Cada 21 de marzo, las flores amarillas cobran protagonismo en muchos países; especialmente en varias partes de México y América Latina. Regalar este tipo de plantas en esta fecha tan especial se ha convertido en una popular tradición relacionada con el inicio de la primavera. La celebración, impulsada especialmente por redes sociales, busca expresar amistad, amor y buenos deseos. Todos estos factores mientras se aprovecha el simbolismo del color amarillo, el cual representa alegría, amistad y renovación.
¿De dónde proviene esta peculiar creencia?
El origen de esta tendencia se relaciona con una canción del grupo argentino Floricienta, cuya letra menciona recibir flores amarillas como un gesto romántico de primavera. La viralización de este detalle en plataformas como TikTok e Instagram ha convertido el regalarlas el primer día de primavera en una costumbre ampliamente adoptada y aceptada por la sociedad, pero, en especial, entre las y los más jóvenes.
¿Cuáles serían un buen regalo para este 21 de marzo?
En el marco del inicio de este nuevo equinoccio de primavera, la siguiente lista muestra una selección de plantas a considerar para este evento tan esperado:
- Girasoles amarillos: los girasoles son flores amarillas reconocidas y apreciadas, al tiempo que simbolizan lealtad, admiración y alegría. Su gran tamaño y brillante color los hacen un regalo impactante y significativo para esa persona especial.
- Tulipanes amarillos: representan alegría, esperanza y calidez. Regalar este tipo de planta es ideal para expresar afecto sincero y buenos deseos con la llegada de una nueva temporada de primavera.
- Rosas amarillas: estas simbolizan amistad, felicidad y cuidado. Son perfectas para evocar gratitud o fortalecer lazos afectivos con personas cercanas.
- Margaritas amarillas: simbolizan inocencia, pureza y alegría sencilla. Un ramo de margaritas amarillas es un detalle fresco y juvenil, ideal para darlo a cualquier amigo o ser querido.
- Fresias amarillas: con un dulce e inigualable aroma, representan confianza y consideración. Son una excelente opción para expresar respeto y admiración hacia alguien especial.
¿Vale la pena o no regalar este detalle colorido?
Regalar flores amarillas es una tendencia cultural impulsada globalmente, gracias al impacto de las redes sociales. Este fenómeno, originado en Argentina y expandido por toda Latinoamérica, ya se ha convertido y adoptado en una tradición popular en numerosos países de la región. Es una forma colorida y simbólica de decirle “hola” a la primavera y fortalecer relaciones personales.
Por todo lo anterior, el regalar flores amarillas este 21 de marzo va más allá de un simple detalle decorativo. Es una manera significativa de celebrar la llegada de una nueva estación del año, transmitir alegría y renovar vínculos afectivos con optimismo y energía positiva.
