El euro se paga al comienzo de sesión a 21,20 pesos mexicanos en promedio, de manera que implicó un cambio del 0,63% comparado con la cotización de la sesión previa, cuando cerró con 21,33 pesos.
En referencia a la rentabilidad de los últimos siete días, el euro anota un descenso del 1,22%; sin embargo en términos interanuales aún conserva una subida del 18,91%.
Respecto de fechas pasadas, encadena dos sesiones seguidas en valores negativos. La cifra de la volatilidad presenta un rendimiento superior a la volatilidad que muestran los datos del último año, lo que indica que presenta mayores cambios que la tendencia general del valor.
El peso mexicano y el euro
El peso mexicano no sólo ha tenido un buen desempeño frente al dólar estadounidense, sino que también ha mostrado fortaleza ante el euro, considerando el último año.
La moneda mexicana, una de las pocas que no se han depreciado frente al dólar pese a problemas que afectan a nivel mundial como la inflación, ha registrado sus mejores números desde su mejor racha en el 2016.
Coloquialmente llamado como “superpeso”, la fortaleza de la moneda mexicana se debe en buena medida a las decisiones del Banco de México (Banxico) con respecto a las tasas de referencia, aumentando al mismo tiempo el atractivo para los inversionistas.
Con la estabilidad lograda este 2023 en las finanzas públicas y las remesas, el Gobierno de México ha estimado que se podría batir el récord de remesas del 2022 (58.487 millones de dólares).
En contraste, el euro se ha ido acercando a la paridad del dólar e incluso ha llegado a valer menos que un dólar, una situación que no se veía desde hace 20 años, en parte no sólo por la inflación mundial, sino también por la invasión de Rusia a Ucrania que trajo consigo la caída de materias primas.
Del súper peso a la depreciación
La relación peso-dólar durante el 2024 estuvo marcada por los contrastes. El año comenzó con la moneda mexicana fortalecida ante la divisa estadounidense. El billete verde llegó a venderse en 16 pesos por unidad, algo que no ocurría en casi una década. El mote de “superpeso” quedaba más que nunca.
Sin embargo, como fue avanzando el peso se fue depreciando debido, principalmente, a decisiones políticas, como la polémica Reforma al Poder Judicial y la eliminación de órganos autónomos.
El retroceso de la moneda azteca se agravó con la campaña de Donald Trump, su victoria electoral como presidente de Estados Unidos y sus amenazas de poner aranceles a todos los productos mexicanos –y canadienses– si México no mejoraba la seguridad en la frontera.
Fue así que el dólar regresó a los 20 pesos, quedando muy por arriba de los pronósticos del Banco de México (Banxico).
Para 2025, Banxico espera que el dólar cotice en una media que va desde los 20.24 pesos y hasta los 20.69 pesos, un pronóstico conservador considerando las repercusiones que traerían para el tipo de cambios los dichos y políticas de Trump en la Casa Blanca.
La inflación estuvo relativamente estable en 2024 rondando entre el 4%, a excepción de junio cuando casi alcanza el 6%, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
En este año, Banxico pronostica que la inflación estará por debajo de los cuatro puntos hasta el 3.8%.
En cuanto al crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), los bajos pronósticos se mantienen. El banco central espera un alza del PIB de apenas 1.2%.