en que un terremoto en el país no es una posibilidad, sino una situación inminente. La acumulación de energía tectónica que se ha producido durante casi 300 años, en un período conocido como “silencio sísmico”, hace que el riesgo de un gran movimiento telúrico sea cada vez más latente.
Según el Instituto Geofísico del Perú (IGP), este fenómeno ha aumentado las probabilidades de un terremoto de gran magnitud, especialmente en la región central y sur del país. La acumulación de energía en la zona de subducción entre las placas tectónicas de Nazca y Sudamericana coloca a Lima, en una situación de alta vulnerabilidad.

Riesgo de un terremoto en Lima
Los especialistas coinciden en que la infraestructura de la ciudad de Lima podría verse gravemente afectada por la magnitud de un evento sísmico de estas características. Además, el daño podría ser mayor de acuerdo al distrito en el que te encuentres.
Aunque estos fenómenos naturales no pueden predecirse con exactitud, el Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento (MVCS) advierte que la falta de preparación y las características geológicas de algunas zonas de la ciudad aumentarían el riesgo de daño estructural y pérdida de vidas. Es decir, las áreas más vulnerables son aquellas con suelos inestables, como los que se encuentran en ciertos distritos de Lima y el Callao.

Distritos más vulnerables en Lima
Con el objetivo de anticiparse a los posibles efectos devastadores de un terremoto de gran magnitud, el Ministerio de Vivienda, en colaboración con la Universidad Nacional de Ingeniería (UNI), desarrolló el ’Mapa de Microzonificación Sísmica’. Este estudio tiene como fin identificar las zonas de mayor riesgo en Lima, analizando la calidad del suelo en diferentes distritos y su capacidad para resistir un sismo de gran magnitud.
Según el estudio mencionado, los distritos más afectados por un terremoto en Lima serían aquellos que presentan suelos blandos, inestables o rellenos de desmonte. Estos suelos, al no contar con la firmeza necesaria, facilitan el colapso de edificaciones y el aumento de los deslizamientos en áreas elevadas.
Distritos más vulnerables:
- Villa El Salvador
- Chorrillos
- Villa María del Triunfo
- Ventanilla
- Ancón
- Santa Rosa
- Laderas de Carabayllo
- San Juan de Lurigancho
- Independencia
- Ate
En estos sectores, los riesgos aumentan debido a la presencia de suelos blandos y arenosos, y en algunos casos, la alta densidad poblacional agrava la situación.
Distritos más seguros ante un terremoto
En contraste, existen distritos que, debido a su geología y tipo de suelo, son más estables ante un sismo de gran magnitud. Las zonas que presentan suelos más rígidos y rocosos ofrecen una mayor capacidad de resistencia y estabilidad frente a los movimientos sísmicos. En estos lugares, la infraestructura, si está bien construida, podría resistir mejor los movimientos telúricos.
Distritos más seguros en Lima ante un terremoto:
- Centro de Lima
- Breña
- Magdalena
- Pueblo Libre
- Jesús María
- Lince
- San Isidro
- Miraflores
- San Miguel
Estos distritos presentan una mayor estabilidad en sus terrenos, lo que reduce el riesgo de colapsos masivos y de deslizamientos ante movimientos sísmicos de gran magnitud.

Distritos con suelos mixtos
Algunos distritos presentan una mezcla de suelos sólidos y blandos, lo que genera una variedad de riesgos dentro de la misma jurisdicción. Este fenómeno es especialmente visible en áreas como La Molina, donde ciertas zonas tienen suelos sólidos adecuados para la construcción de edificios verticales, mientras que otras, como las cercanas a la Universidad Nacional Agraria, presentan suelos inestables, lo que dificulta el desarrollo de nuevas construcciones.
El caso de Chorrillos es similar, ya que algunos sectores cercanos al Pantano de Villa tienen suelos blandos y vulnerables, lo que aumenta el riesgo sísmico en esos lugares. En estos casos, las autoridades han recomendado restringir la densificación y limitar las nuevas edificaciones para mitigar los efectos de un posible terremoto.
¿Qué debe tener una mochila de emergencia?
Una mochila de emergencia debe contener elementos básicos para garantizar la supervivencia en casos de desastre. Entre los elementos mínimos recomendados:
- Agua: Botellas de agua potable (al menos 2 litros por persona por día) o tabletas/purificadores de agua.
- Alimentos no perecederos: Enlatados, barras energéticas o comida deshidratada suficiente para 3 días.
- Botiquín de primeros auxilios: Con medicamentos básicos, vendas, gasas, antisépticos, tijeras y cualquier medicamento personal necesario.
- Linterna: Con baterías extras o recargable.
- Radio portátil: De preferencia que funcione a pilas o de carga manual para mantenerse informado.
- Documentos: DNI, seguros, contactos de emergencia y dinero en efectivo.
- Ropa de abrigo: Una muda completa por persona, incluyendo ropa interior.
- Productos de higiene personal: Papel higiénico, toallitas húmedas, jabón, cepillo de dientes y toalla pequeña.
- Herramienta multiusos: Como una navaja suiza.
- Bolsas de plástico: Para almacenar agua, alimentos o protegerse del frío y la humedad.
- Silbato: Para emitir señales de auxilio.
- Máscaras o pañuelos: Para proteger de polvo o humo.
- Encendedor o fósforos protegidos del agua: Para hacer fuego si es necesario.
- Mapa local: Con rutas de evacuación.
Es aconsejable revisar periódicamente el contenido de la mochila para reemplazar productos caducados o deteriorados.