Estos son los nueve cárteles mexicanos que serían designados como organizaciones terroristas por EEUU

El presidente Donald Trump firmó este lunes una orden ejecutiva, sin embargo, el listado de los cárteles del narco que serán incluidos todavía no ha sido revelado

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El Cártel de Sinaloa y
El Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación siguen siendo los grupos criminales con mayor poder en México. Foto: Infobae México

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este lunes 20 de enero una orden ejecutiva para designar a los cárteles mexicanos del narcotráfico como “organizaciones terroristas extranjeras” (FTO, por sus siglas en inglés). Esta medida, según indicó la Casa Blanca, busca enfrentar la amenaza que representan dichas organizaciones para la seguridad nacional y los ciudadanos estadounidenses.

Entre los cárteles mexicanos que podrían ser clasificados como organizaciones terroristas figuran dos de los cárteles trasnacionales: el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), pero también otros siete grupos criminales que operan a menor nivel y que han sido destacados en reportes previos de la Agencia Antidrogas de Estados Unidos (DEA, por sus siglas en inglés).

Aunque la orden ejecutiva no detalla aún cuáles cárteles serán designados formalmente, legisladores como el senador John Kennedy y otros funcionarios republicanos han identificado a al menos nueve grupos que cumplen con los criterios establecidos en la legislación de Estados Unidos.

De acuerdo con la legislación estadounidense una organización puede ser designada como “terrorista extranjera” si cumple con tres criterios principales. Primero, debe tratarse de un grupo con sede o actividades principales fuera de Estados Unidos, lo que asegura que se trata de una amenaza externa.

Segundo, la organización debe estar involucrada en actividades terroristas o tener la capacidad para realizarlas, lo que incluye actos como asesinatos, secuestros o el uso de armas explosivas, químicas o biológicas con fines violentos. Por último, dichas actividades deben representar una amenaza significativa para la seguridad de los ciudadanos estadounidenses o para la seguridad nacional, incluyendo la defensa, las relaciones exteriores o los intereses económicos del país.

Los nombres de al menos nueve cárteles del narcotráfico se basan en la propuesta presentada en 2023 por un grupo de 21 fiscales estatales, así como en la “Ley NARCOS”, promovida en el Congreso estadounidense. Para que la designación sea oficial aún aún debe pasar por una serie de pasos antes de concretarse.

Entre lo cárteles del narco que podrían ser incluidos se encuentran los siguientes:

1. Cártel de Sinaloa

El cártel de Sinaloa actualmente
El cártel de Sinaloa actualmente vive una guerra interna. (Anayeli Tapia/Infobae)

Considerado uno de los cárteles más poderosos por su nivel de alcance en el mundo, su capacidad logística, estructura transnacional y control de rutas le han permitido traficar a gran escala drogas como cocaína, metanfetaminas, marihuana y opioides como el fentanilo.

Actualmente el Cártel de Sinaloa vive una guerra intestina que ha enfrentado a dos de sus principales facciones: Los Chapitos, liderados por los hijos de Joaquín “El Chapo” Guzmán, y La Mayiza, que agrupa a quienes apoyan a Ismael “El Mayo” Zambada, detenido en EEUU el pasado 25 de julio.

2. CJNG

Autoridades de EEUU ofrecen una
Autoridades de EEUU ofrecen una recompensa de 15 millones de dólares por el narcotraficante. (DEA)

Es conocido por su extrema violencia y capacidad militar. El Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) se originó tras la fragmentación del Cártel del Milenio, también conocido como Cártel de los Valencia, a finales de la década de los 2000 y ha expandido rápidamente su influencia en México y a nivel internacional. Domina el tráfico de metanfetaminas y fentanilo.

Dirigido por Nemesio Oseguera Cervantes, alias “El Mencho”, uno de los hombres más buscados por Estados Unidos y México, con una recompensa de 15 millones de dólares por información que lleve a su captura.

Tiene presencia en al menos 23 estados mexicanos y mantiene operaciones en Asia, Europa y Sudamérica. Su expansión lo ha convertido en un objetivo prioritario para las autoridades estadounidenses.

3. Cártel del Golfo

Osiel Cárdenas fue extraditado a
Osiel Cárdenas fue extraditado a México. Imagen: Jovani Pérez/Infobae México

El Cártel del Golfo (CDG), una de las organizaciones delictivas más antiguas de México, se ha fracturado en varias facciones, entre ellas Los Metros en Reynosa, Los Rojos en Matamoros, Los Escorpiones en Río Bravo y Los Ciclones, con operaciones en Tamaulipas.

En noviembre de 2024, un juez federal autorizó la liberación de José Alfredo Cárdenas Martínez, conocido como “El Contador”, supuesto líder del CDG y sobrino de Osiel Cárdenas Guillén, al no encontrar pruebas suficientes en su contra.

Por su parte, en diciembre de 2024, Osiel Cárdenas Guillén, “El Mata Amigos”, quien encabezó históricamente al CDG, fue deportado a México tras cumplir más de la mitad de una sentencia de 25 años en Estados Unidos. Al llegar, fue trasladado al penal del Altiplano para enfrentar acusaciones por delitos de delincuencia organizada, narcotráfico y lavado de dinero.

El CDG sigue activo en actividades ilegales como el tráfico de drogas, personas y pesca ilícita en el Golfo de México.

4. Los Zetas

Aunque débiles, Los Zetas siguen
Aunque débiles, Los Zetas siguen operando. (Infobae)

Los Zetas surgieron en 1997 como el brazo armado del Cártel del Golfo y se separaron en 2010 para operar de forma independiente, convirtiéndose en una de las organizaciones criminales más violentas de México.

No obstante, tras la detención de sus líderes principales, Miguel Ángel Treviño Morales (“Z-40″) en 2013 y su hermano Omar Treviño Morales (”Z-42″) en 2015, el grupo se fragmentó considerablemente.

De estas divisiones emergieron varias facciones, como el Cártel del Noreste (CDN), que tiene su base principal en Nuevo Laredo, Tamaulipas, y Los Zetas Vieja Escuela, con actividades en estados como Hidalgo, Quintana Roo, Tamaulipas y Veracruz.

A pesar de la reducción de su poder, estas facciones permanecen activas en actividades delictivas como tráfico de drogas, extorsión, secuestro y robo de hidrocarburos.

5. Cártel del Noreste

El CDN sigue operando en
El CDN sigue operando en México. (Foto. X/@Eco1_LVM)

El Cártel del Noreste (CDN), una escisión de Los Zetas, mantiene una presencia significativa en el noreste de México, especialmente en Nuevo Laredo, Tamaulipas. En enero de 2025, las autoridades federales y estatales detuvieron a 27 presuntos miembros del CDN en el sur de Nuevo León, incautando un arsenal que incluía armas largas, un fusil Barrett y una ametralladora. Este operativo se produjo tras un aumento de la violencia en la región, incluyendo bloqueos carreteros y enfrentamientos armados.

Además, en Xalapa, Veracruz, se han reportado pintas atribuidas al CDN, indicando una posible expansión de su influencia en esa zona. A nivel internacional, el gobierno de Estados Unidos ha intensificado sus esfuerzos para extraditar a los hermanos Miguel Ángel y Omar Treviño Morales, conocidos como “Z-40″ y “Z-42″, acusados de liderar el CDN desde prisión.

6. Cártel de Juárez

Cártel de Juárez. (Infobae México
Cártel de Juárez. (Infobae México / Jovany Pérez)

El Cártel de Juárez, establecido en la década de 1970 en Ciudad Juárez, Chihuahua, es una de las organizaciones criminales más antiguas de México. Fundado por Rafael Aguilar Guajardo y Pablo Acosta Villarreal, el cártel ganó notoriedad bajo el liderazgo de Amado Carrillo Fuentes, conocido como “El Señor de los Cielos”, quien expandió significativamente sus operaciones de tráfico de drogas.

Tras la muerte de Carrillo Fuentes en 1997, su hermano Vicente Carrillo Fuentes, alias “El Viceroy”, asumió el liderazgo hasta su captura en 2014. En octubre de 2022 fue sentenciado a 20 años de prisión por delitos relacionados con el narcotráfico.

Actualmente, se cree que Juan Pablo Ledezma, alias “El JL”, lidera el Cártel de Juárez. Ledezma ha sido identificado como jefe de La Línea, el brazo armado del cártel, y ha estado implicado en violentas disputas territoriales en Chihuahua.

En años recientes, el cártel ha enfrentado diversos desafíos. En agosto de 2022, la Fiscalía General de la República extraditó a Estados Unidos a Carlos Arturo Quintana, alias “El 80″, líder de La Línea, acusado de múltiples delitos relacionados con el narcotráfico. Además, en octubre de 2024, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos sancionó a cinco miembros de La Línea por su participación en el tráfico de fentanilo y otras actividades ilícitas.

7. Cártel de Tijuana (Arellano Félix)

(Especial)
(Especial)

El Cártel de Tijuana, también conocido como el Cártel de los Arellano Félix, es una organización criminal mexicana dedicada al tráfico ilegal de drogas y lavado de dinero. Fundado en 1989 en Tijuana, Baja California, por los hermanos Arellano Félix tras la fragmentación del Cártel de Guadalajara, el grupo fue liderado por Benjamín Arellano Félix, con Ramón Arellano Félix como su segundo al mando. Durante las décadas de 1980 y 1990, el Cártel de Tijuana fue considerado uno de los más grandes y violentos de México.

En los últimos años, la influencia del Cártel de Tijuana ha disminuido debido a la captura y muerte de sus principales líderes. A pesar de su debilitamiento continúa involucrado en actividades delictivas en la región, enfrentándose a otros grupos como el Cártel de Sinaloa y el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) por el control de las rutas de tráfico hacia Estados Unidos.

8. Organización de los Beltrán Leyva

El declive de la organización
El declive de la organización criminal originó facciones. (Infobae México / Jovany Pérez)

La Organización de los Beltrán Leyva, también conocida como el Cártel de los Beltrán Leyva, es una organización criminal mexicana dedicada al tráfico de drogas y otras actividades ilícitas.

Establecida en Sinaloa, México, estuvo liderada por los hermanos Arturo, Alfredo, Carlos y Héctor Beltrán Leyva. Originalmente, colaboraban estrechamente con el Cártel de Sinaloa; sin embargo, en 2008, tras la captura de Alfredo Beltrán Leyva, alias “El Mochomo”, se produjo una ruptura entre ambos grupos, desencadenando una violenta confrontación. La organización sufrió golpes significativos con la muerte de Arturo Beltrán Leyva en 2009 y la captura de Héctor Beltrán Leyva en 2014, lo que debilitó considerablemente al cártel y llevó a su fragmentación en diversas células criminales.

A pesar de su debilitamiento, remanentes de la organización continúan operando en algunas regiones de México, entre estas facciones destacan Los Rojos, Los Ardillos y Guerreros Unidos, que operan en Guerrero.

9. La Familia Michoacana

(PGJ Edomex)
(PGJ Edomex)

La Familia Michoacana es una organización criminal mexicana que inicialmente operaba como autodefensas dedicados a combatir el narcotráfico en la región.

A lo largo de los años, la organización ha evolucionado y expandido su influencia a estados como Guerrero y el Estado de México. Actualmente, se identifica a los hermanos José Alfredo Olascoaga Hurtado, alias “El Fresa”, y Johnny Olascoaga Hurtado, conocido como “El Pez”, como los líderes de La Familia Michoacana.

En junio de 2024, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos impuso sanciones a ocho miembros de La Nueva Familia Michoacana, una facción del cártel, por su participación en el tráfico de fentanilo, cocaína y metanfetaminas hacia Estados Unidos. Estas sanciones buscan interrumpir sus operaciones financieras y limitar su capacidad operativa.

La inclusión formal de estos nueve cárteles en la lista permitiría a las autoridades estadounidenses utilizar medidas más agresivas para combatirlos, como el congelamiento de activos, el uso de jurisdicción extraterritorial y la cooperación internacional para su desmantelamiento.

Con esta designación, las organizaciones incluidas en la lista tendrán restricciones similares a grupos terroristas internacionales como Al-Qaeda y el Estado Islámico (ISIS). Según la legislación estadounidense, ofrecer “apoyo material” a estas entidades será considerado un delito grave, con penas de hasta 20 años de prisión, multas de hasta 250.000 dólares o incluso cadena perpetua, dependiendo del caso, explicó un exagente del FBI Alexander Drickersen a EFE.

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