
Para muchas personas, teñirse el cabello es una práctica habitual que les permite mantener un estilo vibrante o cubrir las canas.
Sin embargo, esta rutina puede convertirse en una experiencia incómoda para quienes desarrollan irritación en el cuero cabelludo tras el proceso de coloración.
Aproximadamente el 35 % de las personas que se tiñen el cabello experimentan algún tipo de reacción adversa, que puede ir desde picazón y enrojecimiento hasta inflamación severa en casos extremos, según la revista especializada en moda, InStyle.
Desde sequedad, descamación y sensibilidad en el cuero cabelludo, estas reacciones pueden ser especialmente problemáticas para quienes no están dispuestos a abandonar el uso de tintes.
Afortunadamente, expertos en dermatología y coloración han identificado las principales causas de estas molestias y ofrecen diversas estrategias para prevenirlas y tratarlas.
¿Qué causa la irritación de cuero cabelludo?

El origen de la irritación suele estar relacionado con los componentes químicos presentes en los tintes para el cabello.
Según explicó la dermatóloga certificada Marisa Garshick entrevistada por InStyle, ingredientes como amoníaco, ftalatos, sulfatos (lauril y laureth), cloruro de sodio y parafenilendiamina (PPD) son los principales responsables de las reacciones adversas.
Estos compuestos pueden alterar el pH de la piel, provocar sequedad o incluso desencadenar dermatitis alérgica de contacto.
Entre estos, el PPD es señalado como el más agresivo. Este químico, utilizado para garantizar la durabilidad del color, es altamente alergénico y puede causar inflamación severa en el cuero cabelludo. Otros ingredientes como el peróxido, la resorcinol y el paratoluenodiamina (PTD) también pueden generar reacciones alérgicas.
Las reacciones al tinte pueden variar en intensidad y manifestarse de diferentes maneras. En casos leves, la picazón puede aparecer pocas horas después de la aplicación del producto.
Sin embargo, las reacciones más graves, como la dermatitis de contacto, suelen incluir inflamación, enrojecimiento y formación de ampollas en el cuero cabelludo.
Estas molestias no se limitan al cuero cabelludo, ya que pueden extenderse al cuello, la frente o cualquier área que haya estado en contacto con el tinte, según el dermatólogo Michael Jacobs entrevistado por la revista.
Por otro lado, las reacciones alérgicas más severas pueden tardar hasta 48 horas en manifestarse. Estas suelen incluir descamación, enrojecimiento y picazón persistente, y pueden extenderse a zonas como los párpados o los laterales del rostro.
No todas las personas reaccionan de la misma manera a los tintes para el cabello, y algunas pueden desarrollar sensibilidad con el tiempo. Según InStyle, factores como el envejecimiento natural, los cambios en los niveles de histamina y alérgenos, y una barrera cutánea debilitada pueden aumentar la probabilidad de irritación.
Además, quienes ya tienen el cuero cabelludo seco o irritado son más propensos a experimentar molestias al aplicar productos químicos.
Tratamientos para aliviar la irritación

Si se presenta una reacción adversa tras teñirse el cabello, existen medidas que pueden ayudar a mitigar el malestar. Según los expertos consultados por InStyle, el primer paso es lavar el cabello y el cuero cabelludo con un champú suave para eliminar cualquier residuo de tinte. Posteriormente, se puede aplicar peróxido de hidrógeno en las áreas afectadas para neutralizar las reacciones químicas.
La colorista Abigail Amparan recomienda el uso de productos emolientes, como cremas acuosas o vaselina, para calmar la piel irritada. En casos más graves, los dermatólogos sugieren el uso de esteroides tópicos u orales, así como antihistamínicos como Benadryl, para reducir la inflamación y la picazón.
Prevención: cómo evitar reacciones al tinte
Para minimizar el riesgo de irritación, los expertos destacan la importancia de realizar pruebas de parche antes de aplicar el tinte. Según Amparan, estas pruebas pueden realizarse tanto en el consultorio médico como en casa, aplicando una pequeña cantidad de tinte en la parte interna del codo o detrás de la oreja al menos tres días antes de la cita.
Otra estrategia preventiva es optar por tintes libres de amoníaco y PPD, que son menos propensos a causar reacciones adversas. Marcas como EcoColors, mencionada por Amparan, ofrecen opciones más seguras para personas con piel sensible. Además, los coloristas pueden reducir la alcalinidad del tinte añadiendo soluciones específicas o incluso edulcorantes como Sweet’N Low durante la mezcla.
Para quienes buscan evitar el contacto directo del tinte con el cuero cabelludo, los reflejos o mechas pueden ser una alternativa viable, ya que estos procedimientos no implican la aplicación del producto en la piel. Sin embargo, el uso de decolorantes también puede causar irritación, por lo que se recomienda precaución.