
Con la llegada del calor, el cuerpo pide bebidas frescas, ligeras y que además ayuden a sentirse mejor por dentro. Si te has sentido con el vientre inflamado, pesadez o simplemente quieres una opción que te refresque sin recurrir a refrescos azucarados, este licuado frío de piña con menta es una excelente alternativa.
Además de ser delicioso y natural, combina dos ingredientes que destacan por sus propiedades antiinflamatorias y digestivas, ideal para tomarlo en ayunas o como bebida entre comidas.
¿Por qué funciona esta combinación?
Tanto la piña como la menta tienen compuestos activos que benefician el sistema digestivo y ayudan a reducir la inflamación interna. Aquí te explicamos por qué:

- La piña contiene bromelina, una enzima natural con efectos antiinflamatorios que ayuda a descomponer las proteínas y mejora la digestión. Estudios publicados en el Journal of Medicinal Food han señalado que la bromelina puede contribuir a disminuir la hinchazón abdominal y los síntomas asociados con digestión lenta o mala absorción.
Además, la piña es rica en vitamina C, fibra soluble y agua, lo que la convierte en un alimento hidratante, depurativo y perfecto para mantener la sensación de saciedad.
- La menta, por su parte, es conocida por sus propiedades carminativas, es decir, ayuda a disminuir los gases intestinales y aliviar la distensión abdominal. También tiene un efecto relajante sobre los músculos del tracto gastrointestinal, lo que puede ayudar a aliviar cólicos o tensión estomacal leve.

Ingredientes del licuado
- 1 taza de piña natural, picada y fría (puede estar previamente congelada)
- 5 a 7 hojas frescas de menta
- 1 taza de agua fría o agua de coco
- Jugo de medio limón (opcional)
- ½ cucharadita de jengibre rallado (opcional, para potenciar el efecto antiinflamatorio)
- Hielo al gusto
Cómo prepararlo
- Coloca todos los ingredientes en la licuadora.
- Licúa por 30 segundos o hasta obtener una textura suave y homogénea.
- Sirve de inmediato en un vaso largo con hielo.
- Decora con una hoja de menta o un trozo de piña para un toque visual fresco.

¿Cuándo tomarlo?
- En ayunas, para estimular la digestión desde temprano.
- Como bebida refrescante entre comidas.
- Después de comer, si sientes inflamación o gases.
- Antes de dormir (sin jengibre), para una noche ligera.
Beneficios adicionales
- Hidrata sin aportar calorías vacías.
- Sustituye fácilmente a bebidas industrializadas.
- Aporta fibra y enzimas naturales.
- Mejora la digestión sin irritar el estómago.
Este licuado de piña con menta es mucho más que una bebida refrescante. Es una herramienta natural para ayudar a tu cuerpo a procesar mejor los alimentos, combatir la inflamación y mantenerte hidratado durante los días calurosos.