
La diputada local por Morena, Graciela Palomares Ramírez, presentó una iniciativa para reformar el Código Civil de Puebla con el propósito de que, en caso de desacuerdo entre los padres, el apellido materno prevalezca al registrar a un recién nacido.
Actualmente, la tradición dicta que el apellido paterno encabece el acta de nacimiento, una práctica que Palomares Ramírez calificó como “discriminatoria”. Aunque en algunas entidades ya existe la opción de elegir el orden de los apellidos, son pocas las familias que ejercen este derecho.
La legisladora explicó que la propuesta pretende garantizar la igualdad de género y reconocer el papel fundamental de las madres en la identidad de sus hijos. “Es momento de romper con prácticas que invisibilizan a las madres. Esta reforma es un paso hacia la igualdad real y el reconocimiento de los derechos de las mujeres”, afirmó.
De aprobarse la iniciativa, cuando los padres no lleguen a un acuerdo, el Registro Civil dará prioridad al apellido materno. Con ello, se busca eliminar la imposición histórica del apellido paterno como primera opción y reforzar el derecho de las mujeres a ser reconocidas legalmente en la identidad de sus hijos.

El precedente en Hidalgo
El estado de Hidalgo ofrece un antecedente significativo. En el municipio de Alfajayucan, una pareja decidió registrar a su hija colocando primero el apellido materno, acción que marcó un hecho histórico en la región. El registro se llevó a cabo el 10 de octubre de 2022, amparado por la reforma al Código Civil estatal de 2015.
Desde entonces, en Hidalgo las familias pueden elegir el orden de los apellidos al momento de registrar a sus hijos. La Suprema Corte de Justicia de la Nación respaldó esta posibilidad al declarar inconstitucional la imposición obligatoria del apellido paterno en primer lugar.
El Ayuntamiento de Alfajayucan celebró el hecho como un avance en la búsqueda de igualdad de género y empoderamiento de las mujeres en el ámbito familiar, según destacó en un comunicado difundido a través de sus redes sociales.
Para colectivos feministas y legisladores de Morena, la iniciativa promovida en Puebla apuesta por seguir el camino hacia una mayor equidad en el reconocimiento de la identidad familiar.