
Dentro de tres meses, aproximadamente, la Fiscalía estadounidense determinará si buscará aplicar la pena de muerte para el narcotraficante Rafael Caro Quintero, cofundador del extinto Cártel de Guadalajara.
Este miércoles se llevó a cabo la audiencia de estatus del capo mexicano en la Corte de Brooklyn, Nueva York. En ella, el juez Frederick Block cuestionó a la fiscal Saritha Komatireddy (quien está a cargo de la investigación) si contemplará la pena capital para este caso.
“Es una posibilidad, la decisión no se ha tomado”, respondió la fiscal Komatireddy, según reportes de Milenio. Ante ello, el juez Block otorgó un plazo de 90 días para que la fiscalía estadounidense informe si solicitará la pena de muerte.
Debido a la complejidad del caso, al mexicano de 72 años le fue asignada una abogada de oficio llamada Elizabeth Macedonio. Será el próximo 25 de junio cuando se realice la siguiente audiencia de Caro Quintero.

El delito capital
Si bien en el estado de Nueva York la pena de muerte fue abolida en 2004, el gobierno federal puede solicitarla cuando se tratan de delitos capitales federales.
En la Corte de Brooklyn, Caro Quintero enfrenta cargos por crimen organizado, tráfico de drogas y uso de armas de fuego. De acuerdo con el periodista Arturo Ángel, el primero de ellos es el que podría llevar al “Narco de narcos” a la pena de muerte.
En la acusación formal presentada en Nueva York se indica que, entre 1980 y 2017, Caro Quintero lideró una organización criminal continua, a través de la cual importaba y distribuía grandes cantidades de drogas en territorio estadounidense.
En caso de no recibir la pena capital, Caro Quintero se enfrenta a una cadena perpetua por los delitos referidos. Esta posibilidad fue planteada por el Departamento de Justicia desde que el narcotraficante fue entregado a Estados Unidos el 27 de febrero junto a 28 miembros del crimen organizado.

En su momento se informó que los fiscales federales evaluarían si la pena capital está disponible con base en la Orden Ejecutiva 14164, emitida por el presidente Donald Trump el 20 de enero.
En esa orden ejecutiva, llamada “Restablecimiento de la pena de muerte y protección de la seguridad pública”, Trump justificó las razones por las que considera esta medida como un acto de “justicia”.
“La pena capital es una herramienta esencial para disuadir y castigar a quienes cometen los crímenes más atroces y actos de violencia letal contra los ciudadanos estadounidenses”, argumentó Trump.
Además de los cargos que enfrenta en Nueva York, Quintero cuenta con una acusación vigente en la corte federal de Los Ángeles, California, por el asesinato de Enrique ‘Kiki’ Camarena, un exagente de la DEA (Administración para el Control de Drogas) que investigó en su momento al Cártel de Guadalajara.
De acuerdo con el Centro de Información sobre la Pena de Muerte (DIP), hay 27 estados donde se mantiene la pena capital: Alabama, Arizona, Arkansas, California, Carolina del Norte, Carolina del Sur, Dakota del Sur, Florida, Georgia, Idaho, Indiana, Kansas, Kentucky, Louisiana, Mississippi, Missouri, Montana, Nebraska, Nevada, Ohio, Oklahoma, Oregon, Pennsylvania, Tennessee, Texas, Utah y Wyoming.