Qué es la polidactilia, el trastorno que padece David Tennant, el Doctor Who más popular

David John McDonald, mejor conocido como David Tennant, es un actor escocés de cine, televisión y teatro recordado por interpretar una gran variedad de personajes como Barty Crouch Jr. en Harry Potter y el cáliz de fuego o por dar vida a uno de los Doctor Who más recordados por el público.

Aunque suele compartir información personal en sus entrevistas, a principios de este mes el afamado actor confesó al diario de Reino Unido, The Independent, que tenía una afección poco usual .

De acuerdo con el medio británico, la condición del actor fue notada por primera vez por los fanáticos en línea, razón por la que se le preguntó a la ex estrella de Doctor Who sobre las especulaciones que circulaban en el sitio web Reddit y dijo que sí, que en efecto tenía polidactilia.

De acuerdo con el Instituto Nacional de Investigación del Genoma Humano, la polidactilia es una afección en la que una persona tiene más que la cantidad normal de dedos en las manos o los pies, es decir que se trata de una anomalía física que puede ocurrir como un defecto de nacimiento aislado.

El mismo instituto menciona que puede ser hereditaria o surgir esporádicamente en una persona e incluso señala que esta malformación “puede ser parte de un síndrome, es decir, un número de otras malformaciones que tienden a aparecer juntas en un mismo individuo”, especificando que no se trata de una cuestión genética.

Según Stanford Medicine Children’s Health, existen diferentes tipos de polidactilia. El primero se conoce como preaxial, que es cuando el dedo adicional está ubicado en el lado de la mano donde se encuentra el pulgar. Cuando está en el lado del dedo meñique se le denomina cubital o postaxial y si se encuentra en medio de la mano, la condición se llama polidactilia central.

Además señala que “los dedos adicionales suelen ser más pequeños que un dedo completamente formado”, detallando que su tamaño puede variar desde una protuberancia en otro dedo hasta uno con un hueso que lo conecta con el resto de la mano.

También explica que esto sucede en el proceso de formación del feto, pues cuando se desarrolla en el útero de la madre, la mano primero tiene forma de paleta y posteriormente se divide en cinco dedos aunque ocasionalmente llegan a ser más.

Stanford Medicine Children’s Health mencionó que los investigadores no están seguros de por qué sucede esto debido a que algunos casos son genéticos pero otros “tienen lugar junto con otras afecciones como la sindactilia”, que es la fusión de dos o más dedos de los pies o las manos.

El médico puede diagnosticar la polidactilia después de conocer los antecedentes médicos de la persona y realizarle un examen físico junto con algunas radiografías, pues con ellas suele ser más fácil confirmar el diagnóstico y mostrar a los médicos si hay otros huesos afectados en las manos o los pies.

A partir de la condición que tenga el paciente, el tratamiento puede variar considerando también el tipo de polidactilia y la ubicación del dedo adicional aunque generalmente se recomienda realizar una cirugía para extraer el dedo adicional.

En el caso específico de niños con polidactilia postaxial, la cirugía puede ir desde un procedimiento menor en clínica hasta una cirugía reconstructiva más compleja sólo en caso de que el dedo adicional esté completamente desarrollado.

Cuando un infante cuenta con un pulgar adicional, se recomienda realizar una cirugía reconstructiva que por lo general se realiza después de que cumple un año de edad. Esto con la finalidad de que el dedo sea lo suficientemente grande para que permita operarlo con una mayor precisión.

Según el tipo de cirugía requerida y la edad de quien presente esta afección, es posible que se necesite usar un yeso hasta que el área sane. Sin embargo, la terapia ocupacional también puede ayudar a reducir la rigidez y la hinchazón después de la cirugía.

De acuerdo con el sistema de atención médica Stanford Medicine Children’s Health, las visitas de seguimiento con el médico ayudarán a garantizar que el infante vuelva a utilizar la mano con normalidad, por lo que aconsejan seguir fielmente el protocolo.