Miembros de la Cámara de Diputados guardaron un minuto de silencio por todos los asesinados y desaparecidos que hay en el país, en el contexto del hallazgo de un campo de exterminio en Rancho Izaguirre, ubicado en el en el municipio de Teuchitlán, en el estado de Jalisco.
El diputado José Luis Sánchez González, del Partido del Trabajo, desde su curul propuso este pequeño homenaje, “en memoria o por la vida de los desaparecidos sin abandonar la esperanza de encontrarlos”.
“Con profundo dolor e indignación quiero referirme a la crisis humanitaria y al crimen abominable de lesa humanidad que vive mi estado, Jalisco, la cual ha quedado exhibida con crudeza y descaro con el hallazgo en el municipio de Teuchitlán en donde se encontraron objetos y prendas de cientos de personas, aunque hay quien habla más de mil quinientas gentes que presuntamente fueron ejecutados y luego calcinadas y enterradas en medio de este sitio” señaló el legislador.
Por su parte, la diputada Paulina Rubio Fernández (PAN) expresó que esta situación no es exclusiva de Jalisco. “Apoyamos un minuto de silencio, que yo misma solicité para este mismo tema. Nosotros pedimos coordinación real entre fiscalías y se castigue a los responsables. No discursos. Nos sumamos al minuto de silencio”.
Luego de estas participaciones, el Pleno se puso en acto solemne y guardó el minuto de silencio por las víctimas de desaparición en México, las cuales se cuentan por miles en todo el país.
Hace una semana, integrantes del colectivo Guerreros Buscadores de Jalisco ingresaron al Rancho Izaguirre, Teuchitlán, y hallaron un presunto campamento de adiestramiento del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), así como evidencia de y al menos tres crematorios clandestinos.
El hallazgo, que ocurrió el pasado 5 de marzo de 2025, puso darse gracias a una llamada anónima que alertó sobre la posible presencia de restos humanos al interior de dicho predio, ubicado a 59 kilómetros de distancia de Guadalajara.
Durante la inspección del predio, miembros del colectivo localizaron al interior de una gran habitación un estimado de 400 zapatos. Desde tenis, sandalias y botas, hasta zapatillas y zapatos de vestir.
También se localizaron maletas de viaje y mochilas de distintos tamaños, colores y marcas ―incluyendo una mochila repartidora―; artículos de aseo personal; prendas de vestir femeninas y masculinas; libretas; libros; llaveros; fotografías; medicamentos y carteras.
