
El licuado de mamey con avena y nuez ha alcanzado un lugar privilegiado entre las bebidas saludables más consumidas en México y otros países de América Latina. Su popularidad radica en la facilidad para obtener sus ingredientes, el bajo costo comparado con otras alternativas nutricionales y la variedad de beneficios para la salud atribuidos a este batido.
Según informes de la Clínica Mayo y publicaciones de especialistas en nutrición de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) es considerado una opción práctica para el desayuno o la merienda, su consumo frecuente se ha vinculado con mejoras en el sistema digestivo, cardiovascular y nervioso.
La tendencia actual de preferir batidos naturales elaborados con frutas, cereales y semillas responde a la búsqueda de alternativas más nutritivas y libres de ingredientes artificiales. El mamey, la nuez y la avena aportan una combinación sinérgica de fibra, antioxidantes y ácidos grasos esenciales que los convierten en aliados para la prevención y gestión de diversas condiciones crónicas.

Propiedades curativas del mamey
El mamey es una fruta originaria de regiones tropicales, reconocida por su alto contenido de vitaminas, minerales y carotenoides. La Sociedad Mexicana de Nutriología detalla que esta fruta tropical es fuente natural de vitamina A y vitamina C, ambas asociadas a la protección de las mucosas digestivas, el fortalecimiento del sistema inmune y la regeneración celular. El mamey contiene antioxidantes que apoyan la prevención del envejecimiento prematuro y el mantenimiento de una piel saludable.
Su aporte de potasio y fibra soluble, componentes que ayudan en el control de la presión arterial y en la regulación del colesterol sérico. “El consumo de mamey puede contribuir a una mejor digestión y a la protección frente a infecciones virales y bacterianas”.

Beneficios de la nuez: contienen altos niveles de ácidos grasos omega 3
La nuez es considerada uno de los frutos secos más completos por su densidad nutricional. Las nueces contienen altos niveles de ácidos grasos omega 3, conocidos por su efecto antiinflamatorio y su capacidad para reducir el riesgo de enfermedades cardiovasculares. “El consumo habitual de nueces está relacionado con mejoras en la memoria y la función cerebral, así como en la modulación del colesterol y los triglicéridos”.
Las nueces, además, son ricas en minerales como el magnesio, zinc y fósforo, que favorecen la transmisión nerviosa y la salud ósea. Su impacto positivo en el sistema cardiovascular ha sido respaldo por investigaciones de la Mayo Clinic, que recomiendan integrarlas en la dieta cotidiana para personas que buscan prevenir eventos vasculares y mejorar la función cognitiva.

Propiedades de la avena: una fuente adicional de fibra, beta-glucanos y proteína vegetal
La avena se incorpora al licuado como una fuente adicional de fibra, beta-glucanos y proteína vegetal. Los beta-glucanos presentes en la avena favorecen la reducción del colesterol LDL y estabilizan los niveles de glucosa en sangre. Su capacidad para promover la saciedad y mejorar el tránsito intestinal convierte a la avena en un alimento recomendado por nutriólogos para el control de peso y la prevención de enfermedades metabólicas.
Además, la avena contiene vitaminas del grupo B, hierro y pequeñas cantidades de calcio, contribuyendo al bienestar neuromuscular y a una mayor resistencia frente al estrés físico y mental. “La fibra soluble de la avena también actúa como prebiótico y apoya la función inmunológica”, reseñó un informe de la Clínica Mayo.

Receta para obtener el máximo beneficio: licuado de mamey, avena y nuez
Para aprovechar las propiedades curativas del licuado de mamey, avena y nuez, especialistas en nutrición sugieren la siguiente receta:
- Un trozo mediano de pulpa de mamey maduro (aproximadamente 150 gramos)
- Dos cucharadas soperas de avena integral
- Siete a diez nueces peladas
- 250 mililitros de leche vegetal o descremada, o agua para una opción más ligera
- Miel de abeja o algún endulzante natural, en caso de requerir más dulzor
Colocar todos los ingredientes en la licuadora y procesar hasta lograr una mezcla homogénea y cremosa. Se recomienda consumirlo recién preparado como desayuno o merienda. Integrar la receta en una alimentación balanceada puede potenciar los efectos positivos, manteniendo la absorción óptima de micronutrientes y conservando las propiedades funcionales de todos los alimentos.
El licuado de mamey con avena y nuez actúa como complemento natural para quienes buscan mejorar su nutrición y su salud general, pero los expertos recuerdan que nunca sustituye una consulta médica profesional, principalmente cuando existen condiciones crónicas o síntomas persistentes.


