El martes, los precios del petróleo registraron un incremento debido a los comentarios de la portavoz de la Casa Blanca sobre posibles aranceles a las importaciones provenientes de México y Canadá. El precio del barril de Brent del mar del Norte ascendió un 0.53%, alcanzando los 77.49 dólares, mientras que el barril de West Texas Intermediate (WTI) experimentó un alza del 0.82%, situándose en 73.77 dólares.
Karoline Leavitt, la portavoz de la Casa Blanca, ratificó la intención del presidente Trump de imponer aranceles del 25% a los productos de México y Canadá a partir del 1 de febrero, lo que resultaría en un aumento en el costo del petróleo canadiense.
Adicionalmente, el mercado petrolero se vio afectado por la incertidumbre generada por posibles interrupciones en el suministro de crudo desde Libia. En tanto, el precio de la mezcla mexicana de petróleo se estableció en 69.63 dólares por barril el martes 28 de enero, según datos proporcionados por Pemex.
Según John Kilduff, de Again Capital, el precio del petróleo se encuentra en un punto de equilibrio, por lo que es susceptible a cambios ante cualquier factor que influya en el mercado. También se planteó la posibilidad de aplicar aranceles a productos provenientes de China, con una amenaza del 10%, aunque se dejó abierta la posibilidad de negociar. Esta combinación de factores, que incluyen tanto las políticas arancelarias como las potenciales alteraciones en el suministro, contribuyen a la volatilidad del mercado petrolero.
El petróleo crudo se clasifica dependiendo de los grados API (American Petroleum Institute), considerando valores menores a 30 como pesados y por arriba de 30 se definen como ligeros. En México se divide en tres tipos dependiendo de su densidad: Istmo, Olmeca y Maya.
Tipos de crudo en México
De acuerdo con indicadores de Pemex, de la producción petrolera en el país, el 54% es considerada como crudo pesado (Maya), el 33% como ligero (Istmo) y el 12% restante corresponde a crudo superligero (Olmeca).
Se considera que la mezcla Maya es la más competitiva de las mexicanas al ser la de mayor exportación, además de utilizarse como mezcla sustituta de las otras dos. Por tratarse de un crudo "pesado" tiene un menor rendimiento en la producción de gasolinas y diesel, sin embargo, gracias a esta característica, es la principal fuente de energía para la producción de energía para uso doméstico.
El Istmo, al ser un crudo ligero, puede dar mayor rendimiento en la producción de gasolinas y destilados intermedios (productos derivados del petróleo que se obtienen en el intervalo "medio" de ebullición, entre 180°C y 360°C).
La mezcla Olmeca está considerada como “extra ligera”, característica que la hace útil para la producción de lubricantes y petroquímicos.
Producción y exportación
Pemex experimentó durante el 2023 un incremento en su producción de hidrocarburos, alcanzando un promedio anual de 1.855 millones de barriles de petróleo al día. Este volumen representa un aumento del 5.1%, equivalente a 91,000 barriles diarios, en comparación con los 1.764 millones de barriles que produjo a lo largo de 2022.
De acuerdo con las cifras presentadas por la empresa productiva del estado en diciembre, señalan que durante 2023, la producción nunca descendió de 1.8 millones de barriles diarios. En el último mes del año, la producción diaria fue de 1.826 millones de barriles, en promedio.
El incremento en la producción se atribuye principalmente a la puesta en operación de pozos en nuevos campos petroleros, en especial Quesqui y Tupilco. En enero de 2023, la productora del estado logró superar la marca de 1.8 millones de barriles diarios, alcanzando su máxima capacidad de extracción del sexenio, nivel que sostuvo a lo largo del resto del año.