Elementos de las Fuerzas Armadas (FFAA) y personal de Petróleos Mexicanos (Pemex) localizaron un túnel que era utilizado para el robo de combustible ―mejor conocido como ‘huachicol’― en el municipio de Tlaxcoapan, Hidalgo.
De acuerdo con los primeros reportes, el hallazgo del pasadizo subterráneo fue realizado por miembros de la Secretaría de la Defensa Nacional (Defensa) y la Guardia Nacional (GN) tras la detención de 12 personas que abastecían de manera ilegal una pipa con combustible.
El diario Milenio refiere que los hechos ocurrieron en un predio con una dimensión aproximada de 150 metros de longitud y 45 metros de ancho en la localidad de Teocalco. Ahí, además del túnel huachicolero, las autoridades localizaron tráileres y pipas, así como mangueras y otras herramientas utilizadas para el robo de hidrocarburo.
Un video compartido por el periodista Carlos Jiménez (@c4jimenez) muestra parte del túnel, localizado a cuatro metros de profundidad. Se informó que la excavación cuenta con diversas conexiones que eran aprovechadas por los delincuentes para extraer el hidrocarburo de manera discreta.
Respecto a las personas aprehendidas, el medio ya citado dio a conocer que eran los encargados de resguardar el predio. Ocho de ellos presuntamente son originarios de Hidalgo: seis de Atotonilco de Tula, uno de Tulancingo y otro de Tizayuca.
Los detenidos fueron trasladados a la Fiscalía General de las República (FGR), mientras que el predio quedó a resguardo de Defensa y la GN.
Huachicol en Hidalgo
El robo de combustible es una actividad delictiva que ha afectado de manera significativa a Hidalgo. Durante las últimas décadas, esta práctica se ha intensificado debido a la existencia de vastos ductos de Pemex que atraviesan el estado y la complicidad de redes delictivas.
Hidalgo ha sido identificado como un epicentro de huachicoleo debido a su ubicación estratégica y a la facilidad para perforar los ductos de Pemex. Las bandas criminales, con el apoyo de comunidades que ven esta actividad como una forma de subsistencia, realizan tomas clandestinas para extraer combustible, que luego se comercializa ilegalmente.
El auge del huachicoleo alcanzó niveles de alarmantes en enero de 2019, cuando la explosión de un ducto en Tlahuelilpan, Hidalgo, dejó un saldo de al menos 137 muertos. Este incidente visibilizó la magnitud de la problemática y los riesgos asociados a esta actividad. Desde entonces, el gobierno federal ha implementado políticas para combatir el robo de combustible, destacando el cierre de válvulas y la vigilancia de ductos.
A pesar de las medidas, el robo de combustible continúa siendo un desafío en Hidalgo, debido a la complejidad del problema ya su impacto social y económico.