
Los aranceles de 25% a México y Canadá anunciados por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, entraron en vigor este martes. Estos gravámenes universales -todos los productos de un país- se han considerado una medida muy estricta, si se contempla que la imposición de este porcentaje está dirigida a sus mayores socios comerciales.
México es el principal aliado comercial de Estados Unidos y envía más de 80% de sus exportaciones al mercado estadounidense, por lo que un 25% de aranceles será un golpe duro para una economía que vende a su país vecino desde autos hasta aguacates.
Ante esta medida, expertos en comercio internacional han advertido que la implementación de un arancel general impactará no sólo en las exportaciones, sino también en el crecimiento económico, el empleo, las inversiones, las remesas y el valor del peso mexicano.
No obstante, este lunes, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, pidió “temple, serenidad y paciencia” e insistió en que su Gobierno tiene “plan A, plan B, plan C y plan D”.
¿Qué productos se verían afectados en México?
El impacto de los aranceles podría repercutir en industrias como la textil, la automotriz, la de dispositivos médicos y la agrícola, que también dependen de la integración comercial del T-MEC, por lo que diversos sectores se han manifestado en contra de esta imposición de tarifas comerciales, alertando del impacto a las tres economías.

En nuestro país, puntualmente, podría verse afectado el costo de los cereales, frutas y frutos secos, tomate, cebolla, lechuga y repollo, aguacate, jugo de frutas, alimentos encurtidos, productos lácteos, huevo y miel, café, té y especias.
Así también, se incrementaría el costo de salsas y condimentos, productos horneados, cerveza y licores, productos de papel, fertilizantes, algodón, autos, telefonía celular e internet.
Así funcionan los aranceles
Los aranceles son un impuesto sobre los productos importados. Este debe ser pagado por el importador en el país que impone el arancel, en este caso, el importador estadounidense, al momento de que el producto extranjero llega a la aduana.
Dado que el importador debe afrontar un costo más elevado, generalmente transfiere una parte -o la totalidad- de ese aumento a los consumidores finales, o sea, los consumidores en Estados Unidos.

Con todo y este análisis, Donald Trump mantiene la postura de que los aranceles beneficiarán a los estadounidenses, ya que “generarán más ingresos para el gobierno” y “potenciarán la capacidad de producción nacional”, lo que, dijo, fomentará la creación de empleos y el crecimiento económico.
La mayoría de los economistas, no obstante, manifiestan que los aranceles no sólo afectarán a los países a los que se les impone, sino también a EEUU.