
El presidente del Senado, Gerardo Fernández Noroña, respaldó la versión emitida por Alejandro Gertz Manero, titular de la Fiscalía General de la República (FGR), respecto al descarte de la existencia de crematorios clandestinos en el Rancho Izaguirre, en Teuchitlán.
Durante una entrevista, el legislador aprovechó para defender sus declaraciones iniciales sobre el caso del predio ubicado en Jalisco. En su momento, antes de la investigación fiscal, el senador fue señalado por “minimizar” la posibilidad de que el lugar fuera utilizado como un campo de exterminio, justificando que la información era “una estrategia de golpeteo político para desestabilizar a la 4T”.
Con las declaraciones recientes de la FGR, se confirmó que el Rancho de Teuchitlán era un campo de adiestramiento utilizado por el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y no un crematorio, como se había supuesto. En respaldo a esta versión, Fernández Noroña instó a manejar la información con mayor seriedad, dado lo delicado del tema.
Noroña reitera su versión sobre Teuchitlán
En un encuentro con la prensa, el titular del Senado reconoció que enfrentó críticas severas al opinar previamente sobre el caso de Jalisco. Sin embargo, hoy en día su postura fue respaldada por el informe oficial de la FGR.
“Me agarraron como piñata porque se los dije desde el principio y no porque yo sea adivino, sino porque lo que se ha mostrado del rancho se acredita a eso. (...) Lo que dije lo sostengo, que no había evidencias y hoy se está ratificando”, afirmó.

Fernández Noroña también reconoció el labor de la Fiscalía para indagar en el lugar de los hechos; no obstante, aclaró que esto no implica que las desapariciones relacionadas sean un tema de menor relevancia.
“Lo que se ha mostrado en el rancho se acredita, nadie discute que si pueda ser un centro de entrenamiento, es evidente que lo era. Pero se manejo la versión de que era un lugar de exterminio e inclusive se dijo que había un crematorio escondido bajo tierra”, señaló
El partidario de Morena reiteró la importancia de actuar con prudencia al tratar temas sensibles, dado el impacto emocional que provocan en los familiares de personas desaparecidas. Por este motivo, hizo un llamado a la sensibilidad de los medios para abordar los asuntos relacionados con la violencia, el crimen y las fosas clandestinas, ya que las irregularidades podría contribuir a la revictimización de los familiares.
A modo de conclusión, el senador aseguró que en ningún momento minimizó lo sucedido en el Rancho Izaguirre y subrayó que su postura está fundamentada en la empatía hacia las víctimas.
“La dimensión, el manejo y golpeteo que se había hecho con el tema hace un llamado a que seamos más serios, es un tema muy sensible. (...) Cada vez que se genera irresponsablemente una expectativa sobre las desapariciones es un golpe a los familiares”, finalizó