Bosque la primavera, un refugio natural poco conocido por los turistas que desafía la expansión urbana en Guadalajara

Este pulmón verde se formó hace 140 mil años por actividad volcánica, siendo clave por la biodiversidad y la estabilidad ambiental de la región además de que resguarda especies únicas

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El Bosque La Primavera ocupa
El Bosque La Primavera ocupa 30 mil 500 hectáreas y es vital para el equilibrio ambiental en Guadalajara. (X/@BosquePrimavera)

Ubicado al suroeste del Área Metropolitana de Guadalajara (AMG), el Bosque La Primavera es uno de los últimos espacios silvestres que sobreviven en una región profundamente transformada por la urbanización.

Este macizo boscoso, que abarca una superficie protegida de 30 mil 500 hectáreas, no sólo es un pulmón verde para la ciudad y un destino turístico, sino también un testimonio vivo de la actividad volcánica que moldeó el paisaje hace miles de años.

Según informó el sitio oficial del Bosque La Primavera, su origen se remonta a hace 140 mil años durante el último período geológico del Pleistoceno, cuando la actividad volcánica cubrió una vasta extensión de terreno con flujos piroclásticos.

De acuerdo con la misma fuente, los materiales expulsados por el volcán, como ceniza volcánica y piedra pómez, no sólo dieron forma al terreno, sino que también influyeron en la identidad cultural de la región. El nombre del estado de Jalisco proviene del náhuatl “Xalisco”, que significa “sobre la superficie de arena”, en referencia a estos depósitos volcánicos.

Un largo camino hacia la protección ambiental

En 1980, el bosque fue
En 1980, el bosque fue declarado Área Natural Protegida para preservar su fauna y flora. (X/@BosquePrimavera)

La relevancia del Bosque La Primavera no pasó desapercibida para las autoridades mexicanas. En 1934, durante el gobierno de Lázaro Cárdenas, se declaró una zona de protección forestal que incluía este bosque y otras áreas circundantes, abarcando aproximadamente 10 mil kilómetros cuadrados.

Sin embargo, no fue hasta 1963 que se dieron los primeros pasos hacia la creación de un parque estatal en la zona, bajo la coordinación de la Comisión Forestal del Estado de Jalisco.

El reconocimiento oficial del bosque como un espacio de utilidad pública y uso turístico llegó el 26 de diciembre de 1970, gracias a un decreto del Gobierno del Estado de Jalisco. Posteriormente, el 6 de marzo de 1980, el bosque fue declarado Área Natural Protegida (ANP) de carácter federal, bajo la categoría de Zona de Protección Forestal y Refugio de la Fauna Silvestre; este decreto marcó un hito en la conservación del área, estableciendo un marco legal para su protección y manejo.

En el año 2000, el bosque adquirió una nueva categoría bajo la legislación vigente, siendo designado como Área de Protección de Flora y Fauna La Primavera. Este cambio reflejó un enfoque más integral hacia la conservación de su biodiversidad, que incluye no sólo su vegetación, sino también las especies animales que habitan en la región.

Un modelo de gestión único en México

En 1980, el bosque fue
En 1980, el bosque fue declarado Área Natural Protegida para preservar su fauna y flora. (X/@BosquePrimavera)

El manejo del Bosque La Primavera se distingue por un modelo de gestión territorial que, según el sitio oficial del bosque, es inédito en el país. Este modelo se basa en la construcción de gobernanza, un enfoque que busca la colaboración entre diferentes actores para garantizar una atención transversal al área protegida.

Este esquema no sólo permite una administración más eficiente, sino que también fomenta la participación de la comunidad y otros sectores interesados en la conservación del bosque.

La importancia de este modelo radica en su capacidad para abordar los múltiples desafíos que enfrenta el bosque, desde la presión urbana hasta los incendios forestales y el cambio climático. Al ser un espacio natural rodeado por una de las zonas metropolitanas más grandes de México, el bosque desempeña un papel crucial en la regulación del clima local, la recarga de acuíferos y la provisión de servicios ecosistémicos esenciales para la población.

El Bosque La Primavera no sólo es un refugio para la flora y fauna de la región, sino también un espacio de gran valor para los habitantes del Área Metropolitana de Guadalajara. Su historia geológica, su biodiversidad y su papel en la mitigación de los efectos del cambio climático lo convierten en un recurso invaluable para la ciudad y sus alrededores.

Según el sitio oficial del bosque, su existencia es un recordatorio de la importancia de preservar los espacios naturales en un mundo cada vez más urbanizado.

A lo largo de los años, el bosque ha sido testigo de múltiples esfuerzos por garantizar su conservación y uso sostenible. Desde su designación como zona de protección forestal en la década de 1930 hasta su reconocimiento como Área de Protección de Flora y Fauna en el año 2000, el Bosque La Primavera ha demostrado ser un ejemplo de resiliencia y adaptación frente a los desafíos del desarrollo urbano y la presión ambiental.