Los pescadores de la playa La Cruz, en Tumbes, encendieron las alarmas tras avistar a un cocodrilo en las aguas del Océano Pacífico, muy cerca del muelle. Según los vecinos de la zona, el insólito suceso ocurrió debido a las intensas lluvias que han incrementado el caudal del río Tumbes, provocando desbordes en diferentes sectores de la región. Este aumento en el nivel del agua debido a las lluvias habría desplazado al reptil, alejándolo de su hábitat natural.
Los mismos pobladores relataron que el cocodrilo fue visto desplazándose en el mar, una situación inusual que generó temor entre los habitantes y pescadores. Las imágenes captadas muestran al animal nadando cerca de las embarcaciones en el muelle, lo que mantiene en alerta a la comunidad que frecuenta esta zona.
Ante esta situación, los residentes han solicitado la pronta intervención del personal especializado en fauna forestal de la Dirección Regional de Agricultura de Tumbes. Su objetivo es capturar al cocodrilo para devolverlo a su ambiente natural, evitando así cualquier riesgo para la población local o para el mismo animal.

El impacto de las lluvias en Tumbes
Este evento, que ha causado sorpresa y consternación en la región, se suma al difícil contexto que enfrenta Tumbes debido a las intensas lluvias registradas en los últimos días. El Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) informó que el río Tumbes alcanzó el nivel de umbral rojo, con un caudal de 1,044.33 metros cúbicos por segundo registrado en la estación hidrológica El Tigre, ubicada en el distrito de San Jacinto.
Las lluvias torrenciales, especialmente en zonas altas como Zarumilla—límite con Ecuador—han incrementado el nivel del río y provocado su desbordamiento en diversas áreas. Una de las más afectadas es el distrito de Cerro Blanco, en San Juan, donde decenas de instituciones educativas han quedado inutilizables debido a las inundaciones.
Un informe del lugar detalla cómo el agua llegó incluso al nivel del pecho en algunas instalaciones escolares, dañando equipos de computación, material didáctico y mobiliario, dejándolos completamente inservibles. Según testimonios de docentes, alrededor de 140 alumnos no podrán regresar a clases en los próximos días debido a que las aulas presentan daños estructurales graves.
Desafíos en infraestructura y cultivos
Además del impacto en sectores educativos, los desbordes también han alcanzado terrenos agrícolas, afectando cultivos de plátanos y arroz, fuentes económicas claves para la población de Tumbes. Las imágenes de la carretera Panamericana Norte a la altura del kilómetro 246 registran el colapso del asfalto, perjudicando seriamente el tránsito en la zona.
Los agricultores han mostrado su preocupación ante la incertidumbre climática, puesto que las lluvias intermitentes que se registran al sur del Ecuador siguen aumentando la cantidad de agua que fluye hacia el río Tumbes. De continuar esta situación, más cultivos y áreas residenciales estarían en peligro, exacerbando las pérdidas económicas y sociales.

Una región en estado de alerta
Con pronósticos de más lluvias en las próximas horas, los habitantes de Tumbes se encuentran en estado de máxima alerta. Las autoridades locales, junto con la Dirección Regional de Agricultura y entidades dedicadas a la gestión del riesgo, trabajan para mitigar los daños en carreteras, viviendas y espacios públicos.
En Tumbes, Perú, se encuentra el cocodrilo de Tumbes (Crocodylus acutus), también conocido como cocodrilo americano. Es una especie que habita en áreas tropicales de la costa, ríos, estuarios y manglares de la región.
Respecto a su aparición en el mar, es poco común, pero no inusual. Estos cocodrilos tienen cierta tolerancia al agua salada y ocasionalmente pueden desplazarse por la costa en busca de alimento o nuevas zonas para establecerse. Sin embargo, su presencia en mar abierto es más esporádica y está relacionada con cambios en su hábitat o actividades humanas que los desplazan hacia nuevos territorios.
Este fenómeno puede observarse principalmente en áreas cercanas a desembocaduras de ríos y manglares conectados con el océano.