Con pancartas, disfraces y consignas, diversas organizaciones civiles se manifestaron en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México para solicitar la intervención del Gobierno mexicano en la realización del Proyecto Saguaro, el cual consiste en la extracción y distribución de gas por parte de la empresa Mexico Pacific. De acuerdo con los manifestantes, el propósito de esta operación plantea el tránsito de buques de carga que atravesarían el Golfo de California, lo cual pondría en riesgo a la vida marina de la zona, entre las que se destacan diversas especies de ballenas.
Para el evento, las organizaciones realizaron la campaña “¿Ballenas o gas?”, en la que recaudaron más de 200 mil firmas para oponerse a la realización del proyecto bajo el argumento de que el mismo dañaría al Golfo de California, conocido como uno de los ecosistemas más biodiversos del mundo.
En el acto, los activistas entregaron las firmas al Gobierno Federal, y añadieron que confían en que la presidenta Claudia Sheinbaum se sume a sus peticiones, pues señalaron que México goza del privilegio de contar con una líder del Ejecutivo, experta en el tema de lo climático:
“Hoy tenemos una científica climática como presidenta de México, algo que muchos países desearían tener dada la urgencia que hay por actuar con congruencia frente al clima”, expresaron.
Frente a Palacio Nacional, la manifestación contó con la asistencia de ciudadanos y ciudadanas que se sumaron en las actividades que organizaron los colectivos para exponer la preocupación que les genera que el proyecto afecte a las especies marinas de la zona, entre las que se encuentran, ballenas azules, grises y jorobadas, así como tortugas, delfines y hasta tiburones. También, apuntaron que la zona es importante para muchas familias mexicanas que dependen de actividades como la pesca, y que, de igual manera, podrían sufrir los estragos de un daño al ecosistema
“La principal causa de muerte de las ballenas son las coaliciones con grandes buques. Y además, si sobrevivieran, serían ensordecidas con el ruido que provocan estos navíos, ahuyentándolas del Golfo (...) Además, el Proyecto Saguaro significa agravar aún más la crisis climática”, dijeron los manifestantes, entre los que se incluían especialistas en biología y ambientalismo.
Entre las múltiples actividades, la marcha pacífica realizó un llamado a la atención en la crisis climática a través de un concurso de disfraces y una exposición de dibujos realizados por niños y niñas de diversas escuelas del país.
De igual manera, se realizaron actividades relacionadas a la lectura desde un enfoque ambiental con la participación de la biblioteca comunitaria Bunko.: “Siempre hay un libro que te hace sentir algo. Y hoy, parte de esta idea de pensamiento crítico que los libros generan, queremos que la gente pueda reflexionar y preguntarse qué está pasando en el mundo, por qué y qué podemos hacer”, dijeron durante el evento.