La gelatina de macadamia es un postre exquisito que fusiona la cremosidad de la gelatina con el distintivo sabor suave de las macadamias, nueces famosas por su textura mantequillosa y un delicado regusto que persiste en el paladar.
Su sabor, ligeramente dulce y con un toque sutil a mantequilla, crea una experiencia única al integrar su textura crujiente a un postre blando, convirtiéndolo en uno de primer nivel. Además, las macadamias son reconocidas por ser ricas en grasas saludables, así como por su aporte de antioxidantes, fibra y minerales como el magnesio, que favorecen la salud cardiovascular y el bienestar general.
Esta gelatina, además de ofrecer un deleite al paladar, regala un toque nutritivo en cada bocado, perfecta para disfrutarla como un postre al final de una comida o incluso como un pequeño antojo en cualquier momento del día; además, su versatilidad permite combinarla con frutas frescas, un toque de miel o incluso acompañarla con una taza de té o café.
Cómo preparar una gelatina de macadamia
Ya sea como un postre ligero o como un snack nutritivo, esta gelatina de macadamia es una manera deliciosa de consentirse mientras se aporta algo positivo al cuerpo, además, su equilibrio entre sabor y beneficios a la salud integral la convierte en una opción ideal para disfrutar sin culpa.
Esta receta fue compartida por Marisa Lazo, fundadora de Pastelerías Marisa, en su canal de YouTube, donde ofrece experiencias, recetas y consejos para quienes desean adentrarse en el mundo de la repostería y la pastelería.
Ingredientes:
- Una lata de leche evaporada
- Una lata de leche condensada
- 5 cucharadas de azúcar
- 3 sobrecitos de grenetina
- Una taza de macadamia
- 1 litro de leche
Preparación:
- Coloca los tres sobres de grenetina en una taza de agua fría y remueve un poco para asegurarte de que la grenetina se disuelva de manera uniforme. Deja reposar la mezcla durante unos 20 minutos para que la grenetina se hidrate y se forme una especie de gel que luego se disolverá en la leche caliente.
- En una cacerola grande, coloca el litro de leche y caliéntala a fuego lento. Es importante no dejar que hierva completamente, sino que debe alcanzar el primer hervor y, en ese momento, retira la cacerola del fuego.
- Una vez retirada la leche del fuego, agrega la mezcla de grenetina hidratada a la leche caliente. Remueve bien con una cuchara de madera o batidor para asegurarte de que la grenetina se disuelva completamente en la leche y deja reposar por unos minutos para que se asiente bien.
- En la licuadora, coloca la leche condensada, la leche evaporada, el azúcar y las nueces de macadamia (puedes trocearlas un poco si prefieres que se integren mejor), y licúa todo hasta obtener una mezcla homogénea y suave.
- Incorpora la mezcla a la de leche con grenetina y remuévelo durante unos segundos hasta que todos los ingredientes se integren perfectamente.
- Humedece ligeramente un molde para gelatina con un poco de agua, esto ayudará a que la gelatina se desmolde con mayor facilidad una vez que haya cuajado. Vierte la mezcla líquida en el molde preparado.
- Coloca el molde en el refrigerador y deja reposar la mezcla durante un par de horas, o hasta que esté completamente cuajada.
- Una vez que la gelatina haya cuajado y esté firme al tacto, desmóldala cuidadosamente. Puedes hacerlo pasando un cuchillo por los bordes del molde para despegarla y luego volteándolo sobre un plato grande.
Propiedades nutrimentales de la macadamia
Las nueces de macadamia, originarias de Australia, son reconocidas a nivel mundial por sus múltiples beneficios para la salud. Según la revista Gourmet de México, este fruto seco es una fuente rica en grasas saludables, proteínas, fibra y una variedad de nutrientes esenciales que contribuyen al bienestar general del organismo. Entre sus componentes más destacados se encuentran los ácidos grasos monoinsaturados, conocidos por su capacidad para mejorar la salud del corazón, así como minerales como el magnesio, el calcio y el potasio, fundamentales para el funcionamiento adecuado del cuerpo.
De acuerdo con la publicación, el consumo regular de nueces de macadamia se relaciona estrechamente con la mejora de la salud cardiovascular, pues los ácidos grasos monoinsaturados que contienen ayudan a reducir los niveles de colesterol “malo”, mientras que aumentan los niveles de colesterol “bueno”, una combinación que disminuye el riesgo de enfermedades cardíacas y favorece una mejor circulación sanguínea.
Además de sus beneficios para el corazón, las nueces de macadamia destacan por su alto contenido en antioxidantes, como los flavonoides y la vitamina E. Según detalló Gourmet de México, estos compuestos son clave para combatir el estrés oxidativo, asimismo, las propiedades antiinflamatorias de las nueces de macadamia desempeñan un papel importante en la reducción de la inflamación en el cuerpo.
Finalmente, otro aspecto destacado de las nueces de macadamia es su impacto positivo en la salud cerebral, ya que, según Gourmet de México, los ácidos grasos omega-9 presentes en este fruto seco son esenciales para el desarrollo y el funcionamiento adecuado del cerebro, por lo que el consumo regular de nueces de macadamia podría incluso reducir el riesgo de enfermedades neurodegenerativas, como el Alzheimer, al proteger las neuronas del daño oxidativo y mejorar la comunicación entre las células cerebrales.