
Una adolescente de 13 años de edad dio a luz al interior de la estación Deportivo 18 de marzo de la Línea 6 del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro en plena celebración del Día de la Madre.
Los hechos ocurrieron la tarde de este sábado 10 de mayo, cuando la joven de ocho meses de gestación presentó fuertes contracciones, por lo que solicitó apoyo de elementos de la Policía Auxiliar de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México.
La joven se encontraba en la zona de andenes con fuertes dolores, por lo que de inmediato los uniformados apoyaron a la adolescente, quien se encontraba en compañía de su mamá de 30 años de edad.
Ambas mujeres fueron trasladadas a la oficina del Jefe de estación y solicitaron apoyo médico para atender a la adolescente. Sin embargo, observaron que el parto era inminente y brindaron el apoyo para que naciera el bebé.
Tras varios minutos de labor de parto, en compañía de elementos de Protección Civil, la mujer dio a luz a una bebé.
Luego del nacimiento, arribaron paramédicos que diagnosticaron a la joven con parto fortuito y, junto con la bebé, fueron trasladadas a un hospital para recibir atención médica especializada.

Este hecho se suma al nacimiento de un bebé en plena vía pública de la Ciudad de México por parte de una joven de 22 años tras entrar en labor de parto mientras se dirigía al hospital donde planeaba ser atendida.
Según informó el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), el incidente ocurrió cerca del Hospital de Gineco-Obstetricia No. 4 “Luis Castelazo Ayala”, donde personal médico brindó asistencia inmediata tanto a la madre como al recién nacido.
De acuerdo con el relato de la mujer, quien no cuenta con seguridad social, el parto se precipitó mientras se encontraba en un taxi camino a un hospital privado. Con 38 semanas de embarazo, las contracciones se intensificaron rápidamente, lo que llevó a su cuñada a solicitar al conductor que la llevara al hospital del IMSS más cercano. Al llegar al lugar, la joven apenas tuvo tiempo de reaccionar antes de que se rompiera la fuente. “Lo único que hice fue bajarme el pantalón y recibir a mi bebé”, relató.
El IMSS detalló en un comunicado que guardias de seguridad del hospital alertaron al personal médico al percatarse de la situación. En respuesta, un equipo de enfermería acudió al lugar para asistir a la madre y al recién nacido. Angélica López Basurto, enfermera general del hospital, explicó que al llegar encontraron al bebé ya nacido.

“Procedimos a ligar el cordón umbilical y, junto con el equipo de camellería y vigilancia, trasladamos a la señora Vania y a la persona recién nacida al Servicio de Urgencias, donde otorgamos los cuidados necesarios”, señaló.
El bebé, que pesó 2.590 kilogramos, fue ingresado al área de Pediatría Médica para una evaluación completa. Los especialistas confirmaron que se encontraba en buenas condiciones de salud. Tanto el recién nacido como su madre permanecieron bajo observación durante cuatro días antes de ser dados de alta.