Siguiendo la tendencia de la incidencia delictiva en México, Guanajuato se posicionó como el estado más violento durante el mes de febrero de 2025, pues acumuló un total de 241 homicidios dolosos entre el primero y el vigesimocuarto día del mes.
Los datos fueron presentados en la conferencia matutina de la Presidencia por Marcela Figueroa Franco, titular del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP) a partir de los reportes proporcionados por la Fiscalía estatal.
El número de asesinatos registrados en Guanajuato durante el segundo mes del año fue casi cinco veces mayor al promedio nacional, que en este periodo se posicionó en 49. Los crímenes ocurridos en esta entidad del Bajío representaron un 15.4% del total registrado en todo el país.
La estadística compartida por el SESNSP revela que la violencia tuvo una ligera disminución en los recientes reportes, ya que en enero fueron perpetrados 273 homicidios dolosos. En suma, durante el primer bimestre de 2025, Guanajuato fue escenario de al menos 514 asesinatos.
En las últimas semanas, autoridades estatales y federales han anunciado diversas capturas de alta relevancia, entre las que destacan la de Candelaria “N” (operadora del Cártel de Santa Rosa de Lima y ligada al asesinato de Gisela Gaytán Gutiérrez), Christian Alejandro “N”, alias ‘El Cholo’ (presunto jefe de sicarios del mismo grupo criminal) y Antonio “P”, alias ‘Junior’ (identificado como líder de una célula afín al Cártel de Sinaloa). Sin embargo, estos operativos no han provocado una reducción en la violencia.
Antes de abandonar la titularidad de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Rosa Icela Rodríguez Velázquez señaló que uno de los motivos por los cuales prevalece la inseguridad en Guanajuato es la concentración de riqueza en pocos sectores, pues desde la década de 1990 se promovió la acumulación de capital en el corredor industrial, lo que “acentuó el rezago educativo, la falta de acceso a la salud, los servicios básicos de vivienda y la precarización de las condiciones laborales”.
Otro aspecto que permite comprender la violencia que impera en el estado es su ubicación geográfica, ya que es un punto clave en el transporte de hidrocarburos. El poliducto Salamanca-León y la refinería de Salamanca se convirtieron en ubicaciones estratégicas para la extracción ilegal de hidrocarburos que, durante años, estuvo bajo el control de José Antonio Yépez Ortiz, ‘El Marro’, exlíder del CSRL.
Sin embargo, en 2017 el Cártel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) ingresó al territorio para disputar el control del huachicoleo y el de las rutas de narcotráfico. “De ahí comienza una virulencia, que era nada más local, ahí se convierte en virulencia más regional y nacional, donde empieza el incremento de la delincuencia organizada en los homicidios dolosos”, señaló en agosto de 2024 a La Jornada el entonces secretario de Seguridad de Guanajuato, Alvar Cabeza de Vaca.
