
La Paloma Azul, una emblemática pulquería ubicada en la Alcaldía Benito Juárez, y que la hace unos días fue clausurada por el Instituto de Verificación Administrativa de la Ciudad de México (INVEA),fue reabierta este jueves junto a otros dos establecimientos dedicados a la venta de pulque, luego de que el gremio convocara a una manifestación por estos cierres ya que consideraban injusta la medida.
Tras la clausura de al menos 14 pulquerías en la Ciudad de México por parte del INVEA, la autoridad correspondiente señaló a través de una Tarjeta Informativa que, como resultado de los acuerdos y el diálogo establecido con integrantes y dirigentes de la Unión Pulquera, fueron retiraron los sellos que indican la Suspensión de Actividades de estos establecimientos, los cuales fueron colocados tras la emisión de sanciones en su contra en días pasados.
Los establecimientos conocidos como “Agave 69”, “La Paloma Azul” y “La Burra Blanca” tuvieron que pagar una sanción económica impuesta por la autoridad, que fue de 30 a 50 mil pesos, según el caso, para poder volver a operar a partir de hoy.
Sobre las acusaciones de que los cierres de estos establecimiento fue un intento de atentar contra la tradición de estos lugares dedicados a la distribución de pulque, el INVEA aseguró que su cierre no fue un ataque en su contra ni en contra de su tradición, sino que las clausuras respondieron a quejas ciudadanas contra los locales.

Es decir, las suspensiones no fueron por vender pulque, sino por otros factores como el ruido, o el exceso de personas alcoholizadas en el lugar.
“El INVEA continúa atendiendo los procedimientos de regularización en los que se encuentra cada establecimiento. Con diálogo y un buen entendimiento se lograron acuerdos en beneficio de los pulqueros y de la seguridad de los consumidores” finalizó el Instituto.
El pasado martes 25 de marzo, el colectivo Resistencia Pulquera organizó una manifestación pacífica frente a la pulquería La Paloma Azul, una de las afectadas por las clausuras.
En un comunicado difundido en redes sociales, el grupo expresó su rechazo al “acoso y abuso” por parte de las autoridades, señalando que en menos de tres meses más de 10 pulquerías han sido cerradas.

La convocatoria incluyó a artistas, músicos, artesanos, productores y consumidores, quienes se unieron para exigir el cese de estas medidas y la protección de estos espacios que consideran fundamentales para la identidad cultural de la ciudad.
De acuerdo con los afectados, estas clausuras han sido justificadas con argumentos como que en las pulquerías se venden otras bebidas, o que no había alimentos en las mesas durante las inspecciones, las cuales se realizaron cerca de los horarios de cierre.
Aunado a esto, los afectados señalan que las autoridades han comenzado a exigir requisitos que no eran solicitados anteriormente, como el “alineamiento y número oficial”.
Cabe recordar que en octubre del año pasado, el proceso para la elaboración del pulque, que es una bebida cuyas raíces datan desde la época prehispánica, fue declarado como Patrimonio Cultural de la CDMX.