Netflix ha vuelto a generar un fenómeno mundial con su más reciente producción: Adolescence, un thriller británico que se ha posicionado como la serie número uno en México y varios países más. La miniserie de cuatro capítulos ha capturado la atención de millones de espectadores gracias a su trama perturbadora y a su innovador uso de técnicas cinematográficas que pocas veces son vistas en una producción para la televisión.
La historia de Adolescence se centra en Jamie Miller, un niño de 13 años acusado de haber asesinado a una compañera de la escuela. A lo largo de la miniserie, se explora no solo la autodestrucción de la familia del joven implicado, sino también la ardua investigación llevada a cabo por el inspector Luke Bascombe, quien busca descubrir la verdad detrás del macabro suceso.
Si bien la serie no está inspirada en un hecho concreto, su historia está inspirada en distintos casos ocurridos en Reino Unido. La serie toca temas como la violencia, la soledad y la fragilidad emocional de los jóvenes de la actualidad.
De hecho, la verdadera misión de Adolescence es reflexionar sobre la vida de los adolescentes en la actualidad, conocer sus códigos comunicativos, sus emociones y cómo enfrentan los desafíos emocionales, la violencia y el proceso de cambio en un mundo donde las redes sociales son la moneda de cambio.
Desde su estreno, la producción se ha convertido en un éxito rotundo en Netflix, alcanzando el puesto número uno en México y posicionándose como tendencia mundial. Pero parte de su impacto radica en la manera en que fue filmada: en un asombroso plano secuencia continuo, un recurso técnico que exige precisión, coordinación y un trabajo exhaustivo de todo el equipo.
¿Qué es un plano secuencia?
El plano secuencia es una técnica cinematográfica en la que se graba una escena completa sin cortes aparentes, permitiendo que la cámara se mueva de un lugar a otro sin interrupciones. Este método no solo genera un alto nivel de inmersión en la narrativa, sino que también exige un trabajo meticuloso en la planeación y ejecución de cada toma.
En lugar de cortar entre escenas o cambiar ángulos con múltiples cámaras, todo debe realizarse de manera continua, lo cual aumenta la complejidad técnica y artística.
Producciones como 1917 del cineasta Sam Mendes o Birdman: o la inesperada virtud de la ignorancia de Alejandro González Iñárritu, han popularizado el uso del plano secuencia en el cine contemporáneo. Sin embargo, en la televisión se trata de un recurso inusual debido a la dificultad y costos que conllevan.
Para Adolescence, se optó por esta técnica con la intención de crear un ambiente inmersivo y visceral, donde cada momento se siente en tiempo real y sin respiro para el espectador. La toma continua no termina, sino que el episodio entero llega a su final.
¿Cómo se logró la escena imposible de Adolescence?
Uno de los momentos más impactantes de la serie ocurre al final del segundo episodio, cuando se sigue a Ryan (interpretado por Kaine Davis), un alumno que huye de la escuela tras el asesinato, mientras es perseguido por el inspector Bascombe (Ashley Walters). Esta persecución a pie termina en un impresionante plano aéreo que muestra la escena desde lo alto y nos lleva a otro lugar alejado por varias cuadras.
La magia detrás de esta escena se logró gracias a la colaboración del director de fotografía Matthew Lewis y el director Philip Barantini. Ambos idearon un método para “hacer volar la cámara”, como explicó el cocreador y guionista de la serie, Jack Thorne. El truco consistió en enganchar un dron a la cámara en el momento preciso para elevarla y continuar la toma sin interrupciones.
“Fue un ejemplo de la técnica confluyendo con la historia y encontrando una fusión, lo cual es mejor que cualquier cosa que a la historia se le haya ocurrido por sí misma”, afirmó Thorne sobre la ejecución de esta escena innovadora.
El proceso no fue sencillo. Según reveló Netflix, la planificación de Adolescence incluyó rodar cada episodio completo hasta diez veces al día, durante cinco días seguidos. Al final los planes cambiaron, ya que la versión final del episodio dos, que contiene la escena aérea, fue la toma número trece grabada durante el último día de filmación.
Dicho nivel de precisión y dedicación también se aplicó a los otros dos episodios restantes. Las tomas definitivas de estos fueron en la número once y dieciséis, respectivamente.
Además de Kaine Davis y Ashley Walters, el elenco de Adolescence incluye a Owen Cooper en el papel de Jamie Miller, Stephen Graham como Eddie Miller, Erin Doherty y Faye Marsay, entre otros. La miniserie fue coproducida por Brad Pitt.
El compromiso de todo el equipo de producción, así como el trabajo coordinado entre actores, camarógrafos, asistentes y directores, permitió que Adolescence se convirtiera en un fenómeno de visualizaciones en Netflix. Su éxito no solo se debe a la trama inquietante y bien estructurada, sino también al ambicioso enfoque técnico que llevó a cabo.
Actualmente, Adolescence se encuentra disponible en Netflix, donde se ha mantenido en la posición número uno durante varios días. La serie ha abierto un nuevo capítulo en el uso del plano secuencia dentro de las producciones televisivas y especialmente ha puesto sobre la mesa la conversación acerca de la compresión del mundo adolescente contemporáneo.
