
los jardines para polinizadores son espacios diseñados para garantizar la supervivencia de diversas especies de plantas y animales. Estos entornos naturales ofrecen un hábitat seguro para organismos como mariposas, colibríes, abejas y otros polinizadores, cuya actividad es esencial para el transporte de polen entre flores, un proceso conocido como polinización.
Este fenómeno no solo asegura la reproducción de las plantas, sino que también tiene un impacto directo en la producción de alimentos y en la estabilidad de los ecosistemas.
Cualquier persona puede contribuir a la conservación de los polinizadores mediante la creación de un jardín especializado, según informó la Comisión Nacional para el Conocimiento y Uso de la Biodiversidad (Conabio).
Estos espacios pueden establecerse en parques, patios, huertos o incluso en ventanas, siempre y cuando se incluyan plantas que provean néctar y polen, elementos fundamentales en los jardines para polinizadores son espacios diseñados para garantizar la supervivencia de diversas especies de plantas y animales.
El papel de las plantas nativas en los jardines para polinizadores

La elección de plantas nativas es un factor clave en la creación de jardines para polinizadores, según lo informado por la Conabio. Estas plantas, que han evolucionado en una región específica, están adaptadas a las condiciones locales de suelo, clima y fauna, lo que las hace más fáciles de mantener.
Además, tienen relaciones evolutivas con los polinizadores locales, lo que las convierte en una fuente de alimento y refugio ideal.
En contraste, las plantas exóticas, que son introducidas desde otras regiones, pueden representar un riesgo para los ecosistemas locales. Algunas de estas especies, como el lirio acuático, se han convertido en invasoras, desplazando a las plantas nativas y afectando negativamente a las especies locales.
Por ello, la Conabio recomienda informarse sobre el crecimiento y los cuidados de las plantas antes de incluirlas en un jardín para polinizadores.
Especies nativas de México ideales para jardines de polinizadores

La Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) ha identificado diversas plantas nativas de México que son ideales para atraer y beneficiar a los polinizadores. Entre ellas se encuentra la tronadora (Tecoma stans).
Este árbol de tamaño medio, que puede alcanzar hasta 10 metros de altura, florece entre julio y noviembre. Sus flores en racimos son visitadas principalmente por abejas y abejorros. Además, se le atribuyen propiedades medicinales, como beneficios para la digestión y efectos antiinflamatorios.
Trompetilla o Hierba del indio (Bouvardia ternifolia)

Este arbusto mediano, nativo de Mesoamérica, florece en verano e invierno. Sus flores rojizas en forma tubular atraen a abejas, colibríes y mariposas. También se utiliza en remedios contra la disentería.
Dalia (Dahlia sp)

Conocida como la flor nacional de México, esta planta herbácea puede alcanzar hasta 3 metros de altura. Florece entre junio y septiembre y es visitada por abejorros y abejas. Además de su valor ornamental, tiene usos medicinales y alimenticios.
Salvia o Cordón de San Francisco (Salvia leucantha)

Este arbusto herbáceo, que florece en verano y otoño, es ampliamente utilizado en la apicultura y como forraje. Sus flores moradas en espigas son un atractivo para las abejas.
Tlacote (Salvia mexicana)

Esta planta herbácea, que puede crecer hasta 3 metros de altura, es ideal para jardines ornamentales y como forraje. Sus flores son visitadas principalmente por abejas.
Mirto (Salvia coccinea)

Este arbusto de hasta 1.5 metros de altura produce flores rojas en climas cálidos. Es conocido por sus propiedades medicinales y es frecuentado por mariposas y colibríes.
Lantana o Nuera y Suegra (Lantana camara)

Este arbusto de rápido crecimiento florece en primavera y verano. Sus flores atraen a abejas y mariposas, y se utiliza en tratamientos para diversos problemas digestivos.
Mirasol o Girasol morado (Cosmos bipinnatus)

Esta planta herbácea, que florece en verano y otoño, es ideal como ornamento y es visitada por abejas, abejorros y mariposas.
Nopal (Opuntia ficus-indica)

Esta planta suculenta, ampliamente distribuida en México, florece en primavera y es frecuentada por abejorros, abejas, mariposas y escarabajos. Además, tiene usos alimenticios e industriales.
Maguey pulquero (Sedum prealtum)

Esta planta arbustiva, que florece cada 7 a 10 años, es utilizada en la alimentación, como forraje y en textiles. Sus flores son visitadas por murciélagos, mariposas, abejas y colibríes.
Cempasúchil o Flor de muerto (Tagetes erecta)

Esta planta, símbolo de las tradiciones mexicanas, florece en verano y otoño. su nombre proviene del náhuatl “Cempohualxochitl” que significa “veinte flores” o " varias flores”. Es utilizada como ornamento y forraje, y atrae a abejas y abejorros.