La cocina saludable se ha convertido en un objetivo común para muchos y, en esta ocasión, te presentamos una receta que te ayudará a lograrlo sin renunciar al sabor.
Acompáñanos en un recorrido paso a paso que te llevará a la preparación de sopa de cebada a la jardinera, un platillo sabroso y nutritivo, perfecto para tu bienestar.
Este platillo proviene de "My Plane", un proyecto del Departamento de Agricultura del Gobierno de Estados Unidos.
Sopa de cebada a la jardinera
Rompa la cebada para preparar una reconfortante sopa en un día frío o lluvioso.
Ingredientes
46 onza de jugo de tomate bajo en sodio
1 lata de consomé de res bajo en sodio (14.5 onzas)
1 taza de cebada normal
1/4 taza de azúcar
1 cucharada de salsa inglesa (Worcestershire)
1 hoja de laurel
1/2 cucharadita de tomillo en hoja (machacado)
1/4 cucharadita de sal
2 tazas de calabacitas (picadas en trozos grandes)
1 tomate mediano (picado)
1/2 taza de pimiento verde (picado)
Preparación
Lávese las manos con agua y jabón.
En una caldera o una olla de hierro fundido, combine el jugo de tomate, el consomé de res, la cebada, el azúcar y las especias. Ponga a hervir y reduzca la llama al primer hervor.
Cocine a fuego lento durante 1 hora.
Añada las verduras. Ponga a hervir de nuevo y reduzca la llama al primer hervor.
Tape. Cocine a fuego lento durante 15 a 20 minutos o hasta que las verduras y la cebada estén suaves.
¿Cómo conseguir una alimentación saludable?
Cada persona mantiene un estilo de vida distinto, esto significa que las necesidades al momento de alimentarse podrían ser diferentes de caso a caso. Lo ideal es acudir a un nutriólogo o especialista para recibir ayuda especializada.
Sin embargo, existen una serie de consejos generales que pueden ayudar a mejorar el estilo de vida alimenticio y dar un primer paso para una vida más saludable.
Para lograr una alimentación sana y balanceada, los especialistas del sector salud recomienda aumentar el consumo de frutas, verduras y cereales integrales, así como incluir en la dieta, de forma moderada, todos los grupos de alimentos derivados de la leche, así como carnes, huevo, pescado y leguminosas, así como también grasas y aceite.
En contraste, se recomienda la reducción en el consumo de grasas saturadas, así como de azúcares y bebidas azucaradas y en su lugar optar por aceite de oliva, cártamo, soya o sustitutos de azúcar.
Sobre los horarios de alimentación, se recomienda comer tres veces al día y considerar dos colaciones, así como ingerir al menos dos litros de agua diariamente.
Es importante mencionar que si bien la nutrición saludable se refiere a la ingesta de alimentos en relación con las necesidades dietéticas del organismo, también debe estar acompañada de actividad física regular, para tener una buena salud.