El pasado 13 de febrero, tres hermanos de dos, cuatro y seis años de edad salieron de su casa en Chiapas y fueron a la tienda. Los menores iban a comprar dulces con dinero que les dio su madre, pero no regresaron. Posteriormente, se dio a conocer que todos habían perdido la vida.
Los hechos ocurrieron en el ejido de San Cayetano, ubicado en el municipio de ‘El Bosque’. En un primer momento se informó que los niños, cuya identidad se mantiene bajo reserva, habían fallecido luego de ingerir comida envenenada.
Según los primeros reportes, los tres hermanos supuestamente consumieron pan que tenía veneno, el cual es comúnmente usado por los pobladores de dicha región para matar animales (como perros) en situación de calle.
Estos reportes fueron corroborados por la Fiscalía General del Estado (FGE), pues a través de un comunicado se informó sobre la detención de dos personas por su presunta responsabilidad en lo ocurrido.
“Nosotros tenemos detenidos a las autoridades del ejido de San Cayetano. Hay dos detenidos, de nombre Martín ‘N’ y Bartolo ‘N’. Son las autoridades que estamos indagando si fueron ellos quienes acordaron poner veneno para matar animales y que eso, de manera accidental, llevó a que los menores tuvieran la ingesta”, informó el fiscal Jorge Luis Llaven Abarca.
Incluso, el gobernador de Chiapas, Eduardo Ramírez, afirmó que la muerte de los tres menores tuvo que ver con “la ingesta de veneno”. Con base en los reportes periciales, las autoridades informaron que la causa de fallecimiento fue “falla orgánica múltiple por intoxicación”.
Aunque en un inicio se atribuyeron los decesos a pan envenenado, el fiscal estatal actualizó dicha información y aclaró que los menores no consumieron ningún alimento y que la causa de su muerte fue por haber inhalado un insecticida.
En entrevista con Azucena Uresti, el fiscal Llaven Abarca explicó que al terminar la necropsia de ley correspondiente, se tuvo conocimiento que los hermanos no habían ingerido pan envenado, toda vez que no se encontraron residuos en su estómago.
“Terminamos la necropsia y, efectivamente, la causa de la muerte fue falla orgánica múltiple secundaria. Aquí vale la pena aclarar que fue por intoxicación por inhalación de insecticida. Es decir, ya hicimos pruebas patológicas, porque cuando se hizo la necropsia no se encontraron residuos de comida en el esófago y estómago de los menores”, aclaró.
En ese sentido, informó que ya se investigan a las autoridades locales y a los familiares de los menores. Sin embargo, se desconoce el lugar donde los niños habrían inhalado dicho insecticida, es decir, si lo hicieron en su casa o durante el trayecto a la tienda.
Debido a que las indagatorias siguen en curso, no se ha establecido el tipo de insecticida que inhalaron los hermanos, el cual es usado de manera regular para la siembra de maíz. Pese a ello, el fiscal indicó que las autoridades encontraron varios botes de fertilizantes de productos químicos en la zona donde ocurrieron los hechos. Asimismo, descartó el hallazgo de piezas de pan.
Según los reportes oficiales, los dos niños fueron localizados desfallecidos en la tienda. La menor de los hermanos aún contaba con signos vitales y fue trasladada a una clínica de Chenalhó, pero minutos después perdió la vida.
