Jugo de manzana con arándanos: la bebida que otorga propiedades para aliviar la tos

La tos es un malestar muy común, muchas veces derivado de la gripe o los resfriados, lo que, además de convertirla en el medio perfecto para la transmisión de enfermedades, también la hace un síntoma muy difícil de controlar, pues puede aumentar su frecuencia y fuerza ante estímulos como el polvo o las bajas temperaturas.

El jugo de arándanos con manzana es una excelente opción para aliviar la tos, debido a las propiedades de ambas frutas. A continuación te explico los beneficios y cómo prepararlo en casa.

Propiedades antioxidantes: Los arándanos son ricos en antioxidantes, como los flavonoides y las antocianinas, que ayudan a reducir la inflamación y protegen las células del daño. Estas propiedades pueden aliviar la irritación en la garganta y reducir la tos.

Fortalece el sistema inmunológico: Los arándanos son conocidos por su alto contenido en vitamina C, que es crucial para reforzar el sistema inmunológico. Esto ayuda a combatir resfriados e infecciones respiratorias que pueden causar tos.

Propiedades antiinflamatorias: Tanto los arándanos como las manzanas contienen compuestos que tienen propiedades antiinflamatorias, lo que ayuda a reducir la inflamación de las vías respiratorias y la garganta irritada, aliviando la tos seca o productiva.

Alivio de la tos persistente: Las manzanas, especialmente las verdes, son ricas en pectina, una fibra soluble que puede ayudar a calmar la garganta y reducir la irritación, contribuyendo al alivio de la tos persistente.

Hidratación: Ambos ingredientes (arándano y manzana) contienen agua, lo que ayuda a mantener la garganta hidratada y a liberar la nariz de congestiones en las vías respiratorias, haciendo que sea más fácil de eliminar síntomas como la tos.

Propiedades antibacterianas y antivirales: Los arándanos tienen compuestos naturales que pueden ayudar a combatir infecciones bacterianas y virales, lo que puede ser útil si la tos es provocada por infecciones de las vías respiratorias superiores.

• Una taza de arándanos frescos o congelados (si usas arándanos congelados, asegúrate de que no tengan azúcares añadidos)
• Dos manzanas (puedes elegir manzanas rojas o verdes, según tu preferencia)
• Un vaso de agua (ajusta según el espesor que prefieras)
• Miel al gusto (opcional, para añadir dulzura y propiedades calmantes)

1. Lavar las frutas: Lava bien los arándanos y las manzanas. Si usas manzanas con cáscara, asegúrate de lavar bien para eliminar cualquier residuo de pesticidas. Si prefieres, puedes pelarlas.
2. Cortar las manzanas: Quita el corazón y las semillas de las manzanas, y córtalas en trozos pequeños. No es necesario pelarlas si prefieres aprovechar las propiedades de la cáscara, que contiene mucha fibra.
3. Licuar las frutas: Coloca los arándanos y los trozos de manzana en una licuadora. Añade el agua (puedes agregar más si prefieres un jugo más líquido). Licúa hasta obtener una mezcla homogénea.
4. Endulzar (opcional): Si lo deseas, agrega una cucharadita de miel, que tiene propiedades antibacterianas y es un buen suavizante para la garganta. Mezcla bien para que se disuelva.
5. Colar (opcional): Si prefieres un jugo sin pulpa, puedes colarlo usando un colador fino o una tela de queso. Si te gusta la fibra, puedes dejarlo tal cual.
6. Servir: Sirve el jugo inmediatamente para aprovechar al máximo las vitaminas y antioxidantes de las frutas. Puedes refrigerarlo y tomarlo frío o a temperatura ambiente.
7. Disfrutar: Puedes tomar este jugo varias veces al día, especialmente cuando sientas que la tos te molesta o tengas dolor de garganta. Es un remedio natural delicioso y refrescante.

Para potenciar los beneficios para la tos, puedes agregar unas gotas de limón al jugo. El limón tiene propiedades antibacterianas y es una fuente adicional de vitamina C que complementará perfectamente el jugo de arándano y manzana.

Este jugo es una excelente opción para aliviar la tos, fortalecer el sistema inmunológico y disfrutar de un sabor delicioso y refrescante.