La historia detrás de la pintura antigraffiti desarrollada por científicos de la UNAM

Los graffitis han sido parte de la historia de la humanidad desde hace mucho tiempo debido a que las personas han tenido la necesidad de expresarse sobre superficies como las paredes y sitios casi inaccesibles.

De acuerdo con la Escuela Europea Des Arts, el origen de este arte urbano tiene su origen en el Imperio romano y aunque suele considerarse que hasta la década de 1960 comenzaba esta expresión, la misma institución menciona que “ya se utilizaban las pintas en las paredes con un enfoque satírico o de crítica”, e incluso especifica que “se buscaba ridiculizar algún elemento de la sociedad o de la política de la época, por lo que constituía un atributo de denuncia”.

Sin embargo, otras fuentes sugieren que desde la antigüedad se utilizaba el graffiti pero al ser una intervención que ha evolucionado y que se aplica en diferentes lugares del mundo, entre ellos México, un equipo de investigadores desarrolló una pintura que permite retirarlos de forma rápida con el fin de preservar monumentos históricos.

En el año 2001, Víctor Manuel Castaño Meneses y Rogelio Rodríguez Talavera junto a un grupo de investigadores del Instituto de Física de la UNAM, ubicado en el Campus de Juriquilla, Querétaro, desarrollaron una solución innovadora para retirar los graffitis de edificios y monumentos históricos.

Este avance, conocido como Deletum 3000, es una pintura con propiedades únicas que permite proteger superficies de las pintas realizadas durante manifestaciones o expresiones artísticas que no son del gusto de todas las personas.

Según informó Fundación UNAM, esta tecnología no sólo es pionera en su tipo a nivel mundial, sino que también representa un ahorro significativo en los costos de limpieza y restauración de inmuebles.

De acuerdo con la misma fuente, el desarrollo de esta pintura surgió como respuesta a la necesidad de preservar el patrimonio arquitectónico y cultural de México que frecuentemente es intervenido.

Para lograrlo, los investigadores del Departamento de Física Aplicada y Tecnología Avanzada de la UNAM llevaron a cabo un análisis exhaustivo de las pinturas comerciales disponibles hasta 2001. Este estudio permitió identificar las características necesarias para crear una solución efectiva que eliminara la pintura de aerosoles y otros materiales utilizados en graffitis.

De acuerdo con un boletín de la Dirección General el costo de este producto rondaba los $120 pesos por litro en aquel entonces y con esta cantidad era posible recubrir “superficies estimadas de 20 metros cuadrados”, según lo que señaló Rogelio Rodríguez Talavera.

El éxito de Deletum 3000 radica en su composición química, que incluye moléculas de polímeros con propiedades hidrofóbicas e hidrofílicas. Según detalló Fundación UNAM, estas características permiten que la pintura actúe como una barrera protectora en las superficies tratadas.

Al aplicarse sobre una pared, los componentes moleculares de la solución se separan durante el proceso de secado y la parte hidrofílica se adhiere al fondo mientras que la capa hidrofóbica se queda en la superficie.

Esta disposición molecular impide que las partículas de pintura de los graffitis penetren en la pared haciendo que estas se deslicen o se acumulen superficialmente y otro de los efectos que tiene esta invención es que en caso de que una superficie tratada con Deletum 3000 sea intervenida nuevamente, puede retirarse con mayor facilidad mediante un lavado sencillo o utilizando cinta adhesiva, lo que reduce significativamente el tiempo y los recursos necesarios para la limpieza.

De acuerdo con la misma fuente, el desarrollo de esta pintura además de tener implicaciones científicas, tiene impacto a nivel económico y cultural, pues antes de la creación del Deletum 3000, las instituciones y gobiernos locales destinaban sumas de dinero elevadas a la limpieza y restauración de monumentos así como de edificios históricos intervenidos con graffitis.

Con la implementación de esta tecnología, los costos asociados a estas tareas se han reducido considerablemente permitiendo que los recursos sean utilizados en otras áreas prioritarias.

Actualmente, Deletum 3000 es una marca registrada y se encuentra disponible en tiendas especializadas en pinturas. Según informó Fundación UNAM, este producto ha sido diseñado para ser accesible y práctico, facilitando su aplicación en una amplia variedad de superficies.