Kevin Alonso “N”, mejor conocido como “El 200″ e identificado por autoridades federales como presunto jefe de seguridad de Los Chapitos, especialmente cercano a Iván Archivaldo Guzmán Salazar, logró detener de forma provisional su extradición a Estados Unidos.
De acuerdo con registros del Poder Judicial de la Federación (PJF), el imputado tramitó un juicio de amparo para impedir cualquier acción de entrega a Estados Unidos bajo términos como expulsión, deportación, destierro, entrega o traslado, sin que exista un procedimiento legal abierto ante instancias judiciales mexicanas. El recurso fue presentado el 12 de marzo y ratificado formalmente el pasado martes 25 de marzo.
El juez admitió la demanda y otorgó la suspensión de plano, una figura jurídica que impide de inmediato la entrega del quejoso a una autoridad extranjera al considerar que el acto reclamado podría causar un daño irreparable a sus derechos si se ejecuta sin el debido proceso.
El antecedente de los 29 narcos
Kevin Alonso “N” fue detenido el pasado 19 de febrero de 2025 en Culiacán, Sinaloa, durante un operativo conjunto llevado a cabo por el Ejército Mexicano, la Guardia Nacional y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC). Se le identifica como uno de los principales operadores de seguridad de Los Chapitos, facción del Cártel de Sinaloa liderada por los hijos de Joaquín Guzmán Loera, alias “El Chapo”.
La presentación del amparo de “El 200″ se dio pocos días después de que el gobierno mexicano ejecutara una operación de alto perfil: la entrega de 29 presuntos narcotraficantes a Estados Unidos el 27 de febrero de 2025.
Entre los extraditados se encontraban personajes relevantes como Rafael Caro Quintero, fundador del extinto Cártel de Guadalajara; Vicente Carrillo Fuentes, “El Viceroy”, del Cártel de Juárez; y Antonio Oseguera Cervantes, alias “Tony Montana”, hermano de Nemesio Oseguera Cervantes, “El Mencho”, líder del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).
La lista también incluyó a José Ángel Canobbio, alias El Güerito, capturado el mismo día que “El 200″. Sin embargo, Kevin Alonso “N” no fue incluido entre los extraditados.
La resolución del juez prevista para el próximo 26 de mayo será decisiva para definir si “El 200″ permanece bajo custodia en México o si puede ser extraditado a Estados Unidos para enfrentar posibles cargos penales. Mientras tanto, la suspensión de plano impide cualquier intento de traslado o entrega fuera del marco legal.
¿Qué implica la suspensión de plano?
La suspensión de plano es una medida cautelar prevista por la Ley de Amparo que se concede de forma inmediata cuando el quejoso alega que está en riesgo de sufrir una violación a derechos fundamentales, como la libertad personal, sin la mediación de un juicio.
En este caso, la defensa de Kevin Alonso “N” argumentó que podría ser trasladado a territorio estadounidense sin una solicitud formal de extradición presentada ante la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) ni la intervención de un juez federal que autorice dicho proceso conforme al Tratado de Extradición entre México y Estados Unidos.
La suspensión no significa que el proceso haya concluido. Su vigencia se limita hasta que el juez resuelva si existen elementos para conceder la suspensión definitiva, lo que podría mantener al quejoso en territorio mexicano mientras se resuelve el fondo del juicio de amparo o hasta que se tramite de manera formal su extradición a través de los canales legales establecidos.
Autoridades federales ubican a Kevin Alonso “N” como parte del círculo de protección de Iván Archivaldo Guzmán Salazar. Su rol dentro de la organización habría incluido funciones operativas, logísticas y de seguridad en la región noroeste del país.
En meses recientes, otras figuras cercanas a esta facción han sido detenidas y extraditadas. Entre ellos, Jesús Humberto Limón López, alias “El Chubeto”, señalado como líder de Los Cazadores, e Inés Enrique Torres Acosta, presunto jefe de seguridad de Ismael “El Mayo” Zambada.
Aunque hasta ahora no se ha hecho pública una solicitud formal de extradición contra Kevin Alonso “N”, su nombre ha sido vinculado con estructuras investigadas por autoridades estadounidenses. La presentación del amparo sugiere que su equipo legal busca impedir que sea entregado sin las garantías procesales previstas en la ley mexicana.
